𝔹𝕦𝕥𝕥𝕖𝕣𝕗𝕝𝕪 𝕖𝕗𝕗𝕖𝕔𝕥.『2』

006

El frío de la cama vacía lo despertó, abrió los ojos tratando de adaptar su vista a la claridad del día.

Se levantó de la cama corriendo hacia fuera del cuarto y poder encontrar a su papá.

Jungkook le había dicho que hoy lo llevaría por fin a ver los delfines en el parque acuático, eso le emocionaba mucho y por supuesto ya sabia que ropa se pondría. Llegó hasta la sala pero no había nadie allí, se le hizo raro ya que esperaba encontrárlo sentado tomando su café, se dirigió a la cocina y un vaso con jugo de naranja junto a unos sandwiches llamaron su atención, caminó hasta la mesada quedando frente a ellos.

-¡Papiii! ¡Sí son tuyos me los comeré si no vienes!.-gritó, para luego sonreír traviesamente.

Su mirada se desvío en un papel que se encontraba bajo el plato, alzó el plato para poder agarrar el papel y lo primero que leyó, fue su nombre.

Un nudo se instaló en su garganta.

"Taehyung, no sé como decirte ésto o por donde comenzar porque no creo que haya una buena manera de decirlo, o que exista alguna para que cambie lo que sentirás.

Lo único que puedo decir es, lo siento.

Lo siento desde el fondo de mi corazón, jamás hubiese querido que las cosas pasarán así.

Jamás hubiese querido alejarme de tí, pero tuve que hacerlo.

Te amo más que a mi propia vida, y siempre lo haré sin importar el tiempo.

Espero que tú también.

Yoongi pasará por tí.

Y recuerda ; Siempre me llevaras en tú corazón, al igual que tú siempre permanecerás en el mío, mi hermoso bebé."

JK.

...

Una lagrima tras otra cayó encima del papel en sus manos, su corazón martillaba en su pecho tan rápidamente que cualquiera que hubiese estado allí, pudiera haberlo escuchado.

-N-no, no.. Ésto es.. E-es mentira, mi papi no se fue, n-no.. Él no me dejaría.-se quebró en llanto, déjandose caer al frío piso, se hizo un ovillo, abrazando sus piernas contra su pecho, su sistema nervioso empezaba a colapsar. Era como si de pronto una bola de nieve se le hubiese venido encima tan rápidamente que no logró siquita respirar antes de ser alcanzado por ella, se había derrumbado todo, todo lo que lo hacía sentir seguro, simplemente.. La persona la cuál lo hacía sentir que nada malo podía pasar, lo había abandonado.

Su vista se empezaba a nublar, pero ya no era por las lágrimas que salían sin parar, sentía un cosquilleo por todo su cuerpo, una presión en su pecho le dificultaba el respirar, pero antes de que todo se volviera negro alcanzó a escuchar una voz.

-¡T-taehyung!

[...]

Cuando sus ojos se abrieron, un dolor se instaló en su cabeza, sus ojos queriendo adaptarse a la claridad del sol que entraba por el vidrio delantero del auto.

Las ganas de vómitar se hicieron presentes apenas logró enfocar los árboles al pasar, sentía aún la opresión en el pecho pero está vez era diferente, bajó su mirada encontrándose con el cinturón de seguridad abrazandólo, sus manos pequeñas y temblorosas desabrocharon el seguro de éste, luego de varios intentos fallidos.