Roberto's Harem

6

De la nada y contra todo lo previsto, Roberto despertó, viendo los ojos preocupados de Diego mientras esté sostenía su espalda húmeda.
Se había desmayado en la ducha...

-¿Qué te pasa? ¿Estás bien?- dijo preocupado el chico.

-Verga...- dijo Roberto, cerrando los ojos con fuerza haciendo su cabeza hacia atrás, cayendo en cuenta que todo lo que había pasado no era más que un sueño húmedo...

Inmediatamente volteó a ver a su miembro...

...que efectivamente, estaba duro.

Era deprimente que haya sido sólo un sueño pero era aún más denigrante que estuviera desnudo en los brazos de su amigo con la verga parada.

¿Podía tener más mala suerte?

-Estoy bien... Pero ¿Podrías cerrar los ojos un rato?-

Barca confundido no entendía, su repentino sonrojo y vista baja, ya que lo hacían ver cómo una chica virgen de preparatoria... O eso pensaba antes de percatarse del "duro" problema.

-Oh, verga- dijo volteando hacía otro lado poniéndose rojo.

-En efecto, verga- habló el otro con una risa nerviosa.

Eso desencadenó una carcajada de parte de Diego.

-Ya weey, me la estaba pasando chido hasta que me despertasteee- dijo avergonzado pero la diversión no se quedaba atrás para Roberto, mientras que lo rojo no parecía irse de su rostro.

-JAJA, ¿Necesitas una mano?- habló barca ahora intentando levantar a Roberto volteando a ver su rostro divertido.

Roberto como pudo se tapó con sus manos mientras Barca lo levantaba tomándolo por los costados de su pecho.

-Con tu boca me basta.- dijo Roberto.

-No lo sé, ¿Cuánto me pagarías?- dijo Barca, colocándolo en la cama cercana.

Roberto quedó con las piernas ligeramente abiertas ya que se sentía con demasiada pesadez en su cuerpo como para moverse. Aunque Barca contra todo pronóstico se quitó la camiseta y la arrojó a la entrepierna de Roberto para que pudiera cubrirse bien, aceptándola por necesidad.

Roberto observó detalladamente analizando el pecho de su amigo, que ya había visto por sus 100 historias de instagram ya que está yendo al gimnasio, y sí, le estaba dando frutos.

Roberto mordió su labio y dijo -Si le invertiría a tus servicios, eh~- dijo tonteando para incomodar a su compañero.

El otro sólo río un poco ligeramente avergonzado.

-Dime, a ver si me convences- dijo ahora Barca alzando una ceja.

-Si me estás probando vas a terminar perdiendo, culero- dijo Beto, un tanto serio mientras le sonreía con picardía.

-jaja... Ni dios lo quiera wey- dijo parando todo el juego pero la última mirada que le lanzó a Roberto hizo que este se estremeciera.

A lo mejor fue por qué desde hace rato está duro y no hace nada al respecto.

-----

Barca ya estaba en su casa un tanto victorioso como arrepentido por lo que había pasado.

¿Acaso no tiene algún tipo de relación con Pan?¿Cómo la sostendría? Si parece que ni se llevan tanto.
Y sí no, ¿Por qué lo parecía?, Antes que nada ¿Pan es gay?.

Suspiró analizando todo, ya que después de esa conversación decidió salir lo más rápido de ahí, después de esa mirada que le dió, y lo único que pudo decirle fue "Suerte con tu pene" e irse de ahí, aunque se arrepiente por qué no sabe si fue lo correcto.

Aunque la culpabilidad no se le ha ido del todo, ya que...

... ¿Por qué diablos Roberto? ¿Y POR QUÉ DIABLOS AHORA?

"Si le invertiría a tus negocios, eh~"

Fue lo que llegó a su mente justo en ese preciso momento, tranquilizando lo y provocándole un sonrojo que cubría su rostro, se sentía animado, pero la realidad no lo dejaba tranquilo, sería muy raro... si... Tuvieran algo.

---------

Mientras tanto Roberto... No pensó en eso demasiado sólo pensó en la forma en la que Barca le pagaría la vergüenza que le hizo pasar y después se masturbó para bajar su erección del momento, aunque si le llegó a la mente lo que pudo haber hecho si las cosas se calentaban más, estaba aliviado pero curioso.

Pero ese alivio se fue cuando recibió una llamada de un chico que dejó roto en alguna parte de CDMX.

---------------------------------------

Perdón por lo corto, sólo diré que una disculpa.