Anhelo y Esperanza

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Si yo fuera tan solo un juguete abandonado en un rincón
Destinados para los caprichos y los antojos del montón

Me lanzarían por el aire así nomás
Me arrancarían una a una cada extremidad
Para luego terminar olvidado en un basural

Si dejara el aire albedrío, todo a merced de tu ambición
Mis virtudes, mis preciados brillos, toda mi fe y mi convicción

Hoy no seria mas que un dejo de emoción
Un cuerpo consumido, indefenso y sin valor
Condenado y sin amor, un despojo a la buena de dios.

Sin derecho sin decisión para gritar
Que el show no debe continuar

Si apelase a tu empatía y sentido de ubicación
Se confiara en cada persona y me entregara a su razón

Me habrían corrompido ya sin compasión
Me habrían usado y descartado en cualquiera ocasión
De defraude la ilusión de cada quien y su pretensión

Sin derecho sin decisión a gritar
Que el show no debe continuar, no soy un juguete
¡Ya no mas!, el show no debe continuar

Erika soltó un grito desgarrador en el medio de la noche, algo a lo que se había habituado desde que había salido del cristal. Soñaba con dos seres aparentemente mayores, de apariencia similar a la de sus padres, donde solía vivir poco antes de que viniera a elDarya. Ella creía que esa época se había acabado hace años. No obstante, aquellos dos seres no paraban de regresar a ella una y otra vez, ¿Cuántos años tendrían ya? ¿Cincuenta? ¿Sesenta, quizá? ¿La habrían reemplazado por otra? ¿Quién seria? ¿Tendría alguna hermana? Esas eran preguntas que no la dejaban tranquila. Se decía a si misma que tenia que ser fuerte y seguir adelante. Pero, día a día, las pesadillas iban empeorando y apenas podía pegar ojo después, causando que tuvieras problemas en sus entrenamientos o que simplemente se quedara dormida mientras hacia alguna actividad, llamando la atención de sus amigos, incluso de cierto vampiro quien no podía evitar estar preocupado por ella.

Todo esto causo que Huan hua quisiera hablar con ella a solas en la sala de reuniones, alejada de miradas indiscretas y oídos curiosos. 

- ¿Qué pasa, erika? - le pregunto la líder preocupada y le confeso -  He recibido informes de que has estado muy por debajo del promedio últimamente y no es propio de ti. Además, jamón me ha dicho que tu nivel de lucha ha bajado considerablemente. Pero eso ya sabes que no me importa...¿Te anda pasando algo? ¿Hay algo que te perturbe?

En cuanto escucho esa pregunta, aquel niño volvió a su mente como solía hacerlo diariamente. Huang hua se llevo una mano en los labios al ver aquellos dos seres, quien parecía estar preocupada por su bienestar. Sin salir de su sorpresa, esta misma le susurro - ¿Acaso son tus padr...?

- Si. - confirmo ella en un susurro, mientras una lagrima caía hasta perderse en una de las comisuras de sus labios, los cuales empezaron a temblar. Resultaba extraño verla así, en ese estado. Pues, desde que había vuelto, rara vez había soltado una lagrima y se la veía cautelosa en todo momento, salvo con sus amigos. Luego soltó un suspiro y confeso - Últimamente, he venido soñando con ellos muy frecuentemente, al punto de tener pesadillas. Se que no debería de preocuparme, dado que no se acuerdan de mi. Pero si, al menos, supiera como les fue durante estos años y si son felices, me sentiría mucho mas tranquila.

Su amiga la miro, sin ser capaz de imaginar la angustia por la que estaba pasando al no saber que habían sido de ellos. De solo pensar en no saber que seria de su familia o Lein un escalofrío de angustia recorrió su cuerpo, consciente de lo mucho que había perdido ella acá y en las consecuencias de su sacrificio. Y se reprocho en el no haber sido empática con ella. Para erika, este mundo aun resultaría ser un misterio y mas ahora que había despertado hace tan solo unos meses. Decidida a reparar el daño causado , le dijo - Me imagino tu angustia y también se que no he sido tan empática contigo y en lo perdida que te debes de haber sentido...

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