Donde Taehyung fue educado en casa por su madre extremadamente religiosa, y él quiere ir a una universidad pública para poder tener amigos.
O donde Yoongi, estudiante de segundo año de artes visuales tiene un nuevo compañero que parece tener los pen...
Era muy tarde y Kim Taehyung no podía dormir. Estaba terriblemente frustrado porque aunque se encontraba acostado y arropado hasta el cuello como si fuera un niño, todavía no podía dormir para nada. Ni siquiera había bostezado en las dos horas y media que llevaba acostado mirando el techo. Para colmo su vecino estaba con algunos amigos en una especie de "fiesta" no era nada muy salvaje pero él no podía dejar de preguntarse si es que ese vecino no tendría que ir a la Universidad al día siguiente, porque sí, mañana comenzaba el semestre para Taehyung y asumió que también para muchos otros universitarios. La señora HyeEun le había dicho que en ese mismo piso viven dos universitarios, que si tenía algún problema con su carrera podía tratar de preguntarle a ellos, en ese momento a Tae le había parecido una buena idea pero ahora no sabía que tan buena sería, teniendo en cuenta que ya habían varias fiestas antes de que comiencen las clases.
Lo único bueno de ese día era que él sólo había podido tomar un bus hacia la iglesia más cercana y pudo escuchar la misa del domingo. Se sintió tan bien consigo mismo que le fue casi imposible no acercarse al padre al final del servicio. El Padre se llamaba DongSeok, le pareció muy buena persona y le terminó de convencer cuando dijo que él conocía al Padre HyunMin. Su madre se había equivocado, él no se dejaría tentar por el innombrable y menos ahora que tenía el apoyo espiritual de un cura de su propia religión.
Sonrió en la casi oscuridad de la noche, y es casi porque el joven Kim seguía sin poder dormir sin una pequeña luz de noche en la habitación. Estiró su mano hacia la mesa de noche buscando el celular que había comprado dos días atrás, miró la hora en este y simplemente apretó los ojos en clara señal de cansancio, él quería dormir y que mañana pueda ser un buen día en su vida. Se dio la vuelta para tratar de dormir pero luego decidió que lo mejor sería irse a dormir al sofá en la sala, allí no escucharía las risas de sus vecinos . Es así que se levantó un poco de mal humor y tomó sus almohadas junto con su manta para después salir de la habitación rumbo a la sala.
Una vez allí, dejó encendida la luz cuando se recostó en el sofá, Sus suposiciones habían sido correctas, en aquel lugar no se escuchaba nada de las conversaciones que aquellas personas en el departamento del al lado estaban teniendo. Colocó la alarma en su celular, sintiéndose repentinamente cansado, tal vez la causa de su insomnio repentino fue solamente el no tener el silencio adecuado. Se acomodó mejor en el sofá y dejó el celular en la pequeña mesa ratona, cerró los ojos y se abrazó a uno de los cojines, esperando la salida del sol muy emocionado.
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Marzo 15, 2020.
Seúl, Corea del Sur.
7:55 A.M
Prácticamente había estado corriendo desde que se bajó del bus, seguramente la gente lo consideraría un loco o que estuviera siendo perseguido por alguien, pero no era así, él solo era un universitario con el tiempo en su contra. Y es que, estaba preocupado porque él no conocía las instalaciones de la Universidad así que temía perderse y llegar tarde a la primera clase.
