Capitulo 6

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Darius había estado encerrado en su oficina durante seis días seguidos, sin salir siquiera para descansar. Planeando y llevando a cabo desde ahí el gran negocio que tenía en mente.

Todos los días Liam le llevaba desayuno, comida y cena, y en los pequeños momentos de descanso del mayor, simplemente se relajaba sentado en su silla con el pequeño en sus piernas.

En los largos periodos de trabajo de Darius, Liam se entretenía con sus damas, jugando y aprendiendo cosas nuevas, así como recorriendo la casa de un lado a otro.

En este momento Liam estaba a punto de entrar en la oficina de Darius, llevando su cena.

—Adelante. —Dijo el mayor desde dentro.

—Amo, he traído su cena.

Liam empujaba un pequeño y largo carrito, hecho a su medida para que pudiera llevar las comidas por si mismo.

—Bien, eso es todo por ahora, me quedaré con el prototipo, tómense el fin de semana, comenzaremos a producir en cuanto de la orden, ¿Entendido?

—Sí, señor. Muchas gracias.

Los dos hombres que durante estos seis días habían acompañado a Daemon se veían realmente agotados y felices por poder regresar a sus hogares después de tanto trabajo.

El Alfa por su puesto que se encontraba igual de agotado que sus compañeros pero su físico no lo demostraba, por fuera se veía tan pulcro, elegante y aterrador como todos los días.

—Liam, ven aquí. —Llamó el mayor, dando unas pequeñas palmadas en sus piernas.

El pequeño entendió y cumplió su orden enseguida, sentándose en las piernas de Darius. Apenas lo tuvo sobre él sus ojos cambiaron a color dorado, dejó salir un pesado suspiro y se desplomó sobre el chico.

—¡A-Amo...

El peso del Alfa provocó que ambos cayeran de la silla, dándose un fuerte golpe contra el suelo. Afortunadamente el mayor no cayó sobre Liam, sino a un lado de él.

El Omega no entendía lo que estaba pasando y al ver a su Alfa tirado en el suelo, inmóvil y con los ojos entreabiertos se asusto demasiado. Coloco sus manos sobre el cuerpo de Darius y empezó a moverlo, en un intento de "despertarlo".

—A-Amo... despierte...

Terribles imágenes vinieron a su mente al verlo así, cosas que solo había visto en libros y en algunas explicaciones que su criadora le había dado.

—¡MICHEL, MICHEL! —Comenzó a gritar.

El mayordomo apareció enseguida, no tardó ni dos segundos en acudir al llamado del Omega, entró en la oficina y al ver a Darius recostado en el suelo con Liam llorando sobre él no dudo en actuar.

Las tres damas del pequeño llegaron, ayudando al mayordomo a llevar al Alfa a su habitación. Liam simplemente los seguía.

—Lucía, hay una esfera mágica en mi habitación, en el cajón izquierdo de mi escritorio, llama al doctor Christian, simplemente llámalo y en cuanto conteste cuelga, él entenderá.

Lucia asintió y salió corriendo a toda velocidad, alejándose de ellos.

En poco tiempo lograron llegar a la habitación de Darius, lo dejaron sobre la cama y comenzaron a movilizarse para atenderlo. Liam temblaba y lloraba, no sabía lo que estaba pasando y eso le aterraba, lo único que podía hacer era permanecer al lado de su Alfa.

—E-El a-a-amo... ¿P-Por qué... —Intentaba preguntar, pero el hipo y su respiración entrecortada no le permitían si quiera terminar una oración.

La Debilidad Del Duque (+18 gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora