Amelia Hargreeves o como le dicen sus hermanos, Mía, es extraordinaria. Es una de los 8 increíbles chicos adoptados por el excéntrico millonario Sir. Reginald, y ella, es su mayor orgullo. Puede controlar sus poderes a la perfección, es generosa, at...
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Capítulo 05 • ¿Escuela de baile?
Viernes por la mañana, hoy nos despertaron para desayunar mucho más temprano de lo usual. Habían pasado dos días de mi huida con Cinco (Y del beso). Hemos estado más cercano desde entonces, pero ninguno ha tocado el tema, ni tenemos la intención de hacerlo.
Bajamos la escalera por orden de números, pero nos sentamos sin orden alguno. A mi lado derecho, está Cinco muy erguido, mirándome por el rabillo del ojo. Al izquierdo, está Luther, él cual le hace caras a Diego ya que están peleando. Suspiré y bajé la mirada para ahora centrarme en mi plato vacío. A diferencia de los demás días, hoy no tengo ni idea que debo hacer. Padre dijo que me lo informaría en la semana, pero que no era nada complicado, solo importante.
Cuando papá llega, todos nos levantamos de la mesa hasta que él da la señal para que volvamos a sentarnos. Frente a nosotros, colocan los platos de comida y estábamos a punto de coger los servicios y comer, pero papá nos interrumpe.
-Hay algo importante que deben saber. -Señaló, llamando nuestra atención. -Hoy, todos menos número Siete están ocupados.
Nos miramos sorprendidos, era costumbre que yo estuviera ocupada siempre, pero mis hermanos solo lo estaban cuando había alguna misión, cosa que claramente, no era esta situación, pero antes de que hiciéramos un escándalo, Padre prosiguió:
-Hoy, todos acompañaran a número Ocho a un evento. Número Ocho comienza hoy en una escuela de baile prestigiosa, solo hijos de personas importantes logran entrar y ella hará la prueba, por lo que es importante que vean a la familia reunida, apoyándola. Acerca de las ropas, no usarán el uniforme de la academia, si no ropa normal. Número Siete y yo nos encargamos de eso la semana pasada, por lo que no tienen problema. Les avisaremos cuando deben cambiarse, eso incluye a Ocho. -Dijo esta última linea mirándome fijamente, como si me estuviera advirtiendo que no debo fallar.
Bien, esa era mucha información para procesar. ¿Escuela de baile prestigiosa? ¿Hijos de personas importantes? ¿Haré la prueba? Esto realmente me había impactado, ¿Así que para esto me mantuvo practicando baile por un mes? No me quejo, me gusta bailar. Es una de las pocas disciplinas que hago y realmente disfruto, ya que me siento libre cuando lo hago, como si tuviera alas y fuerzas que antes no tenía, pero, ¿En serio mis hermanos están listos para salir en cámara? Quiero decir, los conozco a la perfección y sé que esto puede funcionar muy bien, o muy mal.
La voz de mamá diciéndome que comiera algo me sacó de mis pensamientos. Cuando reaccioné, todos mis hermanos iban por la mitad de su plato, por lo que decidí apurarme y al menos probar un bocado, pero los nervios de la audición me jugaron en contra. Al parecer, papá se dio cuenta de esto y soltó:
-Número Ocho, ve a prepararte una última vez. No dejes de practicar, no quiero vergüenzas como la última vez. Puedes retirarte de la mesa. -Su semblante era frío, lo decía muy en serio.
