Una mañana calida

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Pv Red:
Me desperté de mañana como siempre, me iba a levantar pero cierta linda lucario me tenía abrazado por la cintura como no queriendo que me escapase.

— Alicia, ya es hora de levantarnos - le digo acariciando un poco su rostro

— ño~ - dice somnolienta - yo me quedo en la cama - sumerge su rostro en la almohada

— también hay que bañarnos, sudamos mucho anoche y se lo mucho que te disgusta estar sucia

— no importa - me suelta y se tapa la cara con la cobija

— no dejas de otra

La destape completamente y la levante como princesa, la cargo hasta el baño, entramos y la bajo en la bañera

— TE DIJE QUE NO! - me regaña intentando golpearme

— te tienes que bañar - digo esquivando cada golpe

Cierro la puerta con seguro y le abro a la llave del agua fría y caliente para poder tibiarla, ya estando a un punto medio comienzo a enjuagar un poco la cabeza de Alicia

— creo que así si - dice un poco más tranquila al sentir el agua tibia - prosigue

Ella se sentó en la bañera y me dejo también acomodarme a mi. Cuando termine de enjuagar tomé el shampoo y me eché en las manos y empecé a tallar su suave pelaje, primero con su cabeza limpiando bien el cuello y detrás de las orejas, baje a los hombros dando un pequeño masaje en estos para relajarla, seguí con su espalda y su cola (al llegar a la cola Alicia intento golpearme por instinto, pero se detuvo justo a tiempo), seguí así con el resto de su cuerpo hasta que al final ella me dijo que yo me sentara para ayudarme con la espalda. Tomo el shampoo y comenzó a tallarme la cabeza, aunque sus patas no le permitieran mucho movimiento en el cabello

— que mal que no tengas mucho pelaje - dice cambiando de shampoo a jabón

— por que lo dices? - la volteo a ver

— por que si tuvieses pelaje podría ayudarte a limpiar bien todo tu cuerpo - empieza a bajar su pata más abajo de la espalda

Cuando cambió su pata a frente mío y bajaba lentamente la detuve

— no aquí, no es el lugar ni el momento

Quite su pata y le volví a abrir a la llave para poder enjuagarnos... salí del baño después de ella con la toalla rodeando mi cintura para cubrirme la parte baja del cuerpo

— bien, ya acabo de cambiarme - dice Alicia acercándose a mi - tal vez, pueda ayudarte con tu ropa - comienza a pasar sus manos por mi pecho

— puedo cambiarme solo - dije deteniendo sus manos por segunda vez - ya veremos qué hacemos en el día

Me cambie más rápido que de volada para que Alicia no anduviese de mañosa, acomode las sábanas en el cesto limpieza para que las laven, Alicia miraba curiosa cada cosa que hacía. Ya que termine todo decidí salir a buscar algo de comer, quedaban sobras de la comida de ayer pero Alicia se las acabó todas; abrí la puerta y allí estaba Cloe a punto de tocar la puerta...

— oh, hola Cloe, que te trae por aquí? - la saludo gentilmente

Ahora que ma miró bien, parece estar agotada, como si no hubiese dormido bien o si no hubiese dormido nada

— anoche escuché unos ruidos extraños, los cuartos de este lugar son antisonoros para la mayor comodidad de los clientes, pero ese ruido era excesivo, pregunte a los vecinos pero ellos no escucharon nada - dice bastante molesta con un tono adormilado

— pues... - pensé en una excusa - posiblemente fue algo psicológico, que no pudieses dormir por algún pendiente que tuvieras

— mmm... - pone su mano en su mentón - tienes razón, debíamos ir a casa de Ethen desde ayer, así que voy a pasar para alistar a Alicia

La Braixen sin previo aviso me hizo a un lado y entró al cuarto, cuando entró comenzó al olfatear en el aire buscando algo, el aroma que percibió la llevo hasta la lucario, quedando frente a frente

— acaso tu...? - me volteó a ver - tu lo hiciste? - su mirada se volvió sombría - como te atreves

Se lanzó a golpearme fuertemente, cuando al mismo tiempo se abrió uno de esos portales extraños permitiendo que cierto rubio se asomara recibiendo el golpe por mi

— HO...! - cae al suelo por el golpe - la~

La tipo fuego se tapó el rostro por la vergüenza de golpear al alguien equivocado

— lo siento, no sabía que alguien aparecería en un portal - lo pone en pie - ...de un portal?

— o claro, me presento. Soy Angel, un...

Antes que terminara esa frase Alicia le dio un garrotazo tirándolo de nuevo al suelo

— es un viejo amigo - dice la tipo acero/lucha - tiene esa extraña habilidad de abrir portales - lo toma de la greña - y estaba a punto de irse

Alicia lo saco del cuarto y cerró la puerta fuertemente, después regreso y me abrazo

— ya se fue, ahora tenemos tiempo para nosotros ~ - dice coqueta

— sigo aquí - se queja Cloe - alístense rápido, tenemos que ir hoy a casa de Ethen, espero no se enoje demasiado

Cloe abrió la puerta, salió de la habitación y cerró la puerta tras ella, Alicia seguía abrazada a mi, le di un beso para que se separara y comencé a alistar las cosas para ir a casa del Zeraora...














Mientras tanto en otra parte que ni yo se donde queda...

A lo lejos, dentro de una especie de calabozo, se puede ver a un Zoroark grande, caminando entre las cedas vacías, con un hueso de algún Marowak en su pata derecha y el craneo en la otra, sus patas goteaban algún tipo de líquido rojizo viscoso. El Zoroark se acerca a la única celda con alguien o algo dentro...

— hola querida - el Zoroark hace sonar los barrotes con el hueso de su pata izquierda - veo que estás muy cómoda en este lugar

La "huésped" de la celda es nada más ni nada menos que una lucario con una vestimenta humana algo rasgada, la lucario se encuentra ahora mismo con las patas sobre la cabeza, encadenada en cada pata, con un poco de sangre sobre su hocico y vendas en la parte superior del brazo derecho

— si así tratas a los invitados, no me gustaría saber como tratas a tus enemigos - sonríe sarcásticamente - pero se que te detendrán... ella lo hará...

— tu hija? Ella no se puede proteger a si misma y crees que te salvará a ti - se ríe fuertemente - se nota que eres ingenua

— ella es especial, lo sé por la marca de su espalda, mi madre tenía una igual - se esperanza a si misma la lucario

— todos creen que sus hijos son especiales, pero cuando se dan cuenta que no los son los dejan a un lado como si no fuesen nada.... pero como tú hija es tan especia, le enviaré un regalito con un amigo mío, seguro estará encantada por el gran detalle - se aleja de la celda - y revisaré que lo reciba con mi informante

— informante?

— claro, un infiltrado en el grupo de tu hija - tira el craneo a un lado del pasillo - y el verá cuando le entreguen el obsequio

— MALDITO! - grita la lucario intentando zafarse de las cadenas
















Hola, como están? Espero que bien y que les haya gustado el capituló. En fin, no tengo ningún aviso por ahora. Sin más que decir dejen una estrellita y nos leemos en el próximo capituló

CHAO!

Soy una riolu?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora