Taehyung vive con Jungkook, quien es como su hermano, para él es el lindo chico que lo cuida todos los días, lo protege de todos los males y lo salva de sus horribles pesadillas.
Jungkook vive con Taehyung, su novio, que luego de ser secuestrado y a...
Cuando Taehyung despertaba de su pesadillas y finalmente reaccionaba al mundo exterior, en los brazos del azabache, siempre se confundía un poco.
—Jungkook, ¿Por qué lloras?
El azabache se limpió las mejillas, las manos de Taehyung dudaron en tomar su rostro, finalmente sus dedos dejaron caricias en los rasgos del menor, los pequeños mimos lo hicieron sentir mejor.
— Lloro porque tú también estás llorando— murmuró, con su voz quebrada.
Taehyung no respondió, continuó con sus mimos en su rostro, como si lo estuviera reconociendo, después de mucho tiempo, sus dedos peinaron el cabello azabache y medio largo del otro.
— Estás grande — murmuró, Jungkook lo miró con sorpresa, sin entender.
Le dolía tanto ilusionarse, pero no podía evitarlo.
— Casi no parece que yo sea tu Hyung— dijo, por lo bajo—, lo siento — Taehyung escondió el rostro en su pecho.
— ¿Taehyung? — Jungkook lo abrazó, sin saber qué más hacer—. No te disculpes, no es tu culpa... ¿Estás bien?
Taehyung asintió apenas, respondió algo pero no se entendió nada más que un murmullo.
— Taehyung, no te entiendo.
— Me... Me duele la cabeza, Jungkook.
— Tranquilo, quédate aquí, traeré algo para eso— dejó un pequeño beso en su frente, se despegó del abrazo y fue hacia la cocina, para buscar un pack de hielo, lo envolvió con un par de servilletas de papel y regresó al cuarto, para acomodarlo sobre la cabeza del castaño, se arrodilló junto a él, a un lado de la cama, los ojitos marrón claro del mayor lo miraron, sin decir nada.
Jungkook le sonrió apenas, quizás su sonrisa fue más triste de lo que quería, llevó su mano a una de las lindas y gorditas mejillas de Taehyung, que seguían empapadas en lágrimas.
— Jungkook.
— ¿Si, lindo?
— Si soy tu mayor debes decirme "Hyung".
Jungkook rió de forma honesta, Taehyung en verdad lo decía en serio.
— ¿Quieres que te diga Taehyung Hyung?
— Deberías — dijo, su ceño estaba ligeramente fruncido —. Pero me gusta que me digas... Cómo tú siempre me dices.
— ¿Taehyungssi?
— Mhm, es gracioso.
Se quedó en silencio, junto a él, dejado leves mimos, sus ojitos miel lo seguían mirando, con algo de curiosidad, como pidiendo respuestas.
— Te cuido porque te quiero mucho, Taehyung— murmuró él azabache—. No importa si soy menor, mayor, o lo que sea... Siempre te voy a cuidar porque te quiero, ¿Si? No te preocupes por nada más.
Taehyung asintió y sonrió levemente, sólo para dejarlo un poco más tranquilo.
Llevó sus brazos hacia el torso del menor, abrazándolo, y escondiendo el rostro en su pecho, dejando que Jungkook se recostara a su lado para afirmar el abrazo, aspirando el suave olor del azabache.
Otra cosa que le gustaba a Taehyung de Jungkook, es que siempre olía bien, suave, como a flores, a veces a vainilla, dependía del suavizante de ropa que usara, pero siempre era bonito, Jungkook era muy bonito.
Y se quedaba allí hasta que se sentía mejor, hasta que ya no quería llorar, noble dolía la cabeza, hasta que se olvidaba un poco que s sentía mal por hacerle tanto mal a Jungkook.
Taehyung se sentía mal por hacerle llorar a Jungkook, él también quería cuidarlo.
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