OBSESSED ━━ stiles stilinski ¹ ✓

020 . lydia's disappearance

CAPÍTULO VEINTE . . .
━━ la desaparición de lydia

STILES SE HABÍA SENTADO en la sala de espera del hospital durante veinticuatro horas seguidas después de haber traído a Lexi, justo después del ataque de Peter, tuvo que traerla con él, el alfa la usó como cebo para que Stiles hiciera lo que le pidiera, pero en el segundo que Peter se había ido, dejando a Stiles solo, llevó a Lexi todo el camino hasta el hospital, corriendo a una velocidad que ni siquiera sabía que tenía en él. Para cuando llegó al hospital, estaba empapado de sudor y a punto de colapsar por el agotamiento, pero nada de eso importaba, lo único que importaba era llevar a la chica al hospital y buscarle ayuda, después de haberla sentido sangrar una gran cantidad sobre su propia ropa, y sabiendo que tenía que apresurarse.

Lexi no se había despertado desde el ataque de Peter, estaba en una especie de coma, pero los médicos no sabían qué era, simplemente no se despertaba. Sus heridas se habían curado rápidamente, confundiendo a todos los que trabajaban en el hospital, pero lo que más los confundió es por qué ella todavía estaba dormida y no se despertaba.

Lydia era otra historia - Jackson la había traído tan pronto como la encontró en el campo de lacrosse, la chica se desmayó por la pérdida de sangre y ella tampoco se había despertado desde que la trajeron, pero la única diferencia era, que la chica no se estaba curando como su hermana gemela, lo que acababa de agregar más preguntas sin respuesta a Scott y Stiles, y cómo iban a ayudar a las dos chicas. Lydia no se estaba curando como Scott cuando fue mordido por primera vez por un alfa, y Lexi se curó más rápido que él, lo cual no tenía ningún sentido, ya que la chica aún no se había despertado, pero nada de eso podía agregar al ya gran estrés que estaba sintiendo, desde que Derek se convirtió en el alfa, y los cazadores en su máxima expresión.

Los cazadores sabían que Lexi y Lydia habían sido mordidas por Peter, un alfa, y si iban a intentar matarlos antes de que cambiaran, no había respuesta, y Scott no tenía ni idea. No tenía ni idea de lo que estaba haciendo, y lo odiaba - solo quería ayudar a las dos chicas, especialmente a Lexi, que había sido cercana a Stiles durante las últimas dos semanas, y ella también sabía de él...

Habían pasado dos noches antes de que Lexi abriera los ojos, el sueño restringía su visión mientras intentaba mirar a su alrededor. La chica no tenía idea de lo que le había sucedido, o dónde estaba actualmente, pero a juzgar por los pitidos de la máquina y los múltiples cables que entraban y salían de sus venas, estaba en el hospital. Lexi abrió los ojos por completo, gimiendo mientras lo hacía, mientras la luz que se filtraba por el pasillo le lastimaba los ojos, y pudo ver que estaba en una habitación grande, con un traje; se burló, por supuesto que su padre pagaría por la habitación del hospital de primer nivel como si fuera un hotel de cinco estrellas...

Lexi se congeló, cuando escuchó un ruido procedente de su lado izquierdo, instantáneamente, giró la cabeza para ver lo que había allí, solo para ver a Stiles y Scott, agachados junto a su cama de hospital, con los ojos muy abiertos, con miedo de que pensara la cosa completamente equivocada. Estaban revisando su mordida, nada más. —¿Hola? —Les preguntó la chica, su voz ronca debido al hecho de que no la había usado en unos días. Lo último que esperaba ver hoy era a los dos chicos agachados junto a su cama luciendo inmensamente culpables, como si los hubieran atrapado haciendo algo que no deberían—. ¿Están bien? —Preguntó, cuando notó que no se habían movido desde que los había visto.

—No es lo que parece —Scott fue el primero en hablar, levantando las manos en señal de rendición, esperando que ella no pensara que estaban haciendo algo que no deberían.

—Solo estábamos revisando tu mordida —Stiles le dijo, a punto de dar más explicaciones, solo para que la chica lo interrumpiera en pánico.

—¡¿Mordida?! —Preguntó, ahora sentándose, encogiéndose mientras lo hacía cuando sintió que su piel tiraba de su hombro izquierdo, la chica jadeó ante la repentina sensación, dándoles a los dos muchachos una mirada de pánico—. ¿No me mordió? —Presionó Lexi, esperando que hubieran querido decir que fue mordida por un perro o algo así... Cualquier otra cosa...

