2

5 2 0
                                    

–Bien– mamá levanta la voz para que la escuchemos –Parece que todos habéis acabado– nos acercamos a ella.

–Bien hecho– me susurran los gemelos cuando se acercan a mí.

–Algunos más tarde que otros– me mira y dejo de sonreír de golpe.

Creía que lo había hecho bien ¿entonces por qué me mira así?

¿Lo he hecho mal?

Soy consciente no solo de vuestra condición física sino también de vuestros progresos, por ello pelearéis entre vosotros, quiero que tengáis claro que vuestra calificación dependerá única y exclusivamente de mi decisión–.

¿Qué? Mamá nunca había dicho nada durante mis exámenes...

–No quiero quejas ni reclamaciones– se remueve en la silla –Mateo con Elijah, Bruno con Hazel y Colm con Emma–

¡¿Con Colm?! 

Ya es extraño que separen a los mellizos y a los gemelos ¿pero yo con Colm?

–Madre, déjame pelear con Emma– Carter habla adelantándose un poco, sabe que no puedo ganar a Colm, ninguno puede ganar a Colm.

Carter tuvo un ataque de asma hace poco, aún no está recuperado del todo por eso mamá lo ha dejado fuera.

–Sin quejas ni reclamaciones– repite firme y él se encoge, después de dos segundos mirándola asiente y retrocede –Mateo, Elijah– les mira y ellos avanzan hasta las colchonetas, mamá se gira con su silla con ruedas.


Durante quince minutos Mateo y Elijah están bastante igualados pero finalmente Elijah acaba por reducirlo por completo, doblándole el brazo mientras está sobre él y Mateo se rinde golpeando la colchoneta dos veces.

–¿Creéis que ahí fuera podréis rendiros?–.

¿Por qué parece tan enfadada hoy?

Elijah ayuda a Mateo a levantarse, mientras que éste se soba el brazo dolorido cuando se acercan.

–Bruno y Hazel– sin girarse hace una señal para que avancen, al moverse Bruno me mira y lo hace con pena.

Lo sé, solo que tú lo tienes difícil pero lo mío es imposible.

Miro a Colm y él se gira hacia mí y me sonríe con asco con las manos en los bolsillos.

Estoy muerta.

Después de diez minutos Hazel le da tal patada que tira a Bruno al suelo.

–¿Bruno?– inmediatamente Hazel se tira para comprobar si está bien –Un médico rápido– todos nos acercamos, los tutores de ambos se van corriendo –Despierta Bruno, por favor, no quería darte tan fuerte ¡despierta! Despierta por favor– ella le coge de la cabeza y la pone sobre sus piernas, está al borde de las lágrimas.

–No me grites– frunce el ceño antes de empezar a abrir los ojos, su voz es ronca y tose después de coger aire.

–Menos mal– Hazel le abraza al instante.

–Primero la patada y ahora me estrangulas– sonríe con los ojos cerrados y eso nos hace gracia a todos.

–¡Aquí estoy!– el médico llega corriendo hasta Bruno –Permiso– ella se hace a un lado mientras que el médico le hace su examen preliminar.

–Llévatelo– mamá acaricia la mejilla de Bruno y el médico junto a su tutora se lo llevan.

–Madre ¿puedo ir con ellos?– Mateo mira como se lo llevan.

Herederos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora