ʚ 30 Dᴀʏs OTP ɞ - 𝐊𝐚𝐦𝐢𝐝𝐞𝐤𝐮-𝐃𝐞𝐤𝐮𝐤𝐚𝐦𝐢

❛ Day 5 ❜

꧖๋ٜٜ🍒᳕᳕݊  Masturbación al pasivo :

R18 / +18

– Este tipo de contenido no es el que suelo escribir, porque, bueno, soy malisisisim@, así que perdón si esta algo mal redactado o es algo raro de leer :')) –

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rubio y peliverde se observaban.
Uno con ojos de cachorro y el otro enojado, o eso aparentaba.

– Izu.. –

Habló suplicante el de hebras rubias.

– Kaminari Denki, no. –

Fulminó con la mirada a su novio, ¿saben cuanto le costo esconder esas marcas de sus amigos?
Mucho, bastante la verdad.
Si bien se invento la escusa barata de " fue un mosquito ", era obvio que nadie se lo creería, pero, intento es intento.

Kaminari tomo de las mejillas a su novio, quien lo miro molesto.

– Kaminari Denki, si. –

Y le planto un tierno beso en los labios a el pecoso, quien al principio quiso hacerse el difícil, pero con que el ojiambar tocara sus mejillas, era prácticamente imposible molestarse.
Sin queja alguna correspondió el beso.

De apoco aquel beso tierno, fue tornándose a uno deseoso, era algo obvio, después de una semana de abstinencia, Kaminari quería probar todo lo del menor.
Entre besos el peliverde comenzó a jadear, en busca de oxígeno.

El ojiambar lo miro con una sonrisa ladina y con ojos deseosos, comenzó a besar el cuello de su novio, quien ya tenía un ligero problema ahí abajo.
Estaba inquieto, quería que su novio tocase esa zona sensible, pero luego se golpeaba mentalmente, ya que era totalmente vergonzoso.
Aún así, el deseo se encontraba ahí.
Aquello no paso desapercibido por el mayor y sonrío con malicia.

– ¿Pero qué tenemos aquí?, así que alguien me estaba deseando, ¿eh? –

Izuku sintió su cara arder, su novio era un pervertido después de todo.
Negó efusivamente, no quería demostrar lo sensible que era con tal solo aquello esos roces, que en verdad, le enloquecían.
Kaminari rió divertido, sabia bien como era su pecoso, y no diría nada por la timidez y vergüenza.

Paso su mano con delicadeza por su cuerpo, hasta llegar a la cintura de su novio, la tomó firme, mientras el otro solo escondía su rostro entre una almohada.