Oneshots chocapic de Auron y Reborn (y uno que otro intenabo).
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↪ Historias cortas y largas.
↪ Capítulos de toda temática.
↪ La mayoría de los oneshots estarán inspiradas en canciones.
↪ ¡Recuerden que todo es ficción!
El moreno intentaba ser lo más silencioso posible mientras caminaba por los largos y tenebrosos pasillos del castillo, miraba hacía ambos lados, procurando que ningún guardia esté bajo su campo de visión, intentó trotar en silencio mientras su salida hacia el exterior se veía más y más cerca.
Dió un paso en falso, ocasionando que el suelo diera un horrible chirrido que se expandió por todo el salón haciendo eco, Auron se asustó, y ya sabiendo que en cualquier momento los guaridas, las sirvientas y los mayordomos, irían dónde ésta el para encontrarlo nuevamente intentando escaparse.
Dejó ese pensamiento de lado para apresurarse e ir a la entrada principal, tomar el pomo, abrir, y cerrar detrás de sí. Sonrió eufórico y emocionado, a paso rápido fue dónde se situaba el pueblo, su recorrido era silencioso y oscuro, solo lograba ver las luciérnagas que se acercaban a los focos de los faroles.
Llegó a su destino, Auron tocó con sutileza aquella oscura puerta de madera, sabiendo que quién habituaba aquél pequeño hogar se encontraba despierto, espero unos segundos cuándo la puerta se abrió por completo, mostrando a un chico más alto que él, con el cabello castaño y desordenado, hermosos ojos verdes como el mismo bosque, su mirada era de cansancio y sorpresa.
- ¿Qué haces aquí? - Tomó su brazo con cuidado adentrándolo a su humilde morada.
- Te extrañé y quería verte. - El menor sonrió sentándose en la cómoda cama.
- ¿No te vieron? Te pudo ocurrir algo. - El mayor tomó su mano. - Estás helado. - quitó su abrigo para ponérselo al de mechón rubio, éste sólo sonrió con ternura. - ¿Por qué no me dijiste que vendrías? Te pude ir a buscar. - Dirigió sus pasos hasta su cama y se sentó a un lado suyo, atrayendo al azabache para abrazarlo, rodeándolo con sus fuertes brazos.
- Quería darte una sorpresa. - inclinó su cabeza hacía el rostro del mayor, mirando sus ojos. - Además no me pudo haber pasado nada, soy el príncipe después de todo. - Rió divertido, en cambio el castaño no rió, de verdad le preocupaba que algo le pudo haber pasado a su pequeño. - Ya, Reb, ya estoy aquí ¿ves? Nada me pasó. - Recostó su cabeza sobre su pecho, alzando sus brazos para abrazarlo por la espalda, el mayor se relajó al sentir las caricias de las pequeñas manos de su novio.
- ¿Tu padre no te regañará al saber que no estás en el castillo? - Preguntó, posando su espalda en el colchón mientras tenía al menor sobre su pecho.
- Nah, ni se dará cuenta. - volvió a reír, pero esta vez fue bajito, ocasionando una pequeña sonrisa en el mayor.
El mayor besó su frente y ambos cayeron dormidos bajo el cálido techo de Reborn. Por la mañana, éste fue el primero en despertar, para su sorpresa su novio no estaba junto a él, tal vez se fue más temprano al castillo, así el rey no descubre de sus escapadas nocturnas.
Salió de la cama y se dispuso a prepararse su desayuno, todo estaba normal.
Si...
Muy normal.
Al terminar, fregó los platos y fue a ducharse, se colocó su traje y fue a trabajar, las personas merodeando por los alrededores estaban más activas que los anteriores días, Reborn fue a su lugar de trabajo, que era, una pequeña pero elegante tienda de atuendos royales que él mismo hacía, ganaba muy bien gracias a eso.
El día fue normal, pero lo que le seguía inquietando era que ¿Por qué cojones la gente estaba tan inquieta y nerviosa? Bufó y decidió ignorarlo para luego dejar todo cerrado y terminar su turno de trabajo, al salir ya era bastante oscuro, lo que le impresionó era que habían un montón de hojas por todos lados, con curiosidad tomó uno de ellos.
Hasta que.
Vió a su novio en una de esas hojas.
Tomó otra y era la misma que la anterior, su respiración empezaba a cortarse, sentía como su corazón bombeaba con rápidez, el sudor frío de su frente caía lentamente, el escalofrío de su espalda era increiblemente incómodo, la ansiedad y el pánico lo carcomían al leer esa palabra