- ¿Pero que mierda dije?.- Susurro mientras veo a Conan subir a mi habitación.
- Bueno, espero que te vaya bien con tu cita, JAJAJA.- Luther casi se hacía encima de tanta risa que le ha dado la situación.
- No te he tirado los dientes solo porque tú mantienes a Alyssa contenta con tus series raras, pero créeme que estoy a nada de que eso me importe poco.- Sujeto a Luther por la camisa.
- Ya Demian, cálmate, Luther solo bromeaba.- Diego me mira desde el sofá.- Mejor ve a ver qué hacen tu chica y el cachorro.
- No es mi chica.- Hago una mueca.
- Quisieras.- Susurra Luther coqueto.- Uf, uy, ojalá.
- Luther ya dejalo arreglar sus problemas conyugales.- Diego esconde una sonrisa.
Se los voy a resumir, creo que la loca no me quiere ver y se quedó a hacer una pijamada con el cachorro... En mi habitación.
Ahora mismo estoy en la sala simplemente viendo el techo.- Ya no puedo más.- Escucho una voz en ni cabeza y se muy bien quien es.
- Ya lo se, Dante.- Susurro.- Pero debo de esperar, ella no sabe nada de eso.
- Sabe de mi... Y de Nobara.- Escucho
- ¿Ella ya se lo dijo?.- Fruncí el ceño.
- Hoy, antes de que el cachorro entrara para hablar con ella.- Repite.- Chico, se que la vida humana es algo lenta, pero yo necesito estar con Noba, tengo muchas vidas sin verla.- Escucho una risa melancólica.
- En el peor de los casos, ¿cuánto tiempo tengo?.- Susurro mirando el techo.
- A lo mucho una semana, antes de que tú lado animal responda por si solo al instinto de la necesidad.- Escucho.- Y sabes que tú no puedes controlar eso.
- Veré que hacer ahora cállate, quiero dormir.- Me giro un poco en el sofá y me dispongo a dormir.
Ya es sábado, diría que disfrutaría mucho el fin de semana de no ser porque Luther estaba recordándome de mi "cita" con la amiga de Selene. ¡Mierda no sabe nada!.
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La Protegida
Werewolf¿Recuerdan que cuando niños sentíamos que la luna nos seguía a donde fuéramos? Mamá siempre me dijo que la luna me protegía, a donde fuera estaba conmigo y nunca me dejaba sola por muy nublado o tormentoso que estuviera. Tal vez lo que realmente me...