Al salir del lugar, el pequeño se sorprendió al ver el hermoso paisaje, había muchos árboles verdes al rededor y un inmenso cielo azul con nubes blancas. Jamás antes había salido en toda su vida, era la primera vez que salía y veía un paisaje tan hermoso. Muchos carruajes se encontraban en una gran área especial.
Al llegar al área de carruajes se encontró con su amigo rubio acariciando de manera pervertida al pequeño Omega que minutos atrás había comprado, el chico de ojos verdes se veía confundido ante aquellos toques que desconocía.
El Alfa de negro carraspeo, haciendo que su amigo se detuviera de lo que sea que le estuviera haciendo al Omega de ojos verdes.
— Oye, tardaste mucho en... — Calló al voltearse hacia su amigo, viendo en los brazos de este a un hermoso chico de ojos morados.
El pequeño, al ver qué otro Alfa le miraba, se escondió en el cuello del gran Alfa que lo había comprado.
— ¡No puede ser!, ¡Es una completa belleza, ¿Cómo lo conseguiste?!
— Tenías razón. Hay Omegas de muy buena calidad en este lugar. — El Alfa sonrió un poco.
Su amigo rubio comenzó a hacer muchas preguntas mientras se dirigían a sus carruajes, preguntas que jamás le serían contestadas.
— ¿Qué tal si te doy el doble de lo que pagaste por él?, ¿Me lo venderías?
— ¿Me pagarías mil millones?
— ¡¿QUÉ?! — Grito su amigo. — ¡¿Pagaste $500,000,000 por él?!, ¡Estás completamente demente!
— Sí.
— Joder... pagar tal cantidad por un Omega... ni en mis más húmedos sueños lo hubiera hecho, es una completa locura... tus padres van a matarte, básicamente gastaste más de la mitad del presupuesto que te dio el imperio.
El Alfa siguió caminando, dejando de escuchar a su amigo en cierto punto hasta que logro llegar al carruaje. Un precioso carruaje blanco y azul con dorado por fuera y blanco y azul cielo por dentro.
— Te veo después.— Dijo bajando al pequeño peliblanco para meterlo dentro del carruaje con cuidado y seguido subirse él.
— No puedes dejarme así, aún tengo muchas preguntas que hacer.
— Mejor comienza a hacérselas a tu Omega, se ve realmente triste viendo como su amo se interesa en otro Omega cuando minutos antes lo tocaba tan obsenamente. — El cochero cerro la puerta y se subió al frente para tomar la tienda de los caballos blancos con cabellera dorada. — Nos vemos luego.
Los caballos relincharon y avanzaron, dejando a su amigo con las palabras en la boca.
El pequeño peliblanco estaba realmente maravillado por todo el gran paisaje que veía a través de la ventana, jamás había visto tantos colores tan vivos y bonitos. El Alfa lo mirá sin discreción y sonríe nuevamente al ver lo tan hermoso que es el Omega.
Después de un tiempo llegaron a la casa del Alfa, una mansión. Los ojitos del pequeño veían todo con asombro, le fascinaba ese "nuevo mundo" que acababa de conocer, nunca pensó que afuera de esas paredes grises hubieran tantas cosas bonitas y preciosas ante él.
El carruaje paró, el Alfa bajo y abrió la puerta del pequeño para hacerlo bajar. El Omega se puso nervioso de nuevo, le encantaba la vista y quería decir muchas cosas sobre ella y hacerle miles de preguntas a su comprador, pero al no conocer al Alfa prefería no decir nada, por si a caso.
El Alfa volvió a tomarlo en brazos como si fuera un niño y lo llevo dentro de la gran casa. Apenas entrar unas grandes escaleras aparecieron, al igual que un chico arrodillado ante la puerta.
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La Debilidad Del Duque (+18 gay)
FantasíaEn este mundo solo hay 3 géneros. Beta, Omega y Alfa. Los Alfas son los Dominantes del mundo, mientras que los betas son dejados de lado y los Omegas el tesoro más preciado de un Alfa. La escasez de Omegas en el mundo llevo a los países a abrir "ca...