EL CIEGO Y LOS MENTIROSOS Parte I

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13 de Febrero del 2004

En la conversación que Anty sostuvo con Matías el día anterior, se enteró de que este tenía en su poder unas hojas sacadas de un extraño libro que trajo por alguna razón de su antigua escuela. Dichas hojas contenían unos escritos que aseguraban visualizar recuerdos del pasado o acontecimientos del futuro, según se deseé. Matías explicó de muchas maneras a Anty que solo eran hojas de algún libro de fantasía y que no juegue con este tipo de cosas, pero el castaño insistió en que le haga llegar dicho documento y se reúnan en su casa durante la tarde, ya que tenía mucha curiosidad
- Le dijiste a Matías que te preste esas hojas? - pregunta Simón sorprendido.

Anty sentado en el sofá de la sala
- No te preocupes, si se que es solo un libro de ficción, pero, no me vas a negar que es entretenido intentarlo.

El rubio se acerca a Anty y trata de explicar
- Es que no se trata de si es un juego o no, de si es real o falso, a mi me preocupa Matías.

Anty observa fijamente al rubio
- ¿Por que lo dices? Acaso... ¿dije algo malo?

Simón toma asiento al lado del castaño
- Es que tú no lo sabes pero... a Matías le sucedieron cosas horribles en ese lugar y me preocupa que le afecte recordar este tema que surgió con esas hojas.

Anty se siente culpable por lo que el rubio le cuenta y no tarda en acotar
- No puede ser... soy un idiota lo llamaré de inmediato para disculparme.

De pronto ve que desde los pies de Simón brota mucha sangre y empapa el suelo como una pequeña vertiente, el rubio ve el rostro de asombro del castaño y escucha su respiración entre cortada
-¿Anty? ¿Qué sucede?

El castaño levanta la mirada hacia el rostro de Simón y por detrás del rubio aparece repentinamente una cabeza con rasgos irreconocibles por el gran agujero y la sangre que emana de ella, escucha un extraño sonido en todo el salón similar al de muchos murmullos y un carraspeo gutural constante y desagradable.

Anty se levanta de un salto por el susto que dicha aparición le provoca, Simón mira por todos lados pero no hay nada
- hey, hey, ¡hey!... qué pasa... ¡Anty!

El castaño se mantiene congelado con la respiración agitada y los ojos llorosos. Simón abrasa al castaño para contenerlo entre sus brazos, siente como el cuerpo de Anty tiembla sin control por el miedo y una lágrima cae incontenible por el rostro del rubio.

- De verdad necesito saber que me esta pasando - susurra Anty con la voz entre cortada.

- Olvida lo que dije, te voy a ayudar en lo que sea con tal de que estés mejor -explica Simón mirando el rostro sonrojado de Anty para luego besarlo con suavidad en sus labios.

Mas tarde

Matías entrega con dificultad las hojas a Anty, quien se da cuenta de que está mas pálido de lo normal y con su piel sudada.

- Hay ciertos materiales que hay que tener en cuenta antes de comenzar y está demás decir que yo no me hago responsable de nada de lo que pase de aquí en adelante, crean o no en esto.

Anty recibe las hojas arrancadas en sus manos, el papel era suave a pesar de los años que visiblemente cargaba con su color y su letra escrita a pluma. Al leer lo que dice una de las hojas, levanta la mirada hacia los jóvenes y muerde sus labios con preocupación. Se percata de que el autor se llama Doel O'Connor.

-¿Doel O'Connor? Quien sea que fuera la persona que escribió estos papeles tiene mi apellido - comenta el castaño.

Simón y Matías comparten una expresión de preocupación.

- Se necesitan tres personas para realizar el ritual y digo desde ya que no participaré - explica Matías nervioso.

- Por favor que venga cualquier persona menos ED - murmura Simón entre dientes.

Más tarde

- Tu te sientas aquí ED, al lado de Simón y yo estaré frente a ustedes - Explica Anty en cuclillas frente a los jóvenes.

- Me gustaría saber que es lo que haremos en verdad Anty ¿podrías decirme? - pregunta ED en voz baja y con su rostro sonrojado.

Simón expresa un gesto irónico volteando los ojos sin disimulo y después de un pequeño silencio Anty sonríe y explica.

- El juego se llama el ciego y los mentirosos. Dentro de sus bocas colocarán estos pañuelos negros y sobre sus labios cruzarán esta cinta negra la cual amarrarán firme tras la nuca, la finalidad de todo esto es que no puedan pronunciar palabra alguna. ¿Ven el triángulo dibujado en el suelo? Acomódense cada cual en cuclillas sobre una de las dos letras escritas en cada punta, yo me pondré aquí sobre la letra A y me cubriré los ojos con una venda negra. Según estás hojas...

- ¿Que pasa? - pregunta Simón.

- Según estás hojas escucharé sus voces y uno de ustedes solamente me dirá la verdad a la pregunta que haré.

Los ojos de todos parecen salir de sus cuencas del asombro.

- Esto no resultará, es imposible - Explica ED.

- Bueno si no pasa nada, al menos es entretenido. Comencemos - Sonríe el castaño.

Al poner las hojas sobre el suelo de inmediato el ambiente se torna denso

- Permíteme Tharu escuchar la verdad, a través de tus palabras, a través de tus silencios.

Inmediatamente un aroma a vela y flores inunda todo el salón en el cual se encontraban, ED por un momento quiso levantarse pero Simón lo detiene y trata de calmarlo, Anty realiza la primera pregunta

- ¿Que es lo que pasa conmigo?

- Estás maldito - Se escucha una voz parecida a la de Simón pero acompañada de una voz más profunda casi como un eco.

- ¿Por qué tengo estás visiones?

- Por qué tu vida está forjada sobre la mentira, y debes pagar el peso de un mal del pasado

- ¿Quien me miente?

En ese minuto, Anty siente una fuerte debilidad en sus piernas lo que lo hace caer de espalda al suelo, pero no se golpea, más bien se produce un fuerte mareo y un silencio extremo. La incomodidad lo desespera y se saca la venda que lleva sobre los ojos, escucha nuevamente el viento a su alrededor, el rechinar de un lugar antiguo y el aroma a bosque húmedo, se encuentra en otro lugar.

LOS DE AL LADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora