"Mi nombre es Nana y seré tu guía el capitulo de hoy, colócate en un lugar cómodo y disfruta ;) "
Quizá nunca hayas escuchado sobre el termino incubo, pero habla de un ser demoníaco que forma parte de ti desde el momento en el que le abres las puertas.
Acompañame en este relato, y juntos descubramos el misterio detrás de todo esto....
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... Era de madrugada, me levante y agarre lo primero que encontré de la cocina; Debía entregar algunos proyectos y estaba algo retardada. Le había mensionado un poco del tema a mi querida compatriota y quedamos en reunirnos en una cafetería al caer el sol.
Estaba empacando lo necesario para empezar a trabajar, me había mudado de casa hace un par de días y digamos que todo estaba fuera de lugar. Rebuscando entre los libros, encontré uno bastante interesante; Titulaba como Exclavo Sexual, realmente era un libro peculiar y demasiado curioso como para dejarlo pasar por alto. Abrí el libro y sus páginas estaban completamente en blanco, imaginaba que era una clase de libreta. Me convenía mucho tenerla, la empaque junto a las demás cosas y salí del departamento.
Fui un rato al café Internet y saque algunas fotocopias para mi trabajo final de la universidad. Después de todo de ese trabajo dependía mi graduación.
Recibí una llamada de Kelly (La famosisima compatriota que mencionamos al inicio de el diálogo) aparentemente se había desocupado un poco antes de la hora de el encuentro. En ese momento yo había terminado con mis actividades así que decidimos encontrarnos un poco antes en la cafetería.
Cuando ya llevábamos un rato de charla kelly y yo, decidí mencionarle sobre el libro; A kelly no le parecía haberlo visto y no le presto mucha atención...
Yo en cambio sentía intriga, tenia que anotar algo rápidamente así que abrí el libro o podemos decirle libreta?.... Agarre mi plumón y empecé a escribir, en ese momento sentí una voz al lado de mi cuello. Le pregunté a Kelly que si lo había escuchado y respondió con un rotundo no.
Al despedirme de Kelly regrese a mi departamento, estaba agotada. Me recosté y quedé profundamente dormida; En el instante en el que cerré los ojos tuve una especie de sueño.
Recorría un pasillo y habían puertas en ambos lados; Ninguna llevaba a un lugar específico y la misma voz de la cafetería retumbaba en mi cabeza. Al llegar a la última puerta está se abrió y dejó ver a un chicos de cabellera blanca y ojos color rubí.
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Su miraba era penetrante... Y detallando más a fondo estaba fumando tabaco, recuerdo que no podía mover ni un musculo y desperté...
"Nadie logra mentir, nadie logra ocultar nada cuando mira directo a los ojos" (Paulo Coelho)