Reencarne en Arrow - Darkness

Capítulo 1

La oscuridad me rodea, siento que estoy flotando y rodeada de un fondo negro donde el silencio reina por todo el lugar mientras lo único que escucho es a mi corazón latir una y otra vez frenéticamente, y  sentir un dolor situado en la esquina inferior de mi cabeza... Espera... ¿Cómo es que puedo escuchar mi corazón latir si estoy muerta? Según los libros que he leído no debería de poder escuchar y menos sentir algo.

De pronto una luz comenzaba a traspasar contra mis párpados cada vez se volvía más fuerte pero no quería ni iba a abrir mis ojos hasta saber donde me encontraba. Cuando ya decidí en abrirlos me encontraba en un hospital no muy moderno en brazos de lo que supongo que sería mi madre.

─ Hola, mi pequeña Alyssa. ¿Ya te despertaste? ─ Dice mi madre. ─ Soy tu mamá.

─ Si eres mi madre. ─ pienso mientras sonrío ─ No espera, no te conozco como que eres mi madre. ¡¡SOCORRO ESTA MUJER ME TIENE SECUESTRADA!! ¡¡AYUDA!! ─ Me entra el pánico y me pongo a llorar. ─ ¿Por qué no puedo hablar? ¿Por qué no puedo hacer algún sonido? ¿Por qué tengo la mano tan pequeña?

─ Shh... Tranquila, mamá esta aquí. ─ Lo dice tranquilamente mientras me acaricia suavemente la cabeza con su mano y siento que todo mi cuerpo se va calmando.

─ Pues creo que por esta vez te haré caso. ─ Mientras iba bostezando y cerrando los ojos hasta no escuchar nada.

6 AÑOS DESPUÉS 

Después de despertarme aquel día, me di cuenta de que estaba en una dimensión, mundo o como se llame distinto, y que esa dimensión en la que estoy es nada más y nada menos que el de Arrow. Lo bueno es que como a mí me encantaba esa serie me vi todas las temporadas y recuerdo más o menos como iba la historia, lo único que me faltaría es ordenar mis ideas y no dejar que me pillen. Por ahora voy a tener que fingir que soy una niña normal y corriente y tener que  comportarme como tal pero todo terminó para mal. Mamá me apunto a clases de defensa personal pero también me entrenaba ella porque sabía un poco, con el tiempo fui mejorando y ahora podía ganarla de vez en cuando gracias a mi agilidad y inteligencia.

Después de cada entrenamiento voy al colegio para terminar mis estudios y luego vuelvo a entrenar un poco o si tengo la tarde libre voy alguna cafetería para tomar algo. Hay una cafetería cerca que está como  2 cuadras de mi casa en la que voy frecuentemente, y ya me conocen porque mi madre también pasaba antes de ir al colegio. 

─ Hola, buenos días Anisa, quiero lo mismo de siempre. ─  Dije emocionada.

─ Buenas Alyssa, por su puesto un Americano con hielo para la mayor, y para la pequeña, un zumo de piña junto a un pequeño trozo de tarta de la abuela marchando. ─ Dice energéticamente la empleada.

─ Esta vez tenemos prisa podrías poner para llevar, por favor. ─ Menciona mi madre.

─ Por supuesto.─  Dice la dependienta.

─ Gracias.

Poco después de entregarnos el pedido, mi madre me lleva a mi primer día de colegio por lo que terminé mi desayuno rápidamente y entré al colegio temprano, ya que hoy era el día que haría mi primer examen de matemáticas y se suponía que sería fácil hasta que me espante nada más ver la primera página, murmurando que este examen sería más bien de la universidad pero que se le iba a hacer, tenía que completarlo, así que empecé a escribir hasta que después de 10 min un profesor sustituto (ya que el profesor de matemáticas se había puesto malo el día anterior) mientras hablaba con otros alumnos e intentaba quitarme el examen.

─ Profesor, no entiendo nada del examen. ─ Dijo un alumno de primera fila.

─ No lo entenderás si no has estudiado para el examen. ─ Dijo el profesor de la materia.

─ No, profesor. Aquí hay muchas letras y números. ─ Dijo otro alumno.

─¿Qué?, será posible. ─ Exclamó el profesor mientras miraba el examen. ─ Bueno chicos, os entregué el examen incorrecto, más tarde le explicaré a vuestro profesor que no habéis podido hacer el examen por mi culpa. Así que entregarme los examen de atrás hacia delante. ─ Dijo el profesor mientras que todos los alumnos menos yo iban entregando los exámenes.

Casi terminaba de escribir cuando el profesor fue a mi mesa para recoger el examen no correspondido.

─ Alyssa no escribas en el examen, ha sido mi error entregar el examen que no te corresponde. Entrega el examen ahora.

─ No, espere que casi termino. ─ Digo dándome prisa por terminarlo.

─ ¿Cómo puede ser eso posible? ─ Dice forcejeando hasta que al final me arrebata el examen, sorprendiendo me lo vuelve a entregar para luego decirme que siga.

─ En 2 minutos termino, solo me faltan unos cuantos retoques y ya. ─ Digo con prisas.

 ─ Ya está, aquí tiene profesor. ─ El profesor recoge el examen y se iba de la clase con asombro o eso notaba yo.

Al final del día, me dieron que me quedase un rato de más porque querían hablar con mi madre. Así que me encontraba esperando en las sillas de espera, a la espera de mi madre para que me recogiese y fuese a hablar con el director.

─ Hija mía, que has hecho para que me llame el director.

─ Yo no hice nada y tampoco sé del porque te llamaron.

Cuando mamá por fin salió del despacho del director me avisaron que ya podía entrar y al entrar me encontré con mi tutora de clase y el profesor que me hizo el examen y al lado ellos, estaban mamá con el director del colegio.

─ Alyssa tu hiciste este examen, cielo. ─ Dijo el director amablemente mientras todos me miraban fijamente.

─ Sí, era fácil. ─ Dije un poco incómoda ya que todos me veían con asombro.

─ Y no copiaste ¿verdad? ─ Dijo el profesor.

─ Por supuesto que no, entonces fue por esto por lo mandasteis llamar a mi madre. Porque creíais que había copiado.

─ Claro que no y no te importaría hacer otro tipo de examen para verlo.

─ No me importaría pero sería mejor hacerlo rápido.

Entregaron el examen y lo terminé en 5 minutos.

─ Alyssa, creemos que tu rendimiento académico es demasiado alto y por lo que creemos que podemos meterte directamente en una universidad pero claro solo si estás dispuesta a ir.

─ Está bien.

─ Entonces, prepararemos todo para que puedas explotar tu máximo potencial.