Los Placeres De La Vida

Relato 4

El Gran Vuelo.

Me deje llevar por sus gemidos y sus
movimientos, deje que ella pusiera
el ritmo y su cintura hizo gala de
destreza.
Hizo un huracán se movia con tal
velocidad que no tardo en arrancar
mis gemidos y junto a los de ella
hicimos una melodía.
Su cuerpo erizado, sudado pegado
al mio, que delicia sentir su calor,
su aliento en mis hombros y sus
labios mordiendo mis oídos.
Que delicia sentir sus senos llevar
el ritmo de sus movimientos y mis
labios pegados a ellos, mordiendo
y apretando sus pezones.
Ella se prendía mas y sus nalgas con
mas fuerza de mis muslos rebotaban
empeze a palmarselas, despacio, luego
más fuerte al sentir su respiración más
agitada y sus sentones mas fuertes.
Se arqueo e hizo su cabeza hacía atrás y
mordi mas su seno, mis manos apretaron
sus nalgas y le di mas velocidad a sus
movimientos al sentir como entre gritos
y arañones ella se escurria.
Que rico sentir su néctar hirviente mojando
mi falo y sus espasmos apretando... Que rico
Verla estremecer de placer y perderse de este
mundo entre sollozos y jadeos tratando de
regresar su alma que volando al cielo va.
En medio de ese orgasmo que por un buen
rato se quedo desechando esos fluidos que
nos llevan al infinito.
Sentirla y verla acabar de esa manera me
vuelve loco y descargo mi deseo en su
vientre mi ser palpitante, chorrea fuerte
ese espeso néctar que cuando ella lo siente
vuelve acabar.
Y así nos fundimos en un beso donde nuestras
bocas nos regresan al suelo despues de ese vuelo.