Itachi siempre lo supo. SasuSakuNaru.

Primera declaración.

Itachi siempre lo supo.

Cuando tenia 12, vio a su hermano con sus dos mejores amigos hablando en el patio de su casa, mientras los adultos cenaban dentro de la casa. Los tres niños reían, y eso lo hacia feliz, pues aparte de con él, el pequeño Sasuke no era abierto ni estaba predispuesto a entablar conversaciones con otras personas, que el se relacionara tan bien con dos niños lo alegraba.

- Sasuke-kun, Naruto-kun, cuando sea grande seré una modelo- la niña, de cabello rosa y grandes ojos verdes caminaba mientras fingía saludar a un publico inexistente- Seré la más famosa de todo el mundo y tendré muchos vestidos bonitos para usar-

- Si Sakura-chan será modelo, entonces yo seré un actor, seremos muy famosos- grito con entusiasmo otro de los niños, rubio y energético.

- ¿Y tu Sasuke-kun? ¿Qué es lo que quieres ser de grande? - pregunto la niña.

- Yo quiero ser un empresario, y trabajar con Oto-san y Nii-san- El pequeño Uchiha respondió con una pequeña sonrisa para sus amigos- ¿Qué harán con las empresas de sus padres si se dedican a la actuación y el modelaje?

A pesar de tener 6 años, Sasuke parecía ser el mas observador y detallista de los tres, y pensaba en el futuro de las empresas Haruno -de los padres de Sakura- y Uzumaki -de los de Naruto-.

- Oh, no había pensado en eso. Pero es que yo no quiero ser empresaria- Sakura bajo su cabeza con una expresión triste.

- Yo tomare tu empresa Saku, también la de Naruto. Si me encargo de las tres, ustedes pueden trabajar de lo que les gusta, y yo también – El pequeño de cabellos negros consoló a sus amigos – Aparte, así los tres tendremos mucho dinero, y podremos comprarte todos los vestidos que quieras- esto ultimo dirigido a la niña.

Sakura grito de alegría y se arrojo a los brazos del Uchiha, provocando que ambos cayeran en el suelo. Rápidamente Naruto los siguió en el abrazo, arrojándose sobre ella para que y con sus palabras -No lo dejaran afuera solo-

Itachi veía desde afuera como hacían planes y tomaban decisiones, hasta el punto de que el pequeño rubio grito que el se casaría con la pelirosa, y esta aceptó. No paso desapercibido como los ojos oscuros de su hermano se entristecieron. Pero se sorprendió cuando ambos niños tomaron sus manos y le dieron una gran sonrisa.

- Nos casaremos los tres, y seremos muy felices- Dijo Sakura.

Desde ese día Itachi lo supo.