あ 𝐀𝗣𝗛𝗢𝗡𝗜𝗔 ! ՞ ˖࣪
❛ I can't 𝘥𝘳𝘰𝘸𝘯 my demons, they know how to 𝘴𝘸𝘪𝘮 ❜
11 de febrero de 2014, 4:30 PM, Unidad 0-03, Fuerza Quds.
Se reporta la muerte del soldado identificado bajo el numeral 012587, Isak Thair, quien contribuyó a la vic...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐅𝐎𝐔𝐑 takayama in the midnight.
❛ you're not going to put that in your mouth, are you? ❜
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Para Gojo no fue extraño que Isak se quedara dormido apenas se subieron al tren, y de no ser porque lo arrastró hasta las suyas, sabía que se habría sostenido de alguna barra y quedarse de pie no iba a ser ningún impedimento para desconectarse del mundo en la más mínima oportunidad. Incluso a pesar de haberse tomado cuatro porciones preocupantes de café negro –excepto uno, que fue endulzado— todavía dormía como si la cafeína fuese una pastilla de vitamina C con sabor a naranja para tomarse antes de una misión y tener energía suficiente, sólo que para sacarlo a él de su estado de hibernación, seguro tendría que darle otras diez tazas y latas de café en el resto del día.
Por sí no fuese poco el hecho de que se pasaba la mayoría del día durmiendo, sus siestas eran más profundas que el sueño profundo que debería tener en la noche. Literalmente Satoru había intentado despertarlo durante todo el viaje en tren para al menos entretenerse preguntándole cosas de “sí” o “no”, pero su mejor resultado fue verlo removerse en su lugar antes de que siguiera durmiendo. “Ah, pero coloco una canción para despertarlos y me mira como si me quisiera arrancar la cabeza”, pensó, considerando que el hecho era injusto cuando sólo tenía buenas intenciones esa mañana.
En medio del viaje, Gojo sintió su mano hacerle cosquillas dentro de sus propios bolsillos al mirar el pasamontañas que no parecía ser un impedimento para dormir. Desde que había llegado se cubría el cuello con algo, y la mayoría de su ropa vista hasta ese momento era manga larga, así que era normal sentir curiosidad de qué había oculto tras tanta tela, ¿no? Isak se había sentido de la misma forma con respecto a su venda, pero él no tenía las mismas oportunidades que Satoru, si se apresuraba y lo bajaba un poco…
Lamentablemente, la voz femenina que próximo del altavoz al interior del tren avisando su llegada le arrebató la oportunidad justo en frente de sus ojos, cuando estaba cerca de rozar la tela negra y lanuda. Fingió que no había estado a punto de hurgar bajo el pasamontaña y se colocó de pie rápidamente, apurando al moreno para que se apresurara también. Todavía tenían una misión, y si los cálculos no le fallaban, Ijichi estaba esperándolos afuera de la estación para llevarlos a Takayama.
