~Revenge is mine || Erick Pulgar.~

capítulo 3

Acababa de despertar y estaba completamente helada. en mi mente no podía parar aquel shows de ayer, y menos su última frase

"No, sólo que tu eres muy hueona pa pensar que yo te iba a besar po. tengo a miles de mujeres y tu crei que te iba besar."

Su palabras me habían lastimando, en el fondo lo sentí sinceró y eso era algo que más me dolía.

Agarré de la manta intentando cubrir los pesado de piel que quedaban sin tapar. Veo de reojo caer una mano rápidamente sobre mi cadera.

Cuando me levanté pude ver el rostro de la momia que había tirado su caga de brazo. Y para ponerle más drama era nadie más que la sherry.

Vi mi ropa y estaba Claro que no era mía, talvez será del Eduardo pensé. El tenía este rico olor a colonia cara y especialmente que fueran de una Marca reconocida.

En una silla estába mi ropa doblaba y con una nota que decía "chuta cabra acá está tu ropa. Esta todo ready está seca. Charles".

Me vestí como nunca, lo más rápido. No quería que nadie me viera salir y menos la sherry.

Agarré la manija y la corri.

Sali con mucho cuidado del cuarto y había un olor bastante pesado. Era de copete y cigarro.

—Conchetumare!— grite al ver un cuerpo en el suelto.

Era un bulto bien feo, era el Eduardo. Estaba en una posición rara.

Mientras más seguía más personas encontraba tirada y todos con una posición rara.

Me sentía como en la serie "the shannara chronicles" era casi lo mismos, la única diferencia que yo caminaba entre personas cura y ella entre demonios.

Di unos pasos y llegué a la salida, era un triunfo. Y más haber llegado sin que nadie me viera.

Al cerrar la puerta solté un suspiro de alivio. Mi celular sonó miles de veces pero la cobardía me gano y no lo mire.

Tenía miedo de ver que era o talvez era el famoso video.

—¡Hey! Flaca!. —volte de una encontrándome con el Arturo. Seguí mi camino no quería hablar con y nadie de acá — ¡Flaca! Te estoy hablando.— llegó corriendo a mi lado.

—¿Que wea querés Oh acaso tú también vienes a bularte? . — solté en un tono agresivo.

—calma fiera si vengo a decirte que te puedo ir a dejar. Aparte es una caga de vídeo, después nadie se va acordar.

Puede que sea Verdad lo que decía este pero yo seguía con ese rencor.

—¿Vas a ir o no?—cuestino.

Sólo me asegure de asentir con la cabeza.

Pasaran menos de dos minutos y llego el Arturo. Fue un viaje lento y por nuestra parte los dos íbamos lo más callados, era algo mutuo.

El no se atrevía a decir algo y menos yo, en el fondo el sabía que estaba mal por un saco huea.
Los minutos pasaron cuando el auto estaba parado afuera de mi departamentos y aún estaba ese silencio incómodo.

Abrí la puerta con intensión de no saber más, no dije un adiós. Por qué el estaba hecho de la misma mierda que el otro.

—Que estés bien.

Su "estés bien" era más falso que Kylie Jenner.  En este momento yo era una vulnerable.

Saque el teléfono por mientras subía el ascensor. tenía miedo, no, tenía mucho miedo.

Al ver todo lo que estaba en la red no estaba el gran video circulando . Sólo estaba fotos del Erick y mias con un título bastante asqueroso " ¿Ara la nueva conquista de pulgar?".

Todas las menciones eran con el mismo título.

Pero ¿Donde estaba la caga de vídeo? Eso era lo único que me importaba.

— Ara! Oye flaca!.

—Caro eh...¿ Como estás?— hable sin ganas.

—Bien por gorda ¿Oye asi que te estás comiendo al mino de pulgar? Esta bueno el cabro.

— ¿Disculpa? No, estás mal. Yo y el jamas.— y era verdad hasta el lo había confirmado.

—ya Ara no te hagas, si con las fotos todos quedamos locos.

— Bueno me tengo que ir.  Aparte si me lo como o no, no es tu caga de problema.

—Ay ara! Tan agresiva.

Estaba cansada y solo tenía ganas de tirarme a dormir al sofá.

—!Por la cresta!— grite tirandome al colchón.— Te odio! Te odio tanto Erick pulgar— llore.

Me sentía sola y solo me acurruqué llevando mis rodillas hasta mi pecho quedando en posición de feto.

Ayer había sido una noche larga que yo solo quería olvidar. Tenía rabia, mucha.  Todos fueron cómplices y ninguno fue capaz de decirme y para que decir ellos eran la misma mierda junta.

La puerta sonó tres veces contadas. No tenía ganas de llevarme y ver quién chucha era.

Volvió a sonar tres veces más.

Con toda la flojera del mundo me levanté tapándome toda la espalda y cabeza con una sábana.

—Quien eri'?.— pregunté dese adentro.

—Yopo negra el Charles.

— Ah no estoy andate mejor, estas perdiendo el tiempo.

—Flaca tu no eres tiempo perdido, jamás lo serias y menos para mí.— quede congelada al escuchar eso, había sido tan lindo.— Ahora ábreme po.

—Ya esperate.— abrí la manija haciéndome a un lado dejando un pequeño espacio para el.

— Gracias flaca ¿Estái' bien?.

—si...

—Como vas a estar bien ahueona si tení' los ojos más hinchados. Pareces al mamá del miguelito.— solte una risa poniendo mi cabeza a su lado— Así es como me gusta verte po' alegre.

—¿Porque está acá?

—Queria saber de ti po' aparte el Arturo me dijo que estabas como rara, lo normal. Aparte me preocupó y tu no das ni señales de vida po'.

— ¿como que no? Si hace cinco minutos te dije que no estaba.

—si, tonta ridicula Pero igual. Aproveche a venir a comer.

—Eres bastante balsa' ¿según tu vienes a verme perl también a comer? Eri' un chanta.

—Ya mejor anda hacerme unos fideos con salsa.

Entre cerré los ojos poniendo cara de amenazadora.  Ya  eran la una tampoco quedaba de otra que cocinar.

Se puede decir que era primeras vez que alguien iba a degustar mi comida, y en miles de sentídis la cocina no era lo mio.

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Hola! Volví me estaba quedando sin ideas pero ya me estoy improvisando 😞😂