El Fin de los Días

Alianza del pasado

Llegando al refugio, el grupo bajo del vehículo, y entraron. Clyde y John vigilaban la entrada, mientras los demás comenzaban a arreglar el refugio, mientras Jeff, Kate y Bill hablaban sobre lo ocurrido con Caulfield y Jack hasta que escucharon:

-¡Hey, tenemos visitas! -exclamó Clyde-

Esto provocó que Jeff, Jack, Kate, Bill y Caulfield se dirigieran hacia allá. Era un hombre alto, de aproximadamente 2 metros, de complexión fuerte, vestía un saco de color negro, un pantalón negro, unas botas y una camisa de color negro. Su cabello era café, al igual que su barba, que no era muy larga. Este se acercaba hacia la puerta, mientras que todo el grupo iba hacia allá, apuntandole con sus armas.

-¡Eh, quien eres y cuales son tus intenciones! -ordenó Bill-
-Mis intenciones son... Negociar. -respondió el hombre con una voz grave-
-Otra vez no... -contestó Caulfield-
-Si negociar significa venir a llorar para que les devolvamos su tierra... Pues no. -respondió sarcástico Bill-
-... Y yo que esperaba llegar a un acuerdo.

El sujeto tomo una revolver que tenía escondida, y les apuntó, sin embargo, rápidamente el grupo abrió fuego hacia él, haciéndolo caer al suelo, aparentemente muerto.

-... Fueron estúpidos al enviar a solo uno. -dijo Jeff, mirando al cuerpo del hombre, lleno de balas-
-No lo sé... La última vez un solo hombre fue capaz de vencernos a todos. -respondió John-
-Buen punto.

Ambos miraron unos segundos al cadáver, y se alejaron. Mientras Jeff iba caminando hacia el refugio, Jack lo tomo del brazo y lo detuvo.

-¿Pasa algo, Jack?
-Si no fuera así, no te habría detenido.
-Cierto. Cuéntame.
-... Creo que mi esposa sigue viva.
-¿...Tienes esposa?
-Deja de hacerte el gracioso y escucha: Cuando estaba defendiendo el refugio con Caulfield... Recibí un mensaje... En el teléfono... De alguna manera obtuvo señal. El mensaje era de ella.
-Eso es... Curioso... ¿Que decía?
-Era una ubicación. ¡Tenemos que ir a investigar, no podemos quedarnos así!
-... No se si sea lo mejor arriesgarnos por una sola persona.
-¿¡Una persona!? ¡Es mi esposa, es lo único que tengo!
-... Pero...
-¿Sabes qué? Iré yo solo. No sé porque pensé que vendrías conmigo.
-Uh...

Jack comenzó a caminar hacia un vehículo, Jeff suspiró, y comenzó a pensar unos segundos.

-Voy contigo.
-...

Jack miró hacia atrás, y respondió:

-De acuerdo... Vamos.
-¿No crees que necesitaríamos a alguien más?
-¡John, Clyde! ¿Vienen? -exclamó Jack-
-Ajá. -respondió Clyde-

Jack se acercó, y los cuatro subieron al vehículo, Jack y Clyde al frente y Jeff y John atrás.

-¿De qué se trata? -preguntó John-
-Vamos a buscar a la esposa de Jack
-Hmm... Me parece bien.

Los tres se dirigieron hacia la ubicación, no muy lejos aparentemente. El lugar tenía un silencio inquietante, y parecía estar despejado.

-... No soy el único con un mal presentimiento... ¿Verdad? -mencionó Jeff-
-Desafortunadamente... No. -respondió John-

Jack se mantuvo conduciendo, observando a todas las direcciones, en caso de una emboscada...

-Están ahí... -dijo Clyde, mientras observaba a un grupo de 7 de los mismos saqueadores acercándose lentamente al vehículo-
-Mantengan la calma. -ordenó Jack-

Los saqueadores se acercaron al vehículo, armados, apuntando hacia ellos.

-¡Entreguennos el vehículo y los dejaremos con vida!
-Hey... ¡Son los que nos robaron el refugio! -mencionó un saqueador-
-Deberiamos matarlos por todo, ellos fueron quienes le dispararon a Torque y a Snake.
-Mejor hay que entregarlos a Pitch Black.
-Agh... Apenas se muevan, los lleno de plomo.