Nunca te dejaré

Capítulo tres.

Capítulo tres.

Desperté, mi vista era borrosa, una luz blanca me encandilaba, coloqué mi mano en mi rostro para poder enfocar bien la vista, me siento observada, miro a mi lado derecho y veo a una chica, vestida de blanco y al lado de ella había un flaco con una bolsa de suero. La chica me sonríe, miro hacia el frente y veo a Caitlin con un pañuelo el cual le cubría la boca y su nariz, sus ojos estaban rojos de tanto llorar. Miro hacia mi izquierda y estaba mi madre sentada en una silla, me tenía la mano tomada, sus ojos estaban llorosos, al verme sonrió, y se secó una lágrima que le caía por la mejilla.

-¿Qué pasa?-dije tocándome la cabeza, el dolor era insoportable-¿Por qué todos me miran?- Hubo un silencio, nadie respondió, sólo intercambiaron miradas -¡Respondan!- dije fuerte, pero luego la cabeza comenzó a dolerme de nuevo...Dios, el dolor era horrible.

Al momento de tocarme la cabeza, siento una especie de género que logro descifrar como gasa, estaba húmeda, la toco y bajo mi mano para ver qué era, cuando veo que mi mano tiene sangre. Me comencé a alterar, a pedir explicaciones, la enfermera me tomó del brazo y espalda cuidadosamente mientras me recostaba lentamente, me solté e intenté levantarme, pero mis piernas no las sentía y al momento de sentarme comencé a sentirme mareada y débil, los oídos se me taparon "recuéstate linda, recuéstate lentamente" escuché a lo fondo, obedecí la voz y comencé a recostarme.

Cuando estuve del todo recostada, la puerta de la habitación se abre y entra un doctor, alto y canoso. Detrás de él entró el director, dos policías y Esteban.

Esteban.

Al momento de que entraran, Esteban me miró, no me sonrió ni nada, solo me miró fijo y luego de un tiempo bajó la mirada. No me preocupé del director ni el doctor, sólo de que si Esteban me miraría o no...No sé porqué.

-¿Qué me pasó? Por favor doctor, dígame, nadie me dice nada- le rogué.

-Muy bien Ammy, en la escuela te golpearon en la cabeza dejándote inconsciente y fracturando el cráneo, tuvimos que colocarte en un coma inducido y....

-¿Coma inducido?-dije confusa-¿Qué? ¿Es...es verdad?- dije mirando a mamá- ¿Cuánto tiempo llevo así?

-Tranquila hija...está todo bien- dijo mi madre con un hilo de voz- sólo fueron unas semanas...deja que el doctor hable ¿Vale?

-Como decía...te fracturaron el cráneo y te dejaron tirada en el suelo, haciendo que perdieras la sangre suficiente como para necesitar de urgencia donantes, dejándote en coma.

-¿Con qué me golpearon?

-Con un fierro de metal puro.

-¿Hay algo que recuerdes?-dijo mi madre.

-No...Sólo recuerdo...no recuerdo nada-dije intentando recordar.

-Lo más mínimo que sea, inténtalo-dijo Caitlin, no paraba de llorar-disculpen-dijo saliendo de la habitación, Esteban la siguió, se veía enojado.

-Lo único que recuerdo es...vi a Claus entre la gente en la escuela y comencé a seguirlo...pero no lo alcancé- el policía comenzó a tomar nota.- lo vi entrar a la construcción de la escuela, donde están haciendo aulas nuevas, entré a una y lo último que recuerdo es el darme vuelta para salir.

-¿Claus?-dijo mi madre confusa- Ammy, tú sabes que Claus está...

-Era él mamá, yo lo sé.

-Discúlpenme-dijo el policía- ¿Quién es Claus?

-Claus era el novio de Ammy-dijo mi madre- falleció hace tres años...lo asesinaron y casi asesinan a Ammy.

-Lo siento mucho-dijo la enfermera- a mi novio también lo asesinaron.

-¿Ese caso está cerrado?-dijo el policía.

-Dejaron de investigar por falta de evidencia e información-dije desinteresada- quiero estar sola ¿se pueden ir?

-Tengo que terminar de tener tu declaración-dijo el poli.

