*Editado.
URSS se encontraba en la oficina de su casa, terminando de hacer unos trabajos e informes sobre su ejército y todo lo que había hecho en la guerra, más, fue interrumpido por un ruido fuerte en su casa, esté miro a la puerta, observando como se abría. No sabía que esperar, más existía una hipótesis; Seguramente era uno de sus hijos.
Por mala suerte ese no era el casó.
Miro de quién se trataba, se levantó con molestia aunque al verlo completo, se enteró de que aquel ruido no era simple coincidencia, se llevó su mano a su rostro para reír en lo bajo.
¿Te parece gracioso?. Dile a tus niños que no sean tan impulsivos, me lanzaron un montón de pintura como si yo fuera su lienzo y uno me hecho escarcha hasta en partes que no sabía que podía llegar. ¡Nunca más vengo a tu casa! --- La verdad estaba molesto el estadounidense, una de sus ropas militares favoritas se había dañado.
Primero que nada, yo no te invite, segundo, no vengas más a mi casa sin una recervación previa, tercero, te lo merecías por apresurado, cuarto y menos importante, no me digas como criar a mis hijos, se muy bien lo que debo y no debo hacer con ellos --- Su tono de voz se había vuelto un poco más agresiva de lo normal. Mostrando después de mucho un sentimiento alejado a la frialdad.
No me hables así, rata comunista, si no fuera por mi ayuda, tu no estarías acabando con otra plaga familia tuya --- Explico el Americano.
URSS levantó su mirada con desgano, levantando su mano tiempo después y señalarle la puerta.
Si crees que eres tan importante, anda y vete de mi casa, más no quiero que me pidas ayuda para derrotar a Nazi... --- Habló de manera bastante seca.
Había hecho que Estados Unidos pensará de manera sería sobre sus palabras, no quería dejarse ganar por aquel comunista, más tampoco quería quedar mal ante su figura pública, la cual estaba en formación.
Vine aquí a decirte algo que se que te molestará, más en mi defensa fue culpa de Reino Unido --- Explico el inglés de manera confiada. Más en sus adentros se moría de miedo.
¿Qué paso exactamente? --- Preguntó, mirando fijamente unos segundos a Estados Unidos, esperando que contará los hechos para saber si mentía o no.
Yo te conté... que habíamos logrado conquistar a Italia fascista... El problema de estos surgió, que el intento escapar varias veces mientras mi hermano se encontraba en él territorio, y lo conoces, el es muy... --- Intento completar su relato, pero fue interrumpido de manera brusca con un golpe fuerte en la mesa de parte de URSS.
Ve al grano, no tengo todo el maldito día para ti... ---
UK, lo torturaba cada vez que intentaba escapar, más Italia siempre lo volvía a hacer una y otra vez, hasta que UK... se pasó solo un poco... --- Dijo aún nervioso y con una voz muy baja.
¿Cuánto exactamente? --- Pregunto sin mucho interés.
URSS personalmente no le interesaba la vida de Italia fascista, simplemente quería que estuviera con vida un tiempo más para ver si decía algo útil, luego le daría una muerte lo menos dolorosa posible, en dado caso que colaborará.
Se quedó ciego de los dos ojos, tiene actualmente heridas muy graves en el estómago... si antes no quería colaborar, ahora menos lo hará. --- Explico Estados Unidos, se sentó en una silla al frente del escritorio de URSS, esperando una respuesta.
Por otro lado el ruso, simplemente tomo un cigarrillo, lo prendió y empezó a fumar, pensando en que haría entonces.
Tendrás que violarló. --- Habló de manera fría.
What? --- Se quedó atónito ante las palabras de URSS.
Lo que escuchaste... yo lo llegué a conocer, así que has lo que te digo. También puedes decirle a ese hermanito tuyo... que lo haga, después de todo también tiene derecho a divertirse un rato. --- Se volvió a colocar el cigarrillo para fumar un poco más y volverlo a sacar. --- Pero si decide hablar, no le hagas nada.
Estados Unidos estaba impresionado de la manera tan fría, y casi sin emociones de URSS, sintiéndose levemente agradecido de no haber sido hijo de ese tipo.
El euroasiático al terminar su cigarrillo y ver que Estados Unidos seguía allí, sin decir palabras, sonrió, acomodándose en aquella silla de cuero.
Ya puedes largarte... --- Dijo sin más en un tono fuerte. Viendo cómo Estados Unidos se paraba del asiento y se iba de la habitación.
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Nazi se encontraba caminando por las celdas, acompañado está vez de dos guardias mientras de adentraba cada vez, más y más, fumando un cigarrillo para calmar el odio, que escondía su miedo hacia quien le haría una visita.
Al llegar a la última celda de aquel pasillo, ordenó con una voz autoritaria a uno de sus guardias que abriera la puerta de aquella celda. Entro y dejo a sus guardias fueras quien se aseguraba de la seguridad de su jefe.
Hoy... Nos divertiremos mucho... --- Dijo el Nazi. Con una sonrisa bastante macabra en su rostro.
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- Acepto sugerencias.
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- Personajes que quieran incluir.
- Ideas.
- Saludos el próximo capítulo.
1000 palabras
// Disculpa a todas las personas que la dejé esperando por meses por este capítulo, pero por fin eh vuelto, no prometo quedarme mucho tiempo, pero intentaré adelantar lo máximo que pueda.