𝐓𝐡𝐞 𝐕𝐨𝐢𝐝 [𝐒𝐊𝐘𝐄𝐖𝐀𝐑𝐃]

8

"Está pasando." Dije en un suspiro mientras miraba la pantalla que tenía en frente. Hive estaba fuera de la cámara de gel. Estaba libre y caminando por el hangar con algunos de los inhumanos que creamos. 

Sonreí ante el recuerdo, era uno de los regalos que me había hecho. Cuando pensaba que Fitz y Simmons aún podrían ser salvados. 

"Está buscando una salida." Me dijo Mack. 

"No," Me di cuenta, y borré la sonrisa de mi cara cuando sentí la mirada de Mack en mí. 

"Daisy, ¿qué pasa?" Preguntó. 

"Lo sabe todo, acaba de conseguir su método de transporte." Mack salió de la habitación en un par de segundos. 

Le había contado de todo a Ward, y ahora tenía la solución al problema del misil. 

Sentí mis manos temblar por un momento, no por mis poderes, sino porque estaba nerviosa. Él estaba aquí, tan cerca que casi podía tocarlo. 

Le vi entrar al Zephir, mirar hacia todos los lados, separados por un par de metros. 

Me giré y abrí el pequeño módulo de contención dentro de la celda, entré y lo activé para que me llevara al Zephir. 

Salí con cuidado en cuando la cápsula llegó, él miraba hacia la rampa, por lo que aún no podía verme. 

"Hey." Intenté llamar su atención. 

"Lo siento." Dijo, parecía revuelto, "Estoy teniendo problemas... Mis recuerdos, tú estabas en ese." Sonrió. 

"Qué te han hecho..." Me acerqué más a él, mis pasos eran pesados, quería acercarme, pero a mi cuerpo no parecía gustarle la idea. 

"Te duele." Afirmó él. 

Me miró a los ojos y sentí cómo todo mi mundo se caía, mis rodillas y brazos estaban temblando, y de mis ojos amenazaban con caer las lágrimas que estaba reteniendo. 

Me arrodillé sin dejar de mirar sus ojos. 

"Por favor." Rogué, sintiendo como mi voz se rompía, "Por favor, llévame de vuelta."

"Interesante." Dijo, caminando hacia mí, así que me levanté y le miré, "Tu nombre, algo bonito como el cielo, las flores..."

"¿No sabes quién soy?" Le pregunté, y de pronto me di cuenta, "Oh, han utilizado la máquina de las memorias contigo." Me acerqué y coloqué mi mano en su mejilla, cerró sus ojos y ladeó su cabeza, intentando acercarse más al tacto, "Vas a estar bien." Susurré. 

"Daisy." Dejó escapar mi nombre en un suave susurro, sonreí cuando lo dijo. Me recordaba, "Nunca sería capaz de olvidarte, incluso si lo intentara." Abrió sus ojos y agarró mi mano de su mejilla. 

"Por favor." Repetí. Colocó sus dos manos en mis mejillas y se acercó para juntar sus labios con los míos. 

Sentía el enjambre volver a mi cuerpo, al principio ardía pero poco a poco se convertía en algo caliente y agradable que llenaba cada poro de mi cuerpo. 

Él se apartó y abrió sus ojos. 

"¿Preparada para terminar lo que empezamos?" Preguntó con una sonrisa en su cara. 

"Aún no." Devolví la sonrisa y me acerqué a él para darle otro beso, "Te he echado tanto de menos." Le dije. 

"Yo también te he echado de menos." Respondió mientras daba un paso hacia atrás, levantó su mano y yo la agarré. Coloqué mi cabeza en sus hombros y le volví a mirar.