Capítulo 3 - Tiempo

525 50 21
                                    

El despertador sonaba y una mano salió debajo de las sábanas para apagar este. Una blanca cabellera se asomó y unos hermosos ojos color magenta brillaron en compañía de los traviesos rayos de sol que entraban al cuarto.

Aquella jovencita, se estiró para luego ponerse de pie y caminar hacía la ventana y abrir esta. La brisa era agradable, moviendo su cabello, el cual tenía cerca de los hombros. 

— Hoy parece que también será un gran día. — Dijo para sí misma, volviendo para acomodar un poco su cama.

— ¡Towa, el desayuno está listo! — Llamó Moe.

— ¡Ahora voy, mamá! — Fue la respuesta de la albina que decidió primero vestirse para ir al colegio.

Han pasado un poco más de dos años en que la hanyo fue arrastrada, literalmente, de regreso a la era Reiwa, cosa que no tenía sentido, ya que no pertenecía allí. Esto era algo que la distraía de vez en cuando.

Flashback

"Tras caer al pozo, Towa cayó de manera brusca contra el suelo de este. Estaba confundida, ¿qué fue eso? ¿por qué? 

Se puso de pie y sacudió su ropa, comenzando a llamar a sus amigas.

— ¡Setsuna! ¡Moroha! — Guardó silencio unos momentos y tras ver que no obtenía respuesta, volvió a llamar. — ¡Oigan, no es divertido! ¡Sáquenm-... —

¿Por qué no veía el cielo del otro lado? El pozo estaba... ¿cerrado?

Mayor fue su confusión cuando escuchó un maullido, pero uno que conocía muy bien.

— ... ¿B-Buyo?... —

De la mera desesperación trepó por las piedras que había en su interior y abrió las pequeñas puertas que lo cubrían, rompiendo así un pergamino puesto por el abuelo Higurashi. Si, no funcionaba, como de costumbre. 

Towa observó a su alrededor, y luego bajó la mirada al pequeño felino que le ronroneaba. Salió por completo, tomando al gato entre sus brazos, definitivamente no era un sueño...

Sus oídos fueron invadidos por el sonido de los vehículos, su sentido auditivo se había vuelto más sensible, al igual que su olfato que esto la aturdía. Abrió suavemente las puertas, acabando de confirmar que estaba de regreso... Era el templo Higurashi...

— . . . —

Ni una palabra pudo decir al ver a la pequeña castaña correr en su dirección, llamándola.

— ¡Hermana! ¡Hermana! — Exclamó feliz, abrazando a la mayor por la cintura, provocando que esta soltara al felino.

No hizo mucho a que los demás miembros de la familia salieran tras oír este llamado, quedando más que asombrados por el regreso de la joven de cabellos blancos. Sin embargo, Sota apresuró el paso tras ver que esta casi se desvanecía, dejándose caer hacía atrás, acabando en los brazos del azabache.

Demasiado estrés para el corto tiempo, lo que le provocó fiebre por un par de días.

Towa cumplió su promesa, sin siquiera haber tenido un plan para su regreso."

Fin Flashback.

Tras su regreso, la luna nueva no había vuelto a afectarle, por lo que había optado por dejar crecer su cabello esta vez. Las peleas también habían disminuido, ya que sus acosadores habían, ¿tomado conciencia? durante su larga ausencia, lo que les llevó a no intentar buscarla, al menos por un tiempo.

Grieta「 Ritowa 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora