Harry Potter y el precio de ser noble

Capitulo 01

Fleur suspiró mientras miraba el cuenco vacío de bullabesa que Marie le acababa de entregar. Sabía que Marie, una compañera de estudios de Beauxbatons, se había llevado el resto porque sabía que era uno de los platos favoritos de Fleur; uno que le recordaba a su hogar. Varios de sus compañeros de estudios habían puesto a propósito mucha de la comida inglesa demasiado pesada directamente frente a ella. " ¡NO ES MI CULPA!" gritó mentalmente a las jóvenes. " No pido que tus novios me miren fijamente. ¿De verdad crees que me gusta que me miren como un trozo de carne? ¿Crees que me gustan esos idiotas babeando porque no pueden manejar mi encanto".

Los ojos de Fleur vagaron por el Gran Salón de Hogwarts. No prestó mucha atención a la multitud de adolescentes en la mesa junto a ellos, pero sí notó el cuenco lleno de bullabesa que estaba junto a ellos. Se levantó de su asiento y se dirigió a esa mesa.

"Disculpe, ¿quiere ze bouillabaisse?" Fleur preguntó a los estudiantes.

Sus ojos casi se pusieron en blanco con disgusto cuando un chico pelirrojo hizo lo que la mayoría de los chicos hacían cuando estaban atrapados en su encanto natural. Ella vio como su boca se abría y su rostro se ponía morado. Ella miró hacia otro lado cuando vio que la comida que acababa de meterse en la boca ahora era claramente visible. Cuando ella se volvió, el chico al lado de la pelirroja también se volvió y por primera vez Fleur se encontró hipnotizada.

El chico tenía el cabello negro desordenado, pero fueron sus ojos, ojos de un verde esmeralda profundo, los que casi llamaron a la joven Veela. Le tomó un segundo darse cuenta de que el joven tampoco estaba actuando como la mayoría de los niños con su encanto. Ni siquiera pareció notar su belleza en absoluto. Él simplemente empujó el cuenco de bullabesa hacia ella mientras decía. "Sí, tomalo", antes de que se diera la vuelta.

Sonrió a los otros estudiantes de Beauxbatons mientras sentaba su tesoro culinario reclamado frente a su plato y comenzaba a servirlo en un tazón. Mientras mojaba la cuchara en el estofado, no pudo evitar mirar al joven de ojos verdes. Durante toda la comida, se encontró con que sus ojos se dirigían hacia él.

" Si fuera un par de años mayor" , reflexionó y luego se detuvo. Pero aunque trató de sacar esos pensamientos de su mente, siguieron regresando mientras sus ojos verdes se reflejaban en su mente. " Esos ojos son casi mágicos" , pensó.

Finalmente, la curiosidad se apoderó de ella y se volvió hacia una estudiante de Hogwarts vestida de negro. "Disculpe, pero quiero agradecerle a este joven por darme su estofado, ¿puede decirme quién es?" Señaló hacia el chico de ojos verdes.

"¿Quién? Oh, ¿el de cabello negro?"

"Oui."

"Ese es Harry Potter. Ya conocés al-niño-que-vivió."

"¿Arry Potter de Zat?" Fleur jadeó de asombro. Ella debería haberlo sabido, por supuesto. Su hermana menor, Gabrielle, estaba muy enamorada del chico. Su habitación estaba llena de carteles y recortes de periódicos del niño e incluso poseía todos los libros que se habían escrito sobre él. Fleur se había burlado a menudo de ella por eso, pero Gabrielle no se avergonzaba de sus fantasías que había construido sobre el joven. Fleur solo se burló de ella ligeramente porque sabía que era algo para ayudar a Gabrielle a superar el período de su vida que era tan difícil para una Veela. Uno que Fleur recordaba demasiado bien.

El Ravenclaw se encogió de hombros y asintió.

"Gracias", respondió Fleur. " Gabrielle no me creerá", pensó Fleur con una sonrisa. " Tendré que escribirle y decirle que hablé con su novio de fantasía".

La noche siguiente volvió a sentarse en la misma mesa esperando los resultados del cáliz de fuego. Estaba esperanzada y emocionada por la posibilidad de ser la representante de su escuela. El mismo entusiasmo que había tenido durante las últimas semanas. Mientras todos esperaban, no pudo evitar buscar a Harry Potter. Ya le había escrito a su hermana la noche anterior para decirle que había hablado con su futuro esposo.