cuatro

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habían pasado exactamente tres semanas desde lo ocurrido en el celo de renjun

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habían pasado exactamente tres semanas desde lo ocurrido en el celo de renjun.

ambos seguían viviendo juntos, solo con la diferencia de que ahora compartían habitación.

jaemin se rehusaba a dejar solo a renjun, desde que lo marcó, en su interior nació un instinto grande de sobreprotección hacia él; además de notar un cambio drástico en la vida del omega, solo se la pasaba vomitando y le preocupaba.

— ren, ¿seguro que estás bien? es la cuarta vez que vomitas en el día — jaemin soltó esas palabras llenas de preocupación, la alimentación de su omega se había descuidado debido a los vomitos constantes.

— estoy bien, tranquilo — dijo el rubio mientras lavaba su rostro.

— es que, junnie — se acercó al lavatorio y acarició la espalda ajena — no puedes mentirme, te siento raro y en serio, me preocupa demasiado, mi lobo no deja de molestarme exigiendo saber la verdad y cuidar de ti cómo es debido.

— de verdad que eres terco, na — se volteo quedando cara a cara con el pelirosa, poco les importo que el olor a vomito siguiera — tengo la ligera sospecha de que me cayeron mal los fideos que pedí hace una semana.

— yo también comí de esos, debería estar igual o peor que tú, esta situación es confusa, bebé.

renjun no podía evitar sonrojarse antes ese apodo.

— ¡ya! jaemin, no me digas así que me pone mal — alargo la última vocal antes de esconderse en el pecho del alfa, la diferencia de altura era evidente — pero en serio, ya no le des tantas vueltas al asunto, voy a estar bien para mañana, ah ¡verdad! no te olvides que mis padres nos han invitado a desayunar.

— como olvidarlo, todavía no me siento preparado, siento que tu padre me va a matar de tan solo saber que te he marcado.

— no seas exagerado, mis papis te aman.

— como digas, bebé — dijo burlón antes de recibir un golpe de renjun en su brazo — ¡ay! no me pegues, soy una alfa sensible

— ¿ah si? sensible mi pe-

— bueno, renjun — se separó — ¿qué tal si vas a cambiarte mientras yo limpio y luego nos vamos a mimir? — el omega sólo rodó los ojos y salió del baño — ¡yo se que me amas, huang renjun!

— cierra la boca, na

— cierra la boca, na

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Cachorros ღ JaemRenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora