Era la gran cita, Nessa había comprado un vestido no tan holgado para la ocación, se estaba estudiando enfrente del espejo, no tenía mucho busto ni trasero, no era voluptuosa, tal vez se odiba a si misma, termino en vestirse. Escuchó que abrieron la puerta, era Mike, el tenía una copia de llaves
—¡¿Lista?!—grito Mike, Nessa bajó y Mike solo sonrío—. ¿Nos vamos?—Nessa asintió.
Llegaron a la playa, había una manta en la arena, había una canasta
—Se que eres diferente y lo demás ya es cliché, así que busque la tranquilidad de la playa, donde solo escuchas las olas del mar y estas bajo la luz de la luna
Nessa sonrío, él la hacía sonreir, él era su felicidad. Terminaron de cenar y jugaron con la arena, accidentalmente Nessa cayó encima de Mike, sabía que era el momento, se besaron. Se besaron a no más poder, la escena cambio ya estaban en un cuarto oscuro besándose locamente. Esa noche fue especial para Nessa, había perdido su virginidad, con alguien que realmente amaba.