Scott negó con la cabeza. —Lo siento, Lexi. El alfa te mordió —Le informó a la chica, mientras se llevaba la mano a la boca, tratando de mantener el sollozo en silencio al darse cuenta de lo que eso significaba—. Tu mordida ha sanado... Lo que significa... —Continuó, solo para que Lexi negara con la cabeza ante sus palabras.

—No. No puedo ser... —tartamudeó Lexi, antes de que sus ojos se abrieran al recordar que su hermana estaba a su lado cuando ocurrió el ataque—. ¿Lydia? ¿Dónde está Lydia? ¿Está bien? —Se apresuró, intentando levantarse de la cama, solo para que Stiles la empujara hacia abajo, sabiendo que no debería moverse demasiado. La chica instantáneamente tomó su mano y le dio un apretón, asustada de que fuera a decir algo malo sobre su hermana.

—La herida de Lydia no está sanando como la tuya —Stiles le dijo, sintiéndose muy mal por la mirada angustiada en su rostro—. No sabemos por qué, pero aparte de eso, está bien, se está curando como lo haría cualquier otro humano —Explicó, por primera vez en su vida, no tartamudeó mientras le hablaba, ya que se sentía muy mal por la chica. No debería haberla dejado ir y encontrar a Jackson con Lydia, debería haber mantenido a las dos chicas a su lado y asegurarse de que no les pasara nada, pero no lo hizo, y por eso, ambas estaban en estado crítico en el hospital...

—Necesito verla —Lexi gimió, tratando de salir de la cama, pero Stiles la había bloqueado una vez más, Scott retrocedió con una mirada de culpa en su rostro—. ¿Qué? —Preguntó, viendo a los dos chicos darle una mirada que ella no entendió—. ¿Qué no me están diciendo? —Presionó, queriendo saber qué le estaban ocultando.

Stiles suspiró, mirando a Scott, quien asintió con la cabeza para que continuara, antes de mirar a la chica de la que estaba enamorado. —Ella no está en su habitación, Lex —Stiles le dijo, tomando su mano en la de él una vez más—. La escuchamos gritar y desapareció —Dijo, incapaz de mirarla directamente a los ojos mientras hablaba.

—¿Gritar? ¿Qué quieres decir? ¿Dónde está ella? —Preguntó Lexi, su corazón comenzó a acelerarse cuando le dijeron que su hermana ya no estaba en el hospital. ¿Dónde estaba ella? ¿Por qué había gritado? Un millón de preguntas pasaron por su mente... Quería encontrar a su hermana...

—Aún no lo sabemos, vamos a buscarla, estábamos revisando tus heridas nuevamente antes de irnos... —explicó Scott, mientras la chica empujaba a Stiles y se levantaba, sacándose los tubos de la piel, haciéndola libre.

—Voy con ustedes —Lexi anunció, una mirada de pura determinación en su rostro, una que Stiles no pudo evitar mirar con total asombro.

Scott miró hacia la puerta de su habitación del hospital, antes de volver a mirarla con una mirada de confusión, sin saber qué hacer. —Tus padres están afuera hablando con la policía —Él le informó, sabiendo que no podrían sacarla de aquí sin ser vistos.

Lexi se burló, insegura de por qué Scott pensó que un grupo de policías iban a impedir que encontrara a su hermana desaparecida. —Saldré por la ventana. No me quedaré aquí mientras mi hermana esté afuera —Ella argumentó, dirigiéndose hacia un bolso en el sofá que reconoció como suya, lo que significa que su madre debió haberle empacado algo de ropa para cuando se despertara. Lexi los miró a ambos con la ropa en la mano—. Eres un hombre lobo, Scott, ayúdame a salir por la ventana —Ella sugirió, sabiendo que estaría bien si Scott la ayudaba a salir de aquí.

Scott vaciló, mirando a Stiles en busca de ayuda, pero el chico solo se encogió de hombros, sabiendo que una vez que Lexi tenía su mente puesta en algo, nada la detenía. Scott suspiró. —Bien. Pero tienes que tomarlo con calma, todavía no sabemos mucho sobre tu condición —Le dijo, sabiendo que ella podía ser como él, pero no tenían ni idea hasta la luna llena en unas pocas horas.

Lexi asintió con la cabeza, corriendo hacia el baño para cambiarse a unos jeans y zapatillas. Iban a encontrar a su hermana.