Uno de mis momentos favoritos del día, aunque parezca irreal, es llegar a la cafetería. Por el simple hecho de que al ingresar puedo aspirar el aroma tan característico del café que se está realizando, combinado con la música relajante que se está reproduciendo en ese mismo momento.Si bien al entrar por esa puerta todo ese momento me reconforto, lo que no quise llegar a ver es a Sun sentada en una de las mesas con los brazos cruzados, mientras tomaba un latte y miraba fijamente a la puerta. Eso no era buena señal. Lo único que significaba eso era que quería hablar conmigo, y de algo muy serio. La última vez que me encontré con ella de esta manera fue cuando ya habían pasado unos meses desde la decisión más grande que había hecho y trataba de persuadirme para volver a mi vida de antes. La cual por momentos me llego a convencer lo suficientemente bien como para hacerme dudar, pero al fin de cuentas algo me hacía retroceder y era ver a la gran multitud de personas. Y lo agradecía. Si bien no me aborrecía, me cansaba mucho estar siempre intentado estar al ritmo de las personas de mí alrededor.
Cuando llegue a su mesa, solo le pedí que aguarde un momento ya que tenía que presentarme para luego volver hacia ella.
—No sé qué pase ahora, pero por el momento no hice nada muy estúpido y llevo mi vida de maravilla – la contraataque antes de escucharla, solo por las dudas.
Ella solo suspiro y negó con la cabeza.
—Solo quería decirte, que quería hablar contigo sobre algo, o más bien sobre alguien—en ese momento me sonrió y yo aún no entendía nada—Ya llevas casi dos meses y medio en algo que aun no entiendo que es, con ese chico que no me acuerdo su nombre, ¿Yoonmi?—
—Primero y principal —comencé a enumerar los puntos con mi mano--, su nombre es Yoongi. Segundo, no hay nada. Simplemente compra café, lo paga, yo lo preparo y luego ambos volvemos a nuestros mundos—conteste—y fin. —
Ya habían pasado unas semanas que se convirtieron en casi tres meses, desde que el chico amargo comenzó a venir a la tienda. Ya me había dado por vencida en saber qué día o a que horario vendría, en otras palabras, me había resignado en tener el control sobre ello. Por lo cada noche me decía a mí misma lo mismo que pensaba antes de comenzar un examen: ¨Que pase lo que tenga que pasar¨
—Sabes a lo que me refiero—contesto—Se muy bien que te gusta, y-
Trate de callarla antes de que diga otra cosa no tan adecuada al espacio donde nos encontrábamos. Estaba roja como un tomate, normalmente me gustaba discutir sobre estos asuntos cuando estábamos solas y no alrededor de muchas personas que podían llegar a escuchar nuestra conversación, y eso mismo me llenaba de vergüenza.
—Está bien, está bien—trate de bajar la voz—.Puede que me parezca lindo, tierno y muy interesante. Pero—suspire para ir con la realidad—, nunca se fijaría en mí, además no lo conozco – solo negué con la cabeza—Sabes muy bien como soy cuando alguien me interesa, solo me gusta admirarlo desde afuera, y listo. Él hará su vida y yo la mía—
Y esa era la verdad que todos conocían. Me habían gustado dos o tres personas a lo largo de mi vida, pero eso no significaba nada. Tenía muy en claro cómo debía ser ante si ocurría eso. Alejarme de la persona o simplemente mirar de afuera, nada más. La razón de esto era muy simple, no quería que la persona supiera que le gustaba, porque ya sabría su respuesta, y lo último que quería es terminar con un último mal recuerdo del alguien el cual me intereso.
—A ver Minnie, es un poco obvio que por lo menos le interesas. Te pregunto tu nombre, y siempre trata de sacarte alguna conversación pero tú no le respondes. Eso lo demuestra—me respondió como si fuera una señal obvia—Además, se queda hasta el horario en que te tienes que ir, sentado en una silla tomando solo un café, si eso no es una señal dime lo que es–exclamó.
—Cortesía y que no tiene un lugar para quedarse ¿tal vez?—
A veces era muy pesimista o mejor dicho realista sobre muchas cosas. Como sobre este tema en el cual me sentía como si no fuera parte, o simplemente era una espectadora más, como lo era al leer mis libros. Me encanta el romance, y lo admito, me gusta leerlo y conocer las diferentes historias de cada persona, ya que en cada una había algo especial y mágico que era sin igual a otra. Pero más allá de eso, no sentía que pertenecía o que lo merecía. Varias veces de pequeña había fantaseado con que algún día encontraría a alguien, pero al pasar los años lo único que esperaba era en crecer yo misma como persona de manera autónoma y no conocer a nadie. Muchas personas a veces son crueles y no piensan en los demás. Y eso es lo peor cuando vives pensando el otro, sobreponiendo tus necesidades antes de las suyas. Esa era una de las tantas razones por las que me había alejado de la gente.
—Minnie, esta vez, solo por esta vez, quiero que me escuches de verdad—suspiro y cerro sus ojos por un segundo—.Quiero que hables con él, si quieres coméntale del clima, o de alguna recomendación de algún tipo de café, o síguele la corriente, pero dile algo más. Te prometo que no pasara nada más, solo te responderá. Confía en mí—
Lo había dicho de un modo tan serio y especial, que solo termine asintiendo a su pedido.
—¿Por qué quieres que hable con él?—
—Porque quiero que dejes de prohibirte todo a lo que le encuentras miedo y vivas más—y así, sin más se fue y me dejo pensando casi toda la noche.
¿Qué yo no vivía? Yo si vivía. Solo que a mi modo y disfrutando de la tranquilidad que me daba la oscuridad. Además, no quería conocer a más personas con Sun y mi familia me bastaba, y sobraba.
Así estuve toda la madrugada, pensando en lo que me había dicho y que podría hablar con Yoongi, iba a hablar con él, se lo había prometido a Sun y así lo cumpliría. Pero al más mínimo deje apático de él y cortaría toda conversación. Tal vez le hablaría del clima, pero eso sería bastante tonto al ser de noche. Podría recomendarle algo para que comiera de nuestra pastelería o tal vez algún otro tipo de café.
Estuve toda la noche esperándolo y no llego, ni tampoco el día siguiente u el otro. Hasta que un día, me canse de esperar. Ya no. Me dije a mi misma que Yoongi se había ido de mi vida, como tuvo que ser desde un principio y así lo cumplió.
Estaba por comenzar a realizar mi tarea diaria en mi computadora, cuando tres golpes característicos en la puerta me sacaron de mi mundo. Era él. No se había ido.
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Hola, cómo están?
Espero que se encuentren bien 💓
Yo les prometí un capítulo por día y acá esta el nuevo capítulo ❣️
Como no tengo mucho que decir, voy a promocionar mi one shot de Taehyung por si alguien quiere leerlo💕
Desde ya muchas gracias por darle una oportunidad a la historia 💗
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The Night I Met You • Yoongi •
FanfictionSiempre dije que la noche es mejor que el día, y aún lo sigo creyendo [Historia corta] - Min Yoongi Fluff Hetero