me voy a arriesgar a subir esto aquí, de todos modos para aclarar, regina tiene 18 y cristian 19, así que todo tranquilo, jeje.
De todos modos, esta el apartado +18 en mis historias.
+18, si eres menor y estas leyendo esto, sáltate toda la acción y solo sigue tu lectura normal.
REGINA COURNEY
Una vez ya estamos en el coche, el silencio se hace presente, solo voy mirando por la ventana, puedo reconocer que este no es el camino a casa, supongo que es un atajo o algo por el estilo; solo me concentro en los árboles del camino, me recuerda a cierta cabaña, hace tiempo no voy por los recuerdos que esta me trae, unos bonitos y unos malos.
Lo volteo a ver y noto como no tiene la mirada en el camino, no, la tiene en mis muslos descubiertos, alza la vista y se encuentra con la mía, no digo nada al respecto y regreso la mirada al camino; me encanta como me mira, el deseo se nota en su mirada, la lujuria notoria con la que me mira; regresa la vista al camino, y habla – ¿te molesto verme con ella? – me toma por sorpresa su pregunta.
-Verte con una puta, ¿Por qué iba a molestarme? – no me lo pensé dos veces para soltarlo, el solo ríe ante mi comentario, lógico que no le voy a contar lo que paso con su "amiguito", no quiero causar problemas.
-Pues echabais humo, además, no creas que no vi como mirabas a Maddi– con que Maddi se llama la pelirroja, se relame los labios, están mojados, se ven suaves, pero me molesta el hecho del tono rojo en su labio, el mismo color rojo del labial de la chica.
-¿Quien dice que fue por eso?, lo que hagas o no, no es mi problema - miro a la ventana, pero toma mi mentón y me obliga a verlo.
-Te vez hermosa cuando estas celosa ¿lo sabias? – no puedo evitar la risita que se escapa, ¿el piensa que me veo hermosa?, sus ojos viajan hacia mi blusa, y regresa a mis ojos.
En ese momento, estaciona el coche a un lado de la carretera, cerca de esta no transitan muchos autos, lo cual es lógico ya que pasan de las dos de la mañana.
-¿Por qué param... - antes de que pregunte, me sujeta la cara con ambas manos, juntando sus labios a los míos, no puedo evitar seguirle el paso, lo apartaría de no ser porque ya estoy más que borracha y no sé lo que me pasa.
El beso es intenso, lleno de deseo, sus labios saben a alcohol combinado con un toque de menta, el deseo empieza a crecer a tal punto de sentir unas pulsadas en mi zona, tal es el punto que empieza a doler; que me sucedía, esto está mal, pero quería, necesitaba más.
Se separa de mi por la falta de respiración - ¿Cuánto tiempo has querido hacer esto? – le pregunto, me vuelve a besar, con un poco más de calma.
¿Eso resuelve tu pregunta? – le digo que no con la cabeza y me vuelve a besar con el mismo deseo, mientras más tiempo pasa, las pulsadas empiezan a crecer doliendo aún más - ¿Cuánto quieres esto, regina? – el detenimiento cuando pronuncia mi nombre con su voz gruesa y provocativa, hace que lo desee ahora más que nunca.
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Líder de la mafia ✔︎ [#1]
Ficção AdolescenteTERMINADA Éramos familia, pero no nos importaba correr el mayor riesgo de nuestras vidas; él no quería ese puesto, pero yo sí. Le demostraría de que sería capaz, de lo que era capaz. A veces uno no sabe para quien trabaja, alguien que creías conoc...