╭⋆ . 🖇 ⸼ ¿𝘔𝘦 𝘵𝘪𝘦𝘯𝘦𝘴 𝘮𝘪𝘦𝘥𝘰?!࣪ა ɞ ---

﹃8﹄

Varios minutos pasaron mientras yo no despegaba mi espalda de la pared, tampoco daba mucha atención a las cosas a mi alrededor, estaba más pendiente a mis más profundos pensamientos.. Estaba harto de estar allí, ¿cuando voy a despertar?, ¿necesito de algo para poder despertar?, mi mente estaba llena de preguntas sin ninguna respuesta, por más de que una se acercase sonaba demasiado absurda hasta para la persona más tonta, ligeramente moví mi cabeza intentando "quitar" esos pensamientos, al final suspiré y miré la habitación entera, todo era una copia perfecta a mi verdadero hogar, pero, "algo faltaba", ¿mis padres?, ¿hermanos?, ¿Cariño..?, me levanté del suelo con una mirada poco perdida, me azome a una de las puertas que se encontraba entreabierta, miré lo poco que está me permitía, hasta tomar algo de valor y abrirla un poco más, así, permitiéndome ver un poco más, el pasillo estaba vacío...

Salí de la habitación con lentitud, y un poco de "inseguridad", como si nunca antes haya pisado ese pasillo, lentamente camine hasta el otro extremo, miraba las paredes notando que allí había réplicas de las mismas fotos que en casa, a diferencia de que los rostros eran distorsionados y pocos reconocibles, menos el mío, bajé la mirada lentamente y seguí caminando, buscaba algo.., no sabía con certeza lo que era, pero lo buscaba. Ningún animatronico estaba allí, pero era lo menos que me preocupaba, ¿por qué?, no lo sabía., continúe caminando sin saber dónde, pase enfrente de la cocina pero no le tomé importancia, nisiquiera sí es que "alguien" se encontraba allí, seguí caminando hasta que mi camino recto se acabó, sin decir una sola palabra observé otra réplica que se encontraba allí.., no era diferente a las demás, simplemente podía ser reconocido mi propio rostro, lentamente pose una de mis manos en aquel retrató, mirándolo con detalle, intentando recordar los rostros de mi familia.. Ya que, al estar allí, poco a poco me olvidaba de como eran sus rasgos faciales, y temía a perderlos por completo. Cerré mis ojos unos cuantos minutos, apenas y recordaba el rostro de Elizabeth.. O Michael.

Escuché pasos acercarse a mí, apenas y me moví logré sentir como alguien abrazaba una de mis piernas con cariño, abrí mis ojos y dirigí mi mirada al suelo, logrando ver allí, a mi querido oso dorado, frotando su mejilla en mi pierna, lentamente me puse a su altura y lo cargué para abrazarlo con fuerza, dejando que algunas lágrimas cayeran por mi rostro, no soportaba estar allí, realmente quería salir, y poder estar nuevamente con mi familia.. Sabía que era algo más que complicado, luego de un par de minutos logré calmar mis lágrimas.

– No te preocupes pequeño Kenny.. Estoy aquí contigo.- Oí decir a mi extraordinario peluche de felpa mientras seguía abrazándolo y caminaba por aquello pasillos, eran más grandes de lo que creía, ¿por qué eran tan extensos?, así no eran en casa.., había varias puertas que daban a supuestas habitaciones, a las cuales no tenía acceso, ¿por qué?, recuerdo muy bien que ahí estaba el estudio de papá y justo al lado nuestra pequeña sala de juegos.

Seguía intentando entrar a varias habitaciones, sin éxito, ¿acaso este "mundo" tenía un límite?, era algo dudoso, seguí caminando más tiempo, notando que literalmente no había ningún Nightmare, resultaba muy extraño, pero por más que tubiera la duda de donde estaban, jamás dije alguna palabra. Continúe caminando en un profundo silencio, lo único que se podía oír, eran mis pasos y mi pequeña respiración, miraba todo con atención, en especial los retratos, aún, intentaba recordar con claridad a mis padres y hermanos.. ¿Por qué sí tenía recuerdos de ellos, no era capaz de recordar por completo sus rostros?, ¿¡Por qué tengo tantas preguntas sin respuestas!?, estaba desesperandome lentamente.. Hasta el punto de dejar salir algunas lágrimas, me encontraba "cansado", ¿por qué no fui simplemente un niño "normal"?, seguía derramando lágrimas, mientras Fredbear, se limitaba a acariciar mi brazo con una de sus patas de felpa, intentando calmarme.

Poco a poco mis piernas se detenían por sí solas, parecían ya no querer moverse, tenía demasiada presión en ese momento, realmente.. Estaba cansado, lentamente caí al suelo quedando de rodillas, aquello hizo que Fredbear se preocupase casi al instante, simplemente pude decir un “– Estoy bien.” para intentar que este se calmase, simplemente cerré mis ojos por un par de minutos, para luego levantarme y seguir caminando, forzandome a mi mismo para seguir caminando, forzandome a mi mismo de esa manera. Continúe caminando por aquél extenso pasillo, notando que lentamente ese mismo pasillo, llegaba a un fin muy confuso, pues no terminaba en una pared y mucho menos en una puerta, si no una extensa luz blanca, miré a Fredbear rápidamente, notando que este miraba aquella luz, igual de confundido que yo, pero en el momento de acercarme hasta atravesar la, sentí como me caía al suelo por completo, quedando desmayado en cuestión de segundos.
Al despertar (sintiendo que fueron horas las cuales estuve "dormido") y abrir mis ojos con lentitud, pude notar que nuevamente me encontraba  en mi habitación, me senté lentamente en la cama observando mi habitación detalladamente, definitivamente estaba en el mismo lugar, suspiré desesperanzado, ¿por qué había vuelto?, ¿quien lo trajo?... ¿Donde estaba Fredbear?, me levanté de la cama de una manera lenta y cuidadosa, ya que aún me dolía mis piernas, al posar mis pies en el suelo, cerré levemente mis ojos para terminar de pie en el suelo, y luego ir a la misma puerta por la cual había llegado a aquél pasillo, pero al intentar abrirla estaba con seguro, aun así, decidí forcejear un poco intentando abrirla, sin obtener éxito, me rendí al cabo de unos minutos y me dirigí a la otra puerta la cual sí estaba abierta, salí de la habitación eh intente ubicar el otro camino a través de es puerta, pero terminé en un lugar distinto, ¿por qué?, se supone que ambos debían por lo menos conectarme a donde estaría la cocina.. Pero no lo hacía. Seguí caminando dudoso, escuchando como unos murmullos aumentaban lentamente, inconscientemente me estaba acercando a estos, hasta llegar a poder escucharlos con claridad. Claro, me puse en un punto en el que no lograsen verme.