||You're mine, Angel.|| »Carl Grimes« ||c.r

|Capitulo 7: Puntería.

Cuando había salido de la celda en donde estaba Lizzie, voltee a ver la celda que quedaba a su lado, Glenn estaba relajado mientras se sorbía los mocos (agh). Volteó a verme y sonrió, yo le devolví la sonrisa y me apoyé en la verja. *7u7*

—¿Te sientes mejor? —pregunté.
—Sí. —sonrió—. ¿Cómo está Lizzie? —preguntó Glenn.
—Pues, habla como tapada. —reí recordando como hablaba—. Pero está bien, supongo. 
—Glenn sonrió—. ¿Tapada?
—Ed difidil de edplicadlo. —respondí burlón.

Glenn soltó una carcajada, luego asintió varias veces diciendo '' ¡Ah! '', ya que había entendido.

Dejé que siguiera sorbiéndose los mocos y salí de allí. No tenía nada que hacer, a donde dirigirme.

Todo estaba normal.

2 semanas después *no me juzguen, no se me había ocurrido ningún salseo para la novela*

Lizzie's POV:

Las 2 semanas más agitadas que he tenido desde que todo comenzó. Mika y yo nos habíamos recuperado de la gripe si no fuera por los medicamentos que habían traído. Estuviéramos muertas.

Hoy sería el día en el que Carl me enseñaría a disparar. Nos habíamos llevado genial durante la semana, se había convertido, bueno... por así decirlo, ''mi mejor amigo''. Sólo amigos, nada de besos. Creo que la última vez que nos besamos fué cuando declaramos nuestros sentimientos uno por el otro, ya me hacía falta.

Me dirigí a la celda de Carl para ver si podíamos empezar. Se encontraba en su cama leyendo un comic. Me paré al frente suyo:

—Me crucé de brazos y carraspee—. ¿Qué no iríamos a lo mío? —pregunté.
—¿A lo tuyo? —rió—.
—Rodé los ojos—.  Aprender a disparar, ¿lo olvidaste? —pregunté y luego fruncí el ceño.
—¿Yo? —se rascó la nuca y miró hacia otro lado—. No... claro que no... —dijo en voz baja.
—Puse los ojos en blanco—. ¡Lo olvidaste! —dije seria.

Carl rió y se levantó de la cama. Buscó dos armas y un paquete de municiones. Mi expresión seguía seria y creo que Carl lo notó.

Se acercó a mí y besó mi mejilla suavemente, luego rodeó mi cintura con sus brazos apegándome más a él.

—Te ves muy linda cuando estás seria.

Demonios, me sonrojé.

—Perdóname. —susurró en mi cuello.
—Carl... —musité.
—Por favor. —me suplicó.
—Bufé y sonreí—. Está bien, sólo vamos.

Carl rió y asintió, llevamos un pequeño bolso para guardar las armas y municiones, nos dirigimos al bosque en donde haya menos walkers posible. Carl dejó el bolso lo más cerca posible. Divisamos un Walker que venía hasta nosotros.

Tomé un arma. Carl me ayudó a ponerle el seguro y a silenciarla (demasiado fácil, duh). Pero ahora venía lo difícil.

La puntería.

Carl se colocó detrás mío, dejó que usara mi propia puntería y señaló en donde tenía que dispararle al walker.

En la cabeza.

Levanté el arma para apuntarle. Relamí mis labios y cerré un ojo para tener mejor puntería.

Temblaba, lo hacía y lo admito. [gif en multimedia]

Disparé.

El walker aún seguía arrastrándose hacia mí, sólo que aún más cerca. Usé mi cuchilla y lo rematé.

—A ver. —se posicionó detrás mío—. Es fácil. Sólo tienes que concentrarte. Apuntar bien a su cerebro y disparar. —musitó Carl en mis oídos logrando que me ruborizara. Estaba muy cerca de mí.

Vaya Carl, como no lo pensé.

Mis manos temblaban y mi corazón palpitaba más de lo normal. Tragué saliva. Otro walker se acercaba a nosotros y mi objetivo era dispararle.

Carl se acercó más a mí. Deslizó sus manos por mis brazos hasta entrelazar nuestros dedos y apuntar bien. Subió un poco más el arma para así apuntar mejor. Estaba nerviosa, nuestros cuerpos estaban totalmente pegados y nuestros dedos se entrelazaban, no pude evitar mirarlo fijamente como él a mí.

Sonrió tímidamente y yo lo imité.

—Y... sólo tienes que... apuntar a su cerebro... y disparar... —dijo Carl en voz baja, casi en un susurro mientras me miraba fijamente.

Sonreí más y voltee para dispararle al caminante.

Justo en el cerebro.

—¡Sí! —chillé—. Me separé de Carl y luego me voltee hacia él frunciendo el ceño—.
—Rió—. ¿Qué pasó?
—Agh, lo siento yo no soy así. —puse voz de macho pecho peludo.
—Carl soltó una carcajada—. Hey, le diste justamente en el cerebro, lo hiciste genial. —sonrió—.
—Sí—. Sonreí—. Gracias a tí—. Me acerqué a él—.

Carl sonrió y se acercó a mí. Ambos —con confianza— tomamos nuestras mejillas y nos acercamos. Nuestros labios se rozaban hasta que nos dimos un pequeño y suave beso. Fué corto, cuando nos dimos cuenta una horda de 15 caminante se dirigía hacia nosotros.

—¿Crees que podremos con todos ellos? —pregunté algo agitada.
—Hagámoslo. —sonrió y caminó hacia uno de los walkers y le clavó una cuchilla en su sien—.

Reí y comencé a rematar a todos los walkers que aparecían. De pronto la horda aumentaba más y nosotros estábamos totalmente exhaustos.

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gracias por leer, gracias a ustedes llegué a 1K, son las mejores<3

prox cap? idk.

xoxo, jerly

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