╭⋆ . 🖇 ⸼ ¿𝘔𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦𝘴 𝘮𝘪𝘦𝘥𝘰?!࣪ა ɞ ---

﹃3﹄

《Kenny》

Rápidamente dirigí mi rostro al suelo, para evitar contacto visual con el, mientras hablaba con N.Mangle, no le daba importancia a su charla, solo deseaba no estar ahí en ese momento;

—Mírame.— Sentí su aliento chocar contra mi rostro, aun así no me moví.

Me sostuvo de mi barbilla, dejándome frente a frente, empece a llorar, haciéndolo enojar, me dio una bofetada para callarme, aunque no funciono, seguía llorando del miedo.

Nightmarionne y N.Mangle se miraron entre si.

—Llévate lo, creí necesitarlo en algo. Pero es inútil.— Dijo Nightmarionne  mientras N.Mangle asentía y me llevaba nuevamente a mi habitación.

Me arrojo dentro de ella y encerró, no hice ningún movimiento, me quede exactamente donde estaba.

Me sentía cansado y mis ojos ya estaban hinchados de llorar, esta ya era una sensación muy conocida para mi, cerré mis ojos con mucha presión, deseando que esta fuera otra pesadilla y despertara en mi cama plácidamente.

—¿Kenny?—Sentí una pequeña patadita en mi brazo, reconoci inmediatamente que era Fredbear.

Aun así no queria moverme, haciendo que el se preocupara por mi:

—Kenny— Puso su patita de felpa sobre mi espalda intentando sacudirme para llamarme la atención.—¿Kenny ya te moriste?— Lo dijo con cierto tono burlón y a la vez de preocupación.

Negué lentamente con mi cabeza, haciendo que el osito suspirara aliviado, mientras aun seguía en el suelo, Fredbear vigilaba que nadie viniera hacia mi.

—Desearía estar en casa...— Sentí un movimiento brusco de Fredbear, como si no le agradece la idea, levante mi rostro dirigiendo mi mirada a el.

Me estaba dando la espalda eh intentando ignorarme por mas que lo llamase, así que me rendí y mire a otra dirección, buscando con que entretenerme. Fue una búsqueda algo mediocre, siendo Fredbear el único peluche interesante aquí. Ademas de que el no aceptaría jugar conmigo.

 Por el aburrimiento comencé a caminar por toda mi habitación sin alguna razón, se que no debía estar aburrido en un lugar tan peligroso como este, es decir, en cualquier momento podría ser devorado, destrozado, herido, asesinado, ser desayuno, almuerzo, merienda o cena!.

Pero estaba completamente en silencio, el único ruido estable eran mis pies chocando contra el suelo una y otra vez, mientras seguía dando vueltas en mi habitación, reconoci un sonido muy característico a ciertas personas, mire directamente sobre mi cama, donde no había nadie, pero ese sonido seguía retumbando en mi cabeza, y no era mi imaginación ya que Fredbear también los buscaba con la mirada, y hasta en actos de desesperación movía su cabeza bruscamente  a los lados.

El sonido poco a poco fue bajando su tono, como si se estuviese alejando lentamente, aun así eso no evito que pudiese escuchar murmullos, venían de alguna parte así que me aleje de donde se escuchasen mas fuerte. 

Por otro lado Fredbear empezó a buscarlos por todas partes, no tubo éxito ya que ni una pista tubo;

—¿Fred?— Quería detenerlo, pero lucia enfadado, decidí no molestarlo y encerrarme en el armario. 

Desde ahí seguía escuchando los gruñidos de Fred por la desesperación de encontrarlos, aunque ahora era casi indubitable su sonido. Me recosté a una de las paredes estrechas del armario y cerré mis ojos, queria imaginarme otro mundo, aun que cerrase mis ojos con toda la fuerza que tengo, mi realidad no se cambiaría, y eso me ponía mal. 

Afuera del armario se escuche un estruendo enorme, asome mi cabeza para verificar que Fred estuviera bien. No lograba verlo, salí del armario en su búsqueda, a lo mejor y se había escondido en alguna parte, lo busque bajo la cama cajones, por cada rinconsito de la habitación, me temía que este afuera de esta,.

Aun así me acerque lentamente a la puerta y puse mi oído pegado a la puerta por si lograba oír algo, era todo muy silencioso, cuando estaba apunto de alejarme para abrirla, escuche una leve respiración, me altere y cerré fuertemente la puerta, recordando lo que me había pasado mire fijamente la otra puerta, no le saque la vista hasta asegurarme de quien este del otro lado se haya ido.

Pegue mi oído una vez mas a la puerta, ahora todo si era verdaderamente silencioso, abri la puerta eh intente visualizar algo con la poca luz que tenia, ya que no sabia donde estaba mi linterna tendría que estar en completa oscuridad, como no sabia correctamente si había alguien al final del pasillo solo me dirigí a la otra puerta para verificar;

—¿Humm?— Realmente todo estaba callado de este lado, aun así era realmente dudoso de que alguien este allí.—¿Fred?.

No recibí respuesta y mucho menos una "visita", así que solo reí nerviosamente y camine lentamente dándole la espalda a la puerta "A lo mejor me estoy volviendo loco", Era un pensamiento muy retorcido, sacudí ligeramente mi cabeza, como si estuviese espantando los malos pensamientos , me encogí de hombros y me senté a los pies de la cama, poco a poco me deje caer sobre el frió suelo, suspire pesadamente, mientras me preguntaba donde estaba Fredbear, por mas que quisiese ir a buscarlo, mi cobardía no me permitía pasar mas haya de la puerta.

Junto ambas piernas y escondí mi rostro entre ellas, odiaba ser tan cobarde, aunque intentase no serlo, algo me empuje hacia atrás y me "patea" hasta hacerme recordar, que siempre seré un cobarde.

☁Odio eso de mi mismo☁