Habilidades Paternales 101

Alejando

Cap.4

Camila POV

Manejar a mi casa a cinco millas por hora por debajo de la velocidad permitida estaba enloqueciendo a Lauren. No había dicho ni una palabra en los últimos diez minutos y cada tanto soltaba algún bufido de frustración.

"Deberías pensarlo mejor antes de subestimarme, Lauren. Si no puedo pensar en algo bueno, se exactamente a quien recurrir por ayuda." Una sonrisa se mostró en su rostro.

"¿Vas a llamar a Alejandro y asegurarte de que este en casa para el gran anuncio?" bromeó. "¿Quieres usar mi teléfono?" Alzó el teléfono en la palma de su mano.

Repentinamente me sentí nerviosa "Creo que tú debes llamarle."

"¿Yo? ¿Porque tengo que llamarle yo? No le agrado mucho, ¿Recuerdas Camz?"

"Por eso será mejor. Llámale y dile que ambos necesitamos hablar con él. No, mejor, dile que ambos tenemos algo que decirle. Su cabeza dará vueltas y se sentirá completamente aterrado para cuando llegué a casa." tomé el teléfono de su mano, marqué el número y cuando comenzó a llamar se lo devolví.

"Camz..." pero su protesta fue cortada por la voz de Alejandro en el teléfono.

"¿Hola?"

"Hola Alejandro. Soy Lauren Jauregui. ¿Como estas?" escondí mi rostro entre mis manos para no reírme. Lauren siempre sonaba tan educada cuando hablaba, pero ahora sonaba cautelosa, hasta nerviosa, mientras hablaba con mi padre.

"Bien Lauren. ¿Qué es lo que quieres?" Alejandro nunca era amable con Lauren lo cual siempre me molestaba así que esta era de alguna forma mi manera de vengarme de él. Esta vez no era diferente. Su voz sonaba acusatoria y molesta.

"Bueno, señor...um Camila y yo necesitamos decirle algo. ¿Cuándo cree que llegara a la casa?" No sé qué fue lo que me hizo reír más, si pensar en cómo Alejandro iba a reaccionar o ver a Lauren sufriendo en esta conversación. Eso seguía poniéndose mejor y mejor.

"Estaré en casa en una hora. ¿Qué es lo que sucede? ¿No puedes decírmelo ahora?" Lauren me miró en busca de ayuda. Yo me limité a negar con la cabeza y moví mis manos para que continuase hablando.

"No, señor no podemos. Preferiríamos hablarlo personalmente."

"¿Dónde está Camí? ¿Está bien? No esta lastimada o algo por el estilo, ¿verdad?" Ahora, la mente de Alejandro comenzaba a correr tratando de averiguar por qué Lauren le había llamado y no yo. Todo salía acorde al plan.

"Ella está bien Alejandro. No se preocupe." Lauren me pasó el teléfono y repentinamente, me sentí inspirada. "Hola papa. Estoy bien, solo que no me he sentido muy bien hoy, me siento mal del estómago. Te veré cuando llegues a casa." y cerré el teléfono antes de que pudiera escuchar mi risa.

"¿Mal del estómago? Buena jugada." Se río Lauren por lo bajo.

"Esto va a ser tan divertido porque va a caer en el anzuelo y lo picará." Una pequeña parte de mi se sentía mal, pero Alejandro necesitaba relajarse un poco más en lo que respecta a Lauren y a mí, y si no podía hacerlo por sí mismotendría que ayudarle.

Nos tomó mucho más llegar a casa con Lauren obedeciendo el límite de velocidad, así que no teníamos demasiado tiempo antes de que papa llegara a la casa. Tomé mis libros y salté del auto. Lauren estaba detrás mío, pero me tomó de la mano y me detuvo antes de entrar a la casa.

"Camz, conoces mejor a tu padre que yo, pero tengo que preguntarlo, ¿Puede Alejandro soportar una broma? No me parece que sea de la clase de persona que las toma bien..." tenía un tono bastante serio en su voz cuando lo preguntó.