♡Never pink butterfly♡ kth

_17_

(...)

De alguna forma, Jin me logro sacar de la carcel.

-- Doyeon se poco de lo que paso pero creo que es hora de que te apartes de ellos. Solo te han arruinado la vida.

Sonrei triste.

-- Yo debo hacer que esa mujer vaya presa, ella mato a una niña y conmigo casi hace lo mismo. Hasta con Tae... su hijo.

Comenté.

-- Esta bien, iremos por todas las pruebas que tengas y las dejaremos en la policia asi tengan la orden de detención.

Asenti.

-- Creo que es hora de hacerlo.

(...)

Ambos dejamos todo en la comisaría, dijeron que se encargarían de todo.

-- Ahora no regreses a esa casa.

-- Esta bien

Y aunque dije eso, no era lo que pensaba.

Necesito enfrentar esa maldita bruja.

Cuando pude escapar de la casa de Jin, sali vestida como lo haría Eun.
Y aunque seria la ultima vez que estaria allí.

Taehyung paso por mi lado, no me digne a voltear a verlo. Tenia un nudo en el pecho.

-- Pense que habias renunciado.

Hablo la señora Choi.

-- Volvi para hacer lo que vine, desde un primer momento a esta casa.
Necesito su ayuda señora Choi.

Conteste.

-- Dime, querida.

-- ¿Puede darme las llaves de la casa?

Pregunte.

-- Sabes que....
Esta bien.

Sonreí.

-- A las cinco necesito que salga de la casa. Por favor no pregunte porque.

Ella asintió.

No estaba segura de lo que haria.
Nadie mas sabia.

(...)

Y como todo, la hora llego.

Mis manos temblaban de alguna forma. Cerré toda la casa, todas las salidas.

Espere que Taehyung entrara a su habitación y cerre la puerta de afuera.

El al parecer me escucho por lo que comenzó a forcejear con esta.

-- ¿Señora Choi?

Pregunto el.

-- No, solo espera allí. Por favor.

Conteste temblando.

-- Doyeon, ¿¡Que vas a hacer!?
Abre la puerta.

-- Lo siento. Sabes que te amo. Siempre lo haré. Aun si no estamos juntos. Terminare lo que empece.

-- Doyeon, no.
Ella me dijo que va a matarte si te veia nuevamente.

Apoye mi palma en la puerta.

-- Yo no significo nada para ti.
No tiene sentido, si me mata estaras bien.

Hable.

-- Sabes que no es asi. Por favor, abre la puerta.

Ignore sus palabras y baje abajo.

Esto es lo que viniste hacer, no temas.

Me repetía a mi misma.