Danger

Capítulo 56: "Muévete y le disparo."

Kelsey’s Point of View:

Mi estómago se desplomó en el suelo con horror. Esto no podía estar pasando ahora mismo.

El momento en el que Justin se congeló a mi lado, sabía que algo iba mal pero nunca pensé que la razón detrás de eso fuera que Luke estaba aquí.

De todos los días en los que él podría venir aquí, tenía que ser hoy.

“Kelsey, cariño, ¿Estas bien?” Era mi mama pero por alguna razón, a pesar de lo cerca que ella estaba, parecía estar tan lejos.

Tragué saliva, mirando mientras Luke sonreía coqueteando -o eso parecía desde mi punto de vista- asquerosamente a una camarera antes de que ella riera, y poniendo una mano sobre su hombro mientras le señalaba hacia algo, lo que supuse que era su asiento.

Volviendo mi cabeza para encarar a mis padres, pellizqué la mano de Justin para llamar su atención también.

“Kelsey, ¿Estas bien?” Una expresión de preocupación se marcó en la cara de mi madre.

“Oh, uhm, si, estoy bien.” Sacudiendo mi cabeza, tomé un sorbo de mi bebida.

“Estas temblando cariño.” La preocupación teñía sus palabras y no fue hasta que miré hacia abajo cuando me di cuenta de que lo estaba.

“Kelsey...” Mi padre empezó ahora, con sus cejas arrugadas. “¿Estas segura de que estas bien?”

Los ojos de Justin quemaban contra el lado de mi cara, su mirada era tan intensa que podría, si fuera posible, quemar haciendo agujeros a través de mi carne. Sabía que el quería decir algo pero si él lo hacía, su tapadera se estropearía y todo este infierno estallaría.

Lamiendo mis labios, aclaré mi garganta. “Estoy bien; solo me pareció ver un bicho o algo...” Hice un gesto con una mano quitándole importancia, tratando de quitarme el tema de encima.

“¿Un bicho?” Dennis me miró, finalmente hablando desde que habíamos llegado.

“Si.” Susurré. “Un bicho.” Una vez que vi la mirada de sorpresa atravesar la cara de Dennis, la culpa me golpeó. “Lo siento, no fue mi intención hablarte de mala manera.” Suspirando, me puse de pie. “¿Me podéis perdonar un momento, por favor?”

“¿A donde vas?” Mi padre preguntó, sorprendido por todo lo que estaba pasando.

“Al baño.”

Mi madre asintió con la cabeza, haciéndome un gesto con sus manos para que fuera. “Estaremos aquí cuando regreses.”

Le envié una simpática sonrisa, dándole las gracias silenciosamente, enviándole a Justin una mirada de desesperación justo después diciéndole que estaba nerviosa y preocupada.

Saliendo de su asiento a mi lado en su puesto, él espero a que yo saliera antes de mirarme con una expresión solemne. Cogiendo mi mejilla en la palma de su mano, la acarició suavemente, sus ojos estaban clavados en los míos. Inclinándose, el presionó sus labios en mi frente. “Va a estar bien.” El murmuró.