I Don't Like You! [JS]

፝֯֟ Nueve ፝֯֟

Cap nueve: ¡Estúpidos instintos!

-Ya parece que todo eso del flautista ha ido olvidándose- Hoseok suspiró, casi con alivió.

Yoongi dejo de observar el suelo para prestar atención- Bueno, es que tampoco se le puede culpar por absolutamente todos los crímenes que hay aquí- se encogió de hombros- más cuando la mayoría de los causantes son atrapados.

El pelirrojo asintió dándole total razón- El pueblo solo habla de la evidente atracción que hubo entre un mosquetero y el flautista- lo codeó levantando las cejas.

El minino sintió el rostro caliente y refunfuño- el pueblo solo sabe hablar patrañas.

Hoseok se carcajeo, limpiando de la comisura de sus ojos inexistentes lágrimas- Ya, ya, mejor cambiemos de tema.

Suspiró- y dime, ¿Qué sucedió con la chica con la que bailaste ese día?

Levantó los hombros- Nada- Yoongi volteó a verlo con una confusión en sus ojos- ¿Qué?, Sabes que no me gustan las cosas serias, estoy bien así.

El felino se rascó la mejilla antes de volver a hablar- Lo sé, solo que ví tanta química, pensé que sería diferente está vez- Hoseok negó y luego sonrió.

-¿Crees que el haberlo afirmado tanto de adolescente fue una etapa?- río con su amigo acompañándolo- Moriré "solo" pero bañado en dinero, animalitos y amigos ¿Qué mejor que eso?

-umh, tienes razón.

Iba a agregar unas palabras más mientras caminaban por el pueblo, pero, algo pequeño y punzante golpeando su nuca lo hizo quedar callado.

Con disimulo viro el rostro hacia atrás suyo, sus orejas habían captado movimiento de un tercero, pero, no había nadie en su campo de visión.

Volvió los ojos a Hoseok, quien realmente no sabía para nada lo que estaba sucediendo.

No es como si a esas horas de la madrugada esté alguien en el pueblo. SeokJin se tomaba de una forma admirable su papel de Rey, y había enviado a sus guardias junto con algunos mosqueteros a patrullar las calles del pueblo.

Hoseok siempre lo había afirmado, el rey era alguien extraño y admirable, mientras que en otros reinos los nobles utilizaban guardias a su único beneficio, él se preocupaba por su gente. Como realmente debería de ser.

A Yoongi le causaba cierta gracia, porque realmente no lograba ni lograría ver a Jimin como un verdadero peligro(que es lo que notablemente preocupaba al rey), solo se hacía el misteriosito, aún así, él no era el único malechor que circundaba, aunque aquella actividad de patrullar se había realizado desde hace años.

Otro impacto contra su hombro lo hizo fruncir el ceño, y bajando la mirada abajo, descubrió una pequeña piedra.

Esto debía ser obra de Jimin, sin dudas.