Karin Usumaki

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Era un día lluvioso, las calles estaban casi vacías, a excepción por las personas que corrían para protegerse de la lluvia por haber olvidado su paraguas, y las que caminaban con uno hacia sus casas.

El reloj marcaba las cinco de la tarde, pero pareciera ser más noche por las nubes negras que cubrían el cielo.

Una chica pelirroja iba de regreso a su casa, sostenía su paraguas en una mano; su trabajo como enfermera del hospital central de la aldea quedaba un poco apartado de su pequeño departamento.

Estaba cruzando por una calle, la que estaba antes de su departamento, cuando de lejos noto a alguien desplomarse en el frío suelo.

Sin pensarlo dos veces, corrió hacia esa persona, al llegar junto a ella se dió cuenta de que era un hombre.

Dejó el paraguas y la bolsa a un lado, le dió la vuelta al chico y se sorprendió de ver todos los golpes en su rostro.

Lo revisó con la mirada rápidamente, para ver si tenía otras heridas, y pudo notar que de su costado salía mucha sangre.

Escuchó como se quejaba del dolor y volteó a ver su rostro.

--. Voy ayudarte.-- dijo la chica mientras doblaba un poco su suéter del brazo.

--. Aguanta un poco más.-- se apresuró a extender su brazo hacia el chico al ver que comenzaba a cerrar los ojos --. Sé que sonará raro, pero tienes que morderme y beber de mi sangre hasta que te diga que pares.--

El chico se veía desorientado, pero asintió débilmente e hizo lo que le dijo, la chica hizo una mueca de dolor que no pasó desapercibida por el contrario, luego de beber lo suficientemente, el chico se separó de su brazo.

--. ¿Qué haces? Aún no te digo que pares.-- dijo un poco alarmada, pues el chico aún necesitaba de su sangre para recuperarse totalmente.

--. Con, eso es s-suficiente.-- habló con dificultad.

--. Tu herida aún no se cierra y sigues perdiendo sangre.-- con su otra mano comenzó a tratar de parar el sangrado con el Jutsu médico.

--. Podré, mantenerme estable, por unos minutos.-- respiró profundamente antes de seguir --. Tiempo suficiente para que te hagas cargo de mi herida.-- dijo seguro de sus palabras.

La chica se puso nerviosa, ella solo era enfermera de apoyo, no sabía mucho más que estabilizar un poco a alguien con el Jutsu de curación y curar las heridas con su sangre, fuera de eso no sabía nada, era completamente inútil.

Solo era enfermera por su capacidad de curar con su sangre, o para ayudar con los papeles.

--. P-pero y-yo no...

--. Eres enfermera ¿No?.-- sonrió de lado.

--. ¿Cómo lo sabes?.

--. T-tu traje, confío en que podrás sóla con esto.-- luego de eso cerró los ojos, quedando inconsciente.

La chica abrió sus ojos con sorpresa, nunca nadie le dijo que confiaba en ella y en sus capacidades fuera de su sangre.

Así que decidida, continúo hasta parar el sangrado, luego lo cargo, con mucho esfuerzo, hasta su casa.

Curó la herida y la vendó.
Un par de horas después el chico despertó.

Trató de ubicarse un poco, pero no reconocía el lugar donde estaba, se sentó inspeccionando el lugar.

Escuchó el ruido de la puerta siendo abierta y volteó a esta.

La chica de cabellos rojos que vio antes de quedar inconsciente se hizo presente frente a él.

--. Que bueno que despertaste, mi nombre es Karin Uzumaki.-- dijo poniendo la bandeja que llevaba consigo en el mueble junto a la cama --. Tu herida sanará muy pronto, solo tienes que beber un poco de mi sangre para estar como nuevo.-- sonrió antes de doblar su blusa y extenderle el brazo.

--. ¿Eso es sopa?.-- ignoró completamente lo último dicho por Karin.

--. Sí.-- respondió un poco desconcertada
--. Puedes comer un poco después de...

Karin no termino de hablar al ver que el chico se acercaba a la bandeja y tomaba el plato de sopa.

--. Mi nombre es Sasuke.-- dijo antes de darle un sorbo a la sopa --. Y agradezco lo que hiciste por mi, pero no tomaré de tu sangre a menos que sea de vida o muerte.

--. Pero es para que te recuperes.

--. Puedo hacerlo en unos días más, de todos modos la herida ya no es un peligro.-- volvió a comer un poco de sopa --. Me iré en cuanto terminé la sopa.

--. Puedo llevarte al hospital para tu recuperación.

--. No es necesario, ya he lidiado con heridas peores, podré con esta.

--. Aunque sea quédate hasta que la herida se cierre por completo, no podré dormir agusto sabiendo que algo podría pasarte estando así.

Sasuke terminó de comer y dejó el plato donde lo agarro.

--. De acuerdo, pero nada de que me ofreces tu sangre, eres capaz de curar a alguien sin necesidad de ocupar la demasiado, y la prueba de ello soy yo.-- dijo con seriedad.

Karin asintió con pena, tenía un sonrojó en sus mejillas al ser descubierta, pues pensaba ofrecerle un poco más de su sangre.






Los días pasaron y ambos convivieron mucho, Karin le ayudaba en su recuperación y Sasuke le enseñaba algunas cosas que podrían servirle en su trabajo.

También le ayudo a tener más confianza en sus capacidades como enfermera y a no depender solo de su sangre.

Aunque nunca le dijo el motivo del estado en el que se encontraba cuando se conocieron.

Cuando Sasuke se curó completamente decidió quedarse unos días más, para ver la aldea.

Se fue del departamento de Karin, pero se quedó en la aldea, en una casa que estaba a las afueras de esta.

El lugar le había gustado mucho, por lo que decidió quedarse a vivir un tiempo ahí.

                                      

                                      





















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Nueva historia, así es (。•̀ᴗ-)✧

Porque lo prometido es deuda, por fin, les traje la historia donde hablaré un poco del lenguaje de las flores.

Espero les guste y la apoyen.

En los primeros tres capítulos pondré la forma en que los cuatro se conocieron (Sasuke, Suigetsu, Karin y Juugo).
Los cuales serán los más largos de la historia, los demás capítulos serán más cortos.

Disfruten de la historia 🌻.

Nos vemos en el próximo capítulo 👀.

Una flor por cada sentimiento [JuuSasu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora