➵Capítulo 24

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Ben abrazo con fuerza a Evie, tenía que admitir que ya se estaba enamorando de ella, y esperaba que ella de él

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Ben abrazo con fuerza a Evie, tenía que admitir que ya se estaba enamorando de ella, y esperaba que ella de él. Seguían viendo la película, donde sólo pasaban escenas de besos, cosa que a Evie le encantaba.

-Tu me vas a volver cursi si seguimos viendo películas en donde sólo hay besos-dijo mientras le hacía mimos a Evie

-Ay por favor, tu ya eres un tierno y adorable cursi-sonrio

-Me encantas como no tienes idea,Evie-le dio un corto beso

-Y tu a mi Ben-sonrio-¿No tienes nada que decirme?-pregunto

-Eh...no-respondió confundido

-Astrid me dijo otra cosa-alzó una ceja

-Ahhh-respondió riendo

-Dame una versión en donde pueda creerte-dijo

-Conclusiones tu y mi hija son un par de celosas que no me dejan socializar con ninguna chica-se defendió

-¡Te dio su número!-exclamó

-Y Astrid lo utilizó para hacer confeti-dijo-ni tiempo me dio de anotarlo-bromeó

-Tú-entrecerro los ojos

-Sabes que no lo haría, aparte Astrid dijo que tu y yo ya estamos casados y que somos muy felices-dijo mirándola

Ella se sorprendió, al grado de casi ahogarse con su propia saliva, él sólo río por su reacción

-Ella te adora,Evie, y el casarnos ya es otra cosa, ya no fingiremos

-Nunca fingimos,¿O si?-el negó

El apagó la televisión, comenzó a besarla cada vez más apasionadamente,

-¿Estas Segura de esto?-preguntó

-Si-respondió

atacó su cuello, ambos sin decirlo querían dar el siguiente paso, poco a poco la ropa ya no estaba presente, nada parecía ya detenerlos.

Al día siguiente

Evie estaba aferrada a su ahora prometido, no quería levantarse pero hoy era un día importante, regresar al trabajo después de que ambos tomarán un fin de semana más 2 dias de descanso.

-Ben,cariño-lo movió-ya tenemos que ir a trabajar

-¿Uh?-preguntó

-Nosotros tenemos que ir a trabajar, Astrid no tiene clases por algo que paso en su escuela-respondió

Después de varios intentos, él se despertó, una sonrisa apareció en su rostro al recordar la noche anterior.

-Vamos, tenemos que ir-sonrio

-Mi padre nos dio permiso de llegar tarde-sonrio

-Ben-lo miro

-Hablo en serio, es más me prohibió entrar a la empresa, o mejor dicho nos prohibió entrar temprano-dijo enseñándole su celular

𝓤𝓷𝓪 𝓹𝓻𝓲𝓷𝓬𝓮𝓼𝓪, 𝓾𝓷 𝓬𝓸𝓷𝓽𝓻𝓪𝓽𝓸 II𝓑𝓮𝓿𝓲𝓮II ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora