➵Capítulo 12

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Ambos se preocuparon al oír la noticia, así que no lo pensaron más y fueron a la escuela

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Ambos se preocuparon al oír la noticia, así que no lo pensaron más y fueron a la escuela.

-Evie, déjame explicarte lo que paso, ¿Quieres?-dijo mientras manejaba

-No quiero escucharte ahora, lo importante es que Astrid este bien, ¿Ok?-dijo mientras buscaba algo en el celular

-Esta bien-dio un pesado suspiro y siguió manejando

Llegaron a la oficina de la directora donde estaba Astrid y Amber

-Que bueno que llegan, tengo que hablar seriamente de la conducta de Astrid-manifestó la directora molesta

-La escuchamos-dijo Ben

-Agredió a su compañera sin razón alguna!-exclamó

-Yo le dije que ella me molestó y yo solo reaccione

-Ay por favor-dijo la directora- que tu no tengas a una mamá no significa tu acción

-¿Disculpe?-dijo Evie enojada-por si no lo sabe su mamá, soy yo

-No puedo creer que traté así a sus alumnos!-reclamó Ben-ahora mismo me llevo a mi hija a otra escuela

-Y hablaré con los directivos para que la corran y no vuelva a dar clases-dijo Evie enojada

Ben se dirigió a donde estaba Astrid, quien estaba llorando

-Vámonos mi amor-la tomó y la cargó

-Y para que lo sepa-dijo Evie-soy la hermana de uno de los inspectores de Educación y se va a enterar de esto

Salio de la oficina enojada, mientras que la directora salio de su shock y los siguió hasta afuera de la escuela

-Esperen señor y señora Beast-grito la directora-no tomen una decisión tan precipitada, son niñas y es normal que hagan todo esto

-La decisión ya la tomamos, cambiaremos a Astrid de escuela punto final, vámonos amor-dijo Ben decidido, le abrió la puerta y ella subió.

Se subió al auto y arrancó lejos de ahí, la directora sólo se quedó viendo como se alejaba el vehículo.

[...]

-Mami-llamó la pequeña-¿Ahora a que escuela voy a ir?-preguntó

-No te preocupes, mi niña, encontraré una escuela perfecta para ti-respondió

-No quería agredirla, pero me dijo que papá me había conseguido una mamá para verme feliz y que no me querías-dijo con voz quebrada

-No hagas caso, eso es mentira cariño, yo te quiero y mucho-sonrió

-Te quiero mami-la abrazo y sonrió

Llegaron a la casa

Astrid se había ido a su habitación a jugar, quería olvidarse del mal rato

𝓤𝓷𝓪 𝓹𝓻𝓲𝓷𝓬𝓮𝓼𝓪, 𝓾𝓷 𝓬𝓸𝓷𝓽𝓻𝓪𝓽𝓸 II𝓑𝓮𝓿𝓲𝓮II ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora