Capítulo 11.

29 3 0
                                    

Estoy temblando de lo nervioso que tengo.

- Puedes pasar. - Dice Clío abriendo más la puerta para yo entrar.

- Gracias. - Contestó amablemente mientras voy entrando a su habitación.

Al entrar, la habitación estaba un poco desordenada. Habían libros regados, dibujos pegados en las paredes y la cama mal tendida. Pero me daba igual, mi habitación estaba así mismo.. o peor mejor dicho.

- Perdón por el desorden jajaja. - Dice mientras se ríe.

- Tranquila, yo soy igual. Pero mucho peor que tú. - Le digo para que no se sienta mal en tener la habitación así.

- Es que como casi siempre estoy aquí y me aburro, pues, a veces me pongo a leer, dibujar o estar en mi computadora haciendo nada. - Me dice mientras se va sentando en su cama. - Mi mamá es la única que a veces me recoge la habitación y me da sus regaños, ya me da igual tenerlo recogido o no, la verdad. - Dice mientras mira el cuarto completo.

- Para mi el cuarto puede demostrar como te sientes o como eres, si el cuarto está desordenado quiere decir que el dueño tiene una vida desordenada o simplemente tiene un día de bajas, si el cuarto siempre esta recogido da a entender que tiene una vida organizada, aunque eso no quiere decir que le vaya bien en su diario vivir. - Digo mientras miro a mi alrededor, no sé si lo que acabó de decir fue estupido.

- Tienes razón, así que.. ¿mi cuarto esta demostrandote que soy una desorganizada no? - Me pregunta mirándome fijamente.

- Pues sí, igual que yo. - Digo para no hacerla molestar en algo.

Al mirarla veo como una sonrisa se plasma en su rostro, tiene una sonrisa hermosa.

- Bueno, te puedes sentar si quieres. - Me dice mientras señala un sillón que hay en la habitación.

- ¿Qué tal tu dia? - Me pregunta Clío mientras camino para sentarme en el sillón.

- Súper, algo aburrido en las clases, la mayoría del tiempo me la paso durmiendo. Pero todo bien. - Le contestó mientras me voy sentando.

- ¿Aburrido?, yo estoy loca por ir algún día, poder hacer amigos, hablar con los profesores, almorzar con mis amistades y todas esas cosas que suele hacer un estudiante en una escuela. Aburrido es pasar los días en una habitación de 4 paredes. - Dice mientras se acuesta en la cama mirando al techo.

- ¿No vas a la escuela? - Preguntó.

- No, una profesora viene aquí 4 días a la semana para darme clases, pero es muy aburrido, ¿sabes? no es lo mismo que en una escuela. - Dice Clío mientras su voz va cambiando a un tono desanimado.

Wow, ahora que lo pienso bien, si es muy aburrido coger clases de esa manera, mucho más aburrido que ir a la escuela.

- Aunqueee.. lo importante es pasar de grado ¿no? - Dice Clío al girar su cabeza para mirarme y sacar una sonrisa.

- Sí, pienso igual. - Contestó mientras la observo.

Después de un largo rato hablando, entra una mujer a la habitación y me mira sorprendida.

- Hola, ¿quién eres? - Me pregunta la mujer.

- Ehh yo.. - Habló un poco nervioso.

- Es Acel mamá, un amigo. - Me interrumpe Clío.

¡Mierda, la mamá!

- ¿Un amigo? yo conozco a todos tus amigo, a él no. - Dice la mamá de Clío.

- Un amigo nuevo mamá, lo conocí hace algunos días aquí en el hospital. - Contesta Clío con un tono un poco alterado.

Trato de pensar que decir para no verme tan bobo.

- Yo s-soy Acel, Clío y yo nos conocimos aquí en el hospital. - Digo repitiendo lo mismo que dijo Clío, que idiota soy.

- Mmm.. bueno, ya me tengo que ir a trabajar mi cielo, te amo. - Dice su mamá mientras se acerca a Clío y le da un beso en su frente. Al darle el beso su mamá me mira y sonríe, pero con una sonrisa falsa.

- Yo más, cierra la puerta por fa. - Dice Clío mientras su mamá va saliendo de la habitación.

Al Clío decir eso, la mamá gira su vista hacía Clío y sonrie sin separar sus labios abriendo más la puerta de la habitación.

- Se queda abierta, como la enfermera me diga que la cerraste, tendremos problemas. - Murmura su madre y se va.

Miro a Clío y gira sus ojos al techo. No puedo negar que me quería reír.

- Lo siento, es mi mamá. Ella es así. - Dice Clío un poco apenada.

- No te preocupes, se ve buena madre, supongo. - Digo mientras subo mis hombros. - ¿En qué trabaja? si se puede saber. - Preguntó

- Es secretaria de una empresa, un trabajo aburrido. - Me contesta Clío mirando sus uñas.

- ¿Y cuál sería el trabajo no aburrido para ti? - Digo para sacar algún tema de conversación.

- Ja, son muy poco los trabajos divertidos. Pero sería genial ser azafata o exploradora. - Me contesta mientras tira de su espalda hacía la cama observando el techo. - Me gustaría recorrer el mundo entero y disfrutar de la naturaleza, sería bonito. Conocer personas de otros paises, las culturas, sus idiomas y todo lo desconocido para mi. Quiero ver y conocer nuevas cosas. - Dice por último.

- Sí, sería genial. - Digo mientras me imaginó recorrer el mundo entero y por sus escondites.

- Oye, ¿pensaste en tu lugar favorito? - Me pregunta emocionada.

- Ehh, pues si. - Le contestó.

- ¿Dónde? cuál es?. - Me pregunta mientras se pone de pie en la cama.

- Pues, a veces me pasó con mis amigos en ese lugar, es como un bosque o algo así con un lago enorme y.. - Fluyo pero en ese entonces Clío me interrumpe.

- ¡Perfecto! en cinco nos vamos. - Dice animada mientras prepara un bulto.

- ¿Como que nos vamos? de que hablas? - Preguntó desorientado.

- ¿Como qué de qué habló? vamos a tu lugar favorito, estoy ansiosa por ir a un bosque ¡y más si tiene un lago! - Dice Clío mirándome emocionada.

- Pero me dijiste que no puedes salir, osea tu mamá, el hospital, las enferme... - Siento un empujón en mi pecho hasta llegar a la pared y tapandome la boca sin poder hablar.

- Solo llévame a ese lugar, es lo único que te pido. - Escuchó esas palabras murmurando, Clío me estaba haciendo presión contra la pared y tapando mi boca con su mano, me observaba fijamente, nuestros rostros estaban a milímetros de cerca. - No pasará nada, solo quiero ver como es. ¿Creés que sea posible? - Me pregunta en voz baja y sacando su mano de mi boca.

No sabía que hacer, estaba un poco desorientado.

- Clío, sería algo arriesgado para ti y para mí. - Le contestó.

Mientras nos observamos, ella se va alejando poco a poco de mí.

- Ya mi vida está en riesgo. - Contesta.

La observo y pasan varios segundos de silencio mientras voy analizando lo que está pasando.

- Está bien, ¿pero que harás para que no se den cuenta? tu mamá y las enfermeras? - Le preguntó.

- Yo pondré una sabana debajo de otra sabana para que parezca que estoy durmiendo y llegamos antes de las 8, mi madre saldrá a esa hora. - Me contesta. - O eso creo. - Dice mientras me sonríe y se quita su bata, creí que se iba a desnudar, pero no.. tenía ropa de salir debajo de su bata. ¿Qué genia no?

Yo la miró un poco serio, sabía que esto no estaba bien.

- ¿Sabés que me puedes meter en problemas por esto no? no te perjudicas tú, me perjudicó yo. - Contestó.

- Si hacemos las cosas bien, no hay porque salir perjudicado mi querido Acel. - Dice mientras va a la entrada de la habitación y me observa.

-¿Estás listo?..

¡Hola! esperó que estén disfrutando esta historia tanto como yo. 🪐

Username Instagram:
@Elfinaldelcancer

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 02, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

El Final Del Cáncer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora