Flirting Analysis for the Future [Katsudeku/Bakudeku]

3. Un manga shojo olvidado en un sillón

Algunos datos curiosos sobre Katsuki Bakugo (también «Kacchan»):

1. Sé que fue a clases de batería sólo porque tía Mitsuki le comentó a mamá que tenía un «cementerio de baterías en su patio trasero» (cita textual [subrayado dos veces]). Mamá está convencida de que exagera, pero no lo dudo.

2. Creo que le gustaba Ouran. No estoy seguro, pero sé que lo leía porque una vez explotó un tomo en la secundaria y negó haber sido él toda la vida.

3. Tía Mitsuki le regaló la colección completa de Sakura Card Captor. (Creo que Tía Mitsuki adoraba a Tomoyo).

4. Una vez lo oí decir, a nadie en particular, que la protagonista de Fruits Basket es una «pendeja» (cita textual [subrayado dos veces]; no sé por qué odia a Tooru, si es que la sigue odiando).

5. Le gusta Nightmare. Aunque [unos manchones que indican que se hizo alguna corrección] no sé exactamente qué opina del visual kei.

***

Esa vez no tiene un plan. Enero se acabó a velocidad vertiginosa y febrero no va por un mejor camino. Sólo quedará marzo y entonces la UA será sólo historia. Toda la clase A pasará a formar parte de las filas interminables de héroes profesionales y quizá Kacchan y él ni siquiera terminen en la misma ciudad. A pesar de todo, decide tomarlo con calma. No tiene caso hacerlo todo de manera precipitada si aún queda un poco de tiempo.

Ya no se siente tan valiente como al principio, porque dos intentos fallidos desmoralizan a cualquiera y probablemente Kacchan no tiene ni la más remota idea de que está perdiendo el sueño porque no puede declarársele.

Incluso All-Might se da cuenta de que algo no está funcionando bien con Izuku y eso lo hace avergonzarse. No puede defraudar a su mentor.

Cuando encuentra el tomo de Orange perdido supone que es de Uraraka o Ashido, aunque ninguna de las dos le dijo que lo está leyendo. También de Kirishima, que una vez declaró ante todo el mundo que leer shojo era algo varonil —seguramente, aunque Izuku no recuerda específicamente— después de que algún hombre se burlara diciendo que era «para chicas tontas». No es hasta que lo levanta que nota la quemadura en una esquina.

Kacchan siempre maltrata así todos los tomos de manga. Especialmente si lo hacen enojar.

Tiene cuidado con los libros, pero a veces tampoco lo puede evitar. Además, son detalles tan pequeños que apenas si son perceptibles.

Abre la primera página y encuentra la inscripción.

PROPIEDAD DE K. B.

SI LO MALTRARAS, MORIRÁS

NO HABRÁ PIEDAD

BAJO ADVERTENCIA NO HAY ENGAÑO

Todo en mayúsculas demasiado expresivas. Captan perfectamente el humor de Kacchan. Izuku sonríe con cariño, amparado por la soledad que lo rodea; nadie puede descubrirlo con las manos en la masa.

La verdad es que casi nadie sabe que Kacchan lee shojo.

Bueno, en realidad Kacchan lee todo, pero tiene colecciones enteras de mangas escondidas bajo el colchón —supone Izuku, mientras se pregunta dónde las guardará— entre las que hay suficiente shojo como para asegurar que es una afición del adolescente explosivo. No es algo que Kacchan esconda especialmente, pero es la primera vez desde que viven en los dormitorios que Izuku ve un tomo olvidado en las áreas comunes. Así que lo toma, lo ojea con cuidado y luego resuelve llevárselo.