[ 06: ENCUENTROS ARREGLADOS ]

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¡He vuelto! Espero que les guste el cambio de imagen <3

Capitulo 06 • Encuentros Arreglados CINCO Estaba molesto, estaba irritado y todos los sinónimos de la emoción

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Capitulo 06 • Encuentros Arreglados
CINCO
Estaba molesto, estaba irritado y todos los sinónimos de la emoción. No era la primera vez que Vanya se metía en donde no la llamaban y trataba mal a Mía. Sé que Amelia trata de no generar un escándalo, pero Vanya realmente sobrepasa mis límites.

—¿Era necesario que la trataras así? —Le pregunté mirándola fijamente.

—¿Ella sabe lo que me hiciste? —No fui capaz de responder algo, solo me limité a bajar la cabeza.

—Lo sabía. Por eso ahora soy la mala de la historia. Ella confía en ti, ¿sabes? realmente le importas. No quiero que solo sea para alimentar tu ego, de todas formas, es mi hermana. Si realmente la quieres, cuéntale lo que sucedió.

—¿Es tu hermana? ¿Y dónde estás cuando ella llora por la presión que sufre? ¿Cuándo papá le grita y ella se encierra? ¿Cuándo no puede respirar? Métete en tus propios asuntos, Vanya. Yo veo lo que hago con los míos. —Solté y salí de la habitación, pegando un portazo, dejando a Vanya adentro.

AMELIA
Luego de tres minutos sentada en la escalera, vi a Cinco salir de mi habitación furioso, parecía que en cualquier momento iba a explotar. Le pregunté disimuladamente si necesitaba algo y él dijo que no era nada, así que le creí.

A los segundos llegó Vanya, un poco, ¿Impactada? ¿Qué rayos había pasado ahí adentro?

—Vamos, ya vas tarde. —Comentó ella, bajando los peldaños para dirigirse a la oficina de papá.

Le seguí el paso, aunque yo estaba unos centímetros atrás de ella. No decía nada, simplemente caminaba con un propósito: buscar mi ropa y que yo la dejara en paz.

Entró a la oficina y sacó una bolsa de plástico que protegía unas prendas bastante coloridas. Eran unos jeans negros algo anchos y desgastados, junto a una camiseta azul, de esas que ahora llaman crop top, algo corta a mi parecer. También habían unos aretes gigantes y un cinturón muy llamativo. De todas formas, era algo que la Amelia de los medios usaría en su día a día, por lo que estaba bien.

Me separé de mi hermana y me dirigí a uno de los tantos baños de la casa. Me quité mi uniforme y me probé la ropa que me tocaba usar hoy. Junto a las prendas, estaban unas zapatillas blancas con líneas negras, bastante lindas la verdad. Me miré al espejo, un poco temerosa con lo que iba a ver, pero, para mi sorpresa, me veía realmente bien. Pensé que tal vez sería exagerado, pero me equivoqué.

Mi padre gritó que saliera del baño y obedecí. Afuera, estaban todos mis hermanos esperándome. Todos tenían ropas casuales y se veían realmente genial. Todos los chicos usaban jeans pero se diferenciaban en las prendas de la parte de superior. Por ejemplo, Luther usa un suéter color verde claro y Ben, que es un poco más delgado, usa una camiseta de mangas largas.

Pressure • Cinco HargreevesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora