NO MÁS SECRETOS✅

Capítulo XLXI

A la mañana siguiente despierto y todo parece tan lejano, pero el cansancio en mis cuerpo y la evidencia en mis acartonados y cansados ojos de que he llorado por horas está ahí.

Volteo a mirar mi habitación y me encuentro con Bruno dormido en el sofá de mi habitación.

No puedo evitar sentirme bien por eso, al menos algo bueno en medio de la tormenta, Bruno me había prometido que estaría ahí y desde aquel momento que me abrazo después de romper el parabrisas del auto y de alejarme de los vidrios rotos, no se apartó de mi lado. Recuerdo perfectamente como después de lograr controlar mi llanto, mire a mi alrededor y todas las miradas de los Búhos fueron de preocupación y tristeza, la chica búho también estuvo ahí, sin embargo, no por mucho tiempo ya que en cuanto en fue posible me fui sin mirar atrás.

Poco después tomo fuerza, me levanto de la cama, tomo una ducha me visto y vuelvo a mi habitación.

— Bruno ya no está ahí — escucho su voz en el piso de abajo y me dirijo ahí de inmediato —

Escucho la voz de mi tía en la sala, tomo una manzana de la cocina y voy donde están ellos.  Mi tía y Bruno se encuentran en el sofá observando la televisión, específicamente el noticiero.

— En el mundo de los negocios y el espectáculo, las declaraciones del día de ayer del reconocido Hombre de negocios de Andrew Evans causaron mucho más revuelo del que muchos imaginábamos, vamos a recordar lo sucedido —

— ¿Señor Evans es cierto que donará la mayor parte de su colección de autos a la caridad ? —

— Así es — habla él y aunque aparenta estar igual que siempre puedo observar que él tampoco la está pasando bien — serán entregados a diferentes fundaciones en diferentes rincones del país, para que puedan conseguir de ellos lo que les sea posible —

— Mencionaba antes de iniciar la rueda de prensa que hay un único requisito para estás fundaciones — él asiente —

— Así es, el auto debe ser subastado o vendido únicamente en el precio que yo indicare a cada auto o un precio superior  —

— Esta deshaciéndose de la evidencia — escucho la voz de mi hermano menor y es ahí cuando me percato de que mi familia, mi tía y mi primo están en una video llamada —

— No es así — le corrige Bruno —

— Esta desviando la atención — intervengo y todos me miran — Buenos días familia — saludo y ellos responden cautelosos, es más que obvio que ya conocen la situación, la pregunta es ¿Quién se los dijo?—

— Entre otras cosas — añade Bruno —

— Señor Evans, ¿tiene acaso la Señorita Parks alguna influencia sobre está generosa donación ? —

— No — responde él de inmediato y me percato de como él estaba esperando esa pregunta, su respuesta fue ensayada — Quizá es momento de que se los informe ya que ella no tiene ningún interés en hacerlo, ni en mi — intenta hablar con despecho — la Señorita Parks y yo terminamos hace ya tres meses  —

— ¿Qué? ¿Cómo? — y un sin fin de murmullos se escuchan en la televisión — ¿Y cuál fue el motivo? — se escucha sobre los murmullos —

— Eso tendrían que preguntárselo a la Señorita Parks, yo aún lo desconozco —

— La prensa vendrá por mi — susurro y Bruno asiente a mi lado —

— Es su manera de protegerte — habla Sebas y volteo a mirar la video llamada sin comprender — si no les das respuesta a sus preguntas te perseguirán a todos lados, habrán cámaras siguiéndote siempre listas para captar lo que se les presente, simplemente no estarás sola y es lo que Evans está buscando— presto atención a las palabras de Sebas y una teoría se comienza a crear en mi mente —