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—¡¿Y está mierda de que nos sirve?!—. Gritó Bakugou.

Campamento no suele ser sinónimo de diversión, bueno, usualmente lo es, pero no en esta ocasión.

El campamento de la UA era dos meses antes del fin de curso, después, se celebraría un festival con una presentación y al final una feria para celebrar el cierre de su curso.

Izuku estaba ansioso por las vacaciones, y por volver a casa con su madre, despertar en su cuarto propio decorado a consciencia con figurillas de All Might, desayunar lo que su madre hiciera y salir a vagabundear en la ciudad.

Habian escuchado de los cursos mayores que el Campamento era divertido, pero sólo era otro entrenamiento duro y rigoroso en medio del bosque y la soledad, ¡no había nada de divertido!

—¡Midoriya, 50 sentadillas más!

—Nooooo—. El chico ya llevaba 150, y cada que se equivocaba le aumentaban 50, ¡ya no podía con las piernas!

—¡Ashido, otras 50!

—¡Sensei, por favor!

—¡Si sois buenos para realizar otras actividades con sus parejas sin perder rendimiento, entonces podrán hacer 200 sentadillas!

La clase entera chillