CAP 27 | Otra vez

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Al acabar de desayunar subimos a la habitación para que recibiera se regalo.
- Rubén.- subiendo las escaleras.- ¿puedo preguntarte algo?
- ¡Claro! Dime...
- Aún no entiendo por qué no me dijiste lo de esa chica. O sea, entiendo perfectamente el favor que le quisiste hacer pero aún no sé por qué no me lo dijiste para que yo supiera que ibas a fingir.
- ¿De verdad quieres sacar ese tema otra vez?- se detuvo a mitad de las escaleras.
- Solamente quiero resolver esa duda, porfa.

Se sentó en las escaleras y dijo:
- Verás, en principio te lo iba a contar pero luego tube una conversación con mangel.- seguidamente me senté a su lado.- le comenté lo de mi amiga y...- de repente escuchamos un fuerte ruido que venia de delante de la casa.

Ambos acudimos rápidamente al origen del ruido. Vimos a su hermanita en el suelo y su bicicleta a pocos metros de ella. Empezó a llorar.

- Cariño, tranquila, que no pasa nada.- le tranquilicé. Rubén empezó a hablar con ella.
- ¿Que te ha pasado? Pobrecita, ven aqui.- la tomó en brazos.

Era la imagen más tierna que habia visto en mi vida. Rubén tenia a su hermanita sentada en sus brazos y no para de mirarle con termura. Que precioso que es...

-¿Que ha pasado?- llegó su madre.

Los tres entran a casa mientras yo decidó ir a buscar la bicicleta. Estaba a unos cuantos metros de nosotros. La recojo y levanto la cabeza para ver una familia que acude a mi. ¡Era la chica del cumpleaños! Dios, sé que es amiga solo amiga de Rubén pero no me gusta que este cerca. Intenté comunicarme con ellos lo mejor que pude con mi noruego básico y nos dirigimos hacia la entrada.

De repente veo como la chica empieza a correr hacia Rubén, quien se encontraba en la puerta, para abrazarle. Enseguida recordé que tenian que fingir que son pareja y se me rompió el corazón en mil pedazos.

Estubimos todos reunidos toda la tarde, hablando. Eran las 19:00 más o menos. Yo tenia a su hermanita encima del lomo de mis piernas y Rubén estaba con la guarra esa. Se me notaba muy incómoda.

Cuando su hermanita se quedó medio dormida en el sofá yo decidí salir del show de cariño de besitos y abrazos. Agarré una chaqueta y me fui a pasear por el puerto.

¡Joder! Este puerto me recuerda al que sale en sus videos...de pronto me suena el móvil. Rubén me estaba llamando:

- Dime...
- ¿Dóndo estas, ___?
- En el puerto. ¿Tú?
- Siguiendo el rastro de tus huellas en la nieve.- se notó como sonrió.- ¡Que pies mas chiquititos!

No me di cuenta que aun quedaba nieve en algunas zonas.

- Te veo, no te muevas, porfa. Ya voy.- colgó.
- ¿Por que te vas?- viniendo hacia mi.
- Rubén, lo siento pero no podía soportarlo más.
- Lo siento mucho, ____.
- ¿Por qué de repente me llamas por mi nombre y no me dices cariño?
- Perdona, no me habia dado cuenta.

Se produjo un silencio mientras yo miraba al lago y Rubén a mi.
- ¿Por qué no se corta un poco, "tu amiga"?- me enfadé.
- Cariño, es lesbiana.
- Podría ser bi. ¡Eso no importa! No tiene por qué estar encima tuyo todo el rato.
- ¿Como que no tiene nada que ver? ___, todo es una mentira.
- ¿Y por qué no me lo contaste antes? ¿Que dijisteis en esa conversación Mangel y tú?
- Ahora no es momento para eso. Estaba confuso y no sabía qué hacer.
- Pero ¿confuso de qué? ¿No sabias si me gustabas o algo?
- Te he dicho que te lo contaré cuando estes mas calmada. Quiero que te lo tomes bien.
- ¡No me digas que me calme!- le dije con un tono más fuerte.
- Vale.- miró alrededor con cara de diferencia. Se le notaba molesto.- ¿Sabes? Ojalá te pudiera decir que me has mostrado cariño siempre. Me refiero a que no me has mostrado mucho tus sentimientos y era difícil saber algo.

Eso me hizo tener ganas de llorar, se me notaban pero no queria soltar una lágrima.

- ¿No piensas decirme nada, verdad?- dijo.- Tranquila, haré lo mismo que tú: reprimiré lo que siento. No esperes un te quiero por mi parte si sigues con esa actitud.- dió la media vuelta y empezó a caminar de vuelta a casa.

- No me dejes sola...- conseguí pronunciar muy flojito y con voz de llanto mientras brotaban algunas lágrimas.

Con rabia en el cuerpo se giró rapidamente hacia mi diciendome enfadado:
- ¡____ joder! No conviertas esto como si fuera mi culpa. Tu has venido hasta aqui solita, sabes volver a casa.
- Rubén, ¿me quieres?- con voz de pena.

Cuando los sueños despiertan (Tú y Rubén)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora