Capítulo 8

7.9K 691 193
                                    

8 de la noche.

El grupo de 6 chicas compuesto por 3 coreanas, 2 japonesas y una taiwanesa hacían su entrada en el enorme salón decorado especialmente para celebrar el día de San Valentín donde la música electrónica sonaba por todo lo alto y las luces de colores parpadeaban de un lado a otro.

Enormes globos rojos en forma de corazón y cupidos colgaban desde el techo, rosas rojas por todos lados, bebidas alcoholicas de todo tipo, chicas y chicos bailando en la pista y alrededor de las mesas.

—Wow...—Sonrió maravillada Momo al entrar de la mano con Dahyun.

—Esto me gusta.—Era Sana arrastrando de la mano a Tzuyu.

Y por último venía Chaeyoung tomando la mano de Rosé para que esta no se perdiera entre la gente.

—Por allá.—Señaló Momo. Todas asintieron y detrás de ellas  caminaron hasta una mesa vacía cerca de un rincón.

—Hermana no te emborraches de más, por  favor.—Dahyun le susurró a Chaeyoung. Ésta sonrió al recordar cómo Momo terminó arrastrándola hasta su habitación después de que  Tzuyu la llamarada avisando que sus padres estaban con Mina.

—Tranquila, hoy no beberé. Hoy no dejaré que Momo me haga tomar esas bebidas extrañas.—Río al recordar la noche anterior.

—¡No sé ustedes, pero hoy quiero emborracharme hasta perder la conciencia!—Sana dijo con emoción moviendo su cuerpo al ritmo de la electrizante música.—¿¡Momo estás conmigo!?—

—¡Claro que si, cuñada!—Respondió de inmediato y como no, la japonesa mayor era fanática de las fiestas.

—¡Ey tu, chico lindo!—Sana alzó la voz hacia uno de los meseros —Tráeme la mejor botella de whisky y vodka que tengan, por favor.—Pidió.

—Claro. ¿Algo más?—El apuesto chico a las demás miró sosteniendo su pequeña libreta.

—Un martini, por favor.—Pidió Rosé sentada  a un lado de Chaeyoung.

Tres jugos de naranja fue lo que más hermanas Son pidieron.

Tras tres brindis por cualquier cosa que a Momo se le ocurrió, las dos japonesas ya estaban bastante animadas, con los ojos más brillantes de lo normal, diciendo estupideces y riendo a carcajadas, contagiando a las demás.

—Vamos a bailar, bebé .—Momo se levantó y Dahyun no se hizo de rogar. Ambas entre la multitud se fueron perdiendo.

—Iré al baño.—Avisó Tzuyu levantándose un momento después.

—Te acompaño.— Rosè también se levantó—No debes ir sola al baño en estos lugares.—Dijo al ver que Sana no estaba tan sobria para pensar en eso.

—Gracias. Ahora venimos.—Chaeyoung asintió observando cómo también se perdían entre la gente.

—Chaeyoung...—Sana habló

—¿Mh?—

—No debiste traer a Mina...—Dijo en cuanto Tzuyu desapareció—Me da un poco de pena saber que está encerrada en esa habitación, sola.—Chaeyoung suspiró, también lo pensó en algún momento.

—Pues... Se lo merece,—Dijo un momento después al recordar todo lo sucedido—Se merece eso y más por haberme lastimado de una forma tan cruel...—El trago de Momo tomó y bebió—Mina es libre de salir a donde quiera, este barco es enorme, yo no le he prohibido salir a ningún lado.—Estaba molesta y dolida por las palabras bruscas de Mina hace un rato.

—Sabes como es ella, Chaeyoung.—Sana habló tranquila cerca de ella—A Mina no le gusta salir y mucho menos sola. Me siento mal por ella.—Suspiró.

7 Días (MICHAENG) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora