¿Nueva Proxy?*

(Cap.10) Manicomio..

[ 3 dias despues ]

-Amm- Murmure por haber despertado repentinamente.

Me encuentro confundida, no recuerdo nada.. Estaba despierta pero por alguna razon extraña no abri los ojos, me pesaban demasiado.

-¿Hola?- Dije tratando de llamar la atención de alguien que estuviera cerca.

Nadie me contesto por desgracia. Lentamente empeze abrir los ojos con pesades.

Una vez que ya tuve los ojos abiertos, mire hacia todos lados.

No ahi nadie...

Estaba sobre una camilla, el cuarto era grande pero absolutamente, todo de blanco.

¿Ironico, no? Despertar, no ver a nadie y que todo el cuarto sea extremedamente blanco.. como.. como un..

Gruñi por todo el enojo que sentía en este momento. Me sente con dificultad en la camilla y me mire, tenia un cable conectado a mi brazo derecho y en mi brazo izquierdo tenia una venda, tapando la cicatriz que me había echo anteriormente. Agarre el cable con firmeza y me lo saque. ¡Auch! Dolio fuertemente en ese momento, pero luego el dolor iba desapareciendo.

-Hola..- Dijo, claramente una voz femenina de una chica.

Me quede sorprendida, mire hacia donde provenía la voz y había una chica. Estaba ahi, sentada en un rincon mirándome. Era alta, tenia el pelo castaño y ojos cafe.

-Hola.. hmm- Pronuncie con algo de desconfianza -Me podrias decir ¿En donde estoy, porfavor?- Le pregunte amablemente.

-Estas es un manicomio, niña- Me respondió la castaña con tono se diversión.

"¿¡Un Ma-maniconio!?.. ¿Como llegue aqui? ¿¡Saben mis padres de esto!? Ellos.. ellos nunca me dejarian aqui.. Ellos me quieren mucho como para hacerlo.. Oh eso creo..

Me quede callada, mi rostro no expresaba ningun sentimiento mas que el de confusión por lo de informarme en donde me encontraba exactamente..

-Gracias.. por decirme- Dije sin ganas, ahora no sabría nada de mis padres y ellos de mi por un tiempo -¿Como te llamas?- Le pregunte a la chica ya que parecía agradable por su aspecto.

-Un gusto niña, me dicen Kat- Me dijo alegre y sonrió -¿Y tu nombre es..?- Pronunció mirándome, para que terminara la oración.

-Mi nombre no importa por ahora- Le dije mirando a otro lado. Desconfío un poco de la gente que nunca antes había visto.. -Un gusto Kat, podrías decirme.. ¿Por que estamos aqui?

-Ps, por locas ¿No?- Me dijo bastante tranquila, como si no le importara mucho el tema.

-Estoy un tanto loca debo admitirlo- Dije y suspire -Pero no eh echo nada malo todavía..

Cuando termine de hablar, Kat me miro y nego con la cabeza, soltando alguna que otra risa. Como si no se lo creyera.

-No es lo que han rumoreado los doctores- Me dijo mirando hacia un costado suyo.

-¿¡Q-que te han dicho de mi!?- Le pregunte, acercandome un poco curiosa.

-Que..- Dijo aguantandose la risa -Que mataste a tu niñera- Dijo y se echo a reir de una manera poco normal.

¿Que yo mate a Lorena? No puede ser.. No, no y no.. No recuerdo haberle echo daño, aunque, por más que lo intente.. no lo recuerdo..

Hice como si el echo de haber 'matado' a Lorena no me importara en absoluto y seguí con la conversación -Y dime ¿Por que estas tu aqui?- Le segui la risa y luego me detube porque ella se callo al escuchar mi pregunta.

Trago saliva -Mate a mis padres..- dijo seria, su flequillo le cubría los ojos haciéndola ver un poco aterradora.

Me sorprendi y camine hasta mi camilla sin decir más nada.

Ya veo.. No creo que sea capaz de matarme.. Aunque mató a sus padres.. Su propia familia.. ¿Por qué lo abra echo?.. No es bueno preguntarle, puede enojarse y hasta termine muerta en cualquier momento..

Mire de reojo a Kat, me asustaba un poco por el simple echo de que hubiera matado a sus padres.. Trate de no pensar más en eso y me acoste,  quedandome dormida por el sueño que ya venía consumiendome hace unos instantes.

[ Al dia siguiente ]

Me desperte de golpe porque escuche que la puerta se abria con pesadez, haciendo un espantoso ruido.

-Muy bien, las niñas ya estan despiertas- Dijo una voz masculina vieja.

Un hombre con una planilla y la lapicera a un costado, entro y se sento al frente mio.

-¿¡Quien eres!?- Le grite enfadada _-¿Por que estoy aqui!? ¿¡Saben mis padres!? ¡¡Exigo salir de aquí!!

El hombre solo se limito a sonreirme calidamente, obviamente más falso que la virginidad de Lorena.

-Veras niña. Tus padres aprobaron que te puedes que quedar aqui por 2 semanas, por bueno emmm..- Dijo balbuceando lo ultimo al no encontrar las palabras correctas.

Para no seguir hablando, me mostro la planilla y ahi tenia la firma de mis padres en la parte de autorizacion para el establecimiento del manicomio...

Demonios.. tendre que aguantar aqui... dos horribles semanas..

-No te preocupes niña. Te ayudaremos con tu estado mental- Dijo mirando a la planilla y tomando apuntes.

-¿Mi estado mental?- Susurre sin entender de lo que estaba hablando.

El hombre hizo como si no me escuchara y luego de tomar los apuntes se marcho dejando dos bandejas de comida.

-Son para ustedes.. No lo desperdicien.. Es todo lo que les daremos hoy- Sonrió cinicamente y se marcho.

¿¡Es broma verdad!?.. Que nos dejen una bandeja pequeña con un pedaso de pan, un poco de queso y un vaso con leche. ¿Sea para todo el dia? Ya se quien es el demonio aquí.

Suspire, me toque la cabeza que me dolia y, comi un poco de pan con queso ya que tenía hambre. Sorbe un poco de mi leche por la pajilla y deje los restos en la bandeja. Kat hizo exactamente lo mismo.

La puerta se abrió, el mismo hombre que había entrado antes se hacía presente a un lado, mirándonos.

-Pueden salir- Dijo.

Sin mas preámbulos, sali. Mire hacía todos lados y me sorprendi un poco, habian muchos cuartos, demasiados diria yo. Y tan solo un pasillo largo que, si vas por la izquiera hay una cabina con un hombre con traje de seguridad diferente al resto, sentado, mirando hacia una cámara que eran de todas las habitacióne. Si vas por la derecha, sales por un gran parque con muchos arboles y personal de seguridad en varios lugares diferentes, todo para que ningún niño del manicomio intentará escapar.

-Hay que ir al parque, niña- Me dijo Kat.

-Esta bien..- Le conteste en tono de amabilidad.

La segui y cuando llegamos al gran parque, habian muchos niños, todos de diferentes tamaños y aspectos, pero no se pasaban de los 14.

Me aleje de ellos y me quede con Kat que estaba mirando los arboles con suma atención..