-Lo que te dije es lo que recuerdo, no sé nada más, enserio.

-Intenta recordar algo más hija- mi madre estaba al borde de la desesperación y del llanto.

-Me duele la cabeza...-dije sintiéndome mareada, la vista se me nubló, me toqué la herida y sentí mi mano llena de sangre.

-Necesito que se vayan, ahora-escuché a lo fondo la voz del doctor. Mi vista cada vez se nublaba más, lo último que vi fue al doctor acercarse a mí.

Desperté, esta vez estaba solamente Caitlin, la pobre estaba con los ojos hinchados y rojos, su nariz estaba roja como un tomate, había llorado por mucho tiempo. Sin embargo...aún se veía estupenda. Ella nunca se ve mal. La vi, me vio y sonrió.

-Ay pequeña tonta...el susto que nos hiciste pasar- dice sonriendo.

-Fue sólo un golpe y un coma inducido nada más-dije sonriendo tomándomelo a la ligera y un poco molesta.

-Ay linda...no lo tomes a la ligera...nos asustaste.

-¿Te asusté?- dije un poco molesta- no te importé cuando tenía que contarte algo que era de suma importancia, te fuiste con James a coger a quizás qué lado.

-Ammy, lo...

-No termines esa oración y por favor sal de la habitación-dije firmemente evitando que se me corte la voz.

-Ammy...

-¡Sal!- dije sin mirarla, pero pude ver de reojo cómo se levantaba de la silla y se iba a la puerta, giró a mirarme, pero corrí la mirada, se dio la vuelta y salió. Una lágrima salió de mis ojos, miré hacia el techo, suspiré y me sequé la lágrima. Me prometí que nunca lloraría, y hoy no es la excepción. Tomé un vaso de agua y comencé a relajarme, cuando la puerta se abre lentamente.

-¡Quiero estar sola!- dije cerrando los ojos, pero la puerta se abrió completamente. Esteban. Lo que me faltaba.

-¿Qué quieres?- dije acomodándome en la cama.

-Ammy quiero hablar contigo de algo importante.- dijo entrando

-Nada debe ser importante que venga de ti y que me incumba a mí -dije enojada. NO QUIERO VER A NADIE MÁS JODER.

-Esto sí- dijo firme. Se dirigió a la silla y la llevó a los pies de la cama sentándose en ese lugar- verás...yo te vi ese día, no en la escuela, si no ESE día.

-¿De qué hablas? ¿Qué día?

-Estabas con un vestido blanco con rayas negras, tenías tu cabello tomado-dijo ignorando mis preguntas, miraba a la nada- estabas pálida, estabas bañada en sangre.

-Esteban ¿De qué estás hablando?- dije urgida...Dios ¿él sabe sobre esa noche?

-Tenías una punzada en tu costado derecho, era profundo...en cambio él...él tenía un corte en su cuello y un disparo en su tórax, él estaba muriendo.

-¿ESTEBAN DE QUÉ HABLAS?

-Intentaron sanarlo...le hicieron donación de sangre, pero el corte y el disparo fueron en partes mortales...murió a los 10 minutos después de la operación, pero estuvo consiente por un tiempo...en cambio tú...tú tuviste suerte, el corte no fue del todo profundo, no alcanzó a llegar a ningún órgano importante, te salvaste gracias a las donaciones de sangre que habían guardadas...-me miró, su mirada era fría pero comprensiva- tuviste suerte. Yo estuve con él en sus últimos momentos, escribió en una hoja de papel "Dile a Ammy que la amo y que por favor me perdone"-me cayó una lágrima.

> Sí, me lo sé de memoria- sonrió vagamente- Cuando te encontré en la escuela con la cabeza ensangrentada recordé esa noche, lo recordé a él y a ti juntos en el suelo lleno de sangre, Dios...era una imagen hermosa, aterradora...pero hermosa...sé que te resulta extraño, pero yo sé todo lo que te pasó y te está pasando. Nos conocemos muy poco, casi ni hablamos, pero créeme, te conozco.

Se levantó de la silla y se dirigió a la salida, cerró la puerta dejándome sola, sola con mis recuerdos y mis lágrimas que caían una tras otra.

70~