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[3 años después]

Se le había informado que naruto había regresado a konoha.

No podía ocultar su felicidad, quería abrazarlo y ver la persona en la que se había convertido.

Pero sólo había un inconveniente, y es que debía de haberse encontrado con naruto en la aldea y no en la oficina de la hokage.

Aquello se le hizo algo raro, pero decidió de ignorarlo, pues estaba muy emocionada por verlo.

Al llegar a la oficina de la hokage, se detuvo por unos segundos para tranquilizarse, respiro tratando de que los nervios se fueran de su cuerpo.

Al abrir la puerta, observó la espada de ese rubio, no pudo evitar que su corazón latiera con fuerza.

Pero toda la alegría se esfumó, cuando miro el rostro del rubio.

Aquellos ojos azules no tenían ese brilló característico de su amigo, en cambio eran opacos, como si el sol se hubiera apagado, además de que no sonreía, estaba serio, como si no le importara nada.

Na.. Naruro - susurro algo asombrada, tratando de pensar que aquello solo era un sueño.

Haruno san -

Aquello sí que no se lo esperaba, ¿naruto la llamó por su apellido? ¿Dónde estaba Sakura chan? ¿Qué había pasado?

Ni siquiera pudo preguntar, pues el rubio regresó su mirada a la hokage, la cual sólo frunció el ceño.

Y bien? -

Tsunade compartió miradas con jiraiya, el cual sólo alzó los brazos, dejándole todo el problema a ella.

Suspiró - si eso es lo que deseas, entonces está bien - miro con tristeza a la pelirosa que aún no entendía que es lo que estaba pasando - Naruto Uzumaki, estas aprobado para unirte a los Anbu

Sakura se quedó en shock ¿Anbu?, desde cuando naruto pertenecía a esos ninjas? ¿Aquello debía de ser un sueño? ¿No podía ser real?

¡¿Por qué todo estaba cambiado?!

Eso no debía de pasar.

Gracias, hokage sama - hizo una reverencia y caminó hacia la puerta, ignorando a su compañera.

Sakura reaccionó cuando naruto se había ido-¿que... Qué pasó?

Las mujeres miraron al peliblanco el cual solo suspiro, miró el techo pensado, buscando las palabras adecuadas.

Él... Él ha visto la crueldad de este mundo -

Aquellas palabras sólo preocuparon, aún más a las mujeres, ¿qué rayos había pasado en ese viaje?

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Naruto caminaba por la aldea, se tomaba su tiempo para llegar al lugar donde debía de tomar su nueva posición.

Con cada paso que daba, su dolor y agonía incrementaba, la desesperación y la tristeza comenzaban a hacer estragos en su cuerpo.

Quería correr, ocultarse, desaparecer y que nadie ni nada pueda encontrarlo.

Trato de respirar, debía de tranquilizarse, pero aun así esos sentimientos no lo dejaban en paz.

"tranquilo, pase lo que pase yo estaré a tu lado" -.

Proteger a nuestro sol - itachi x narutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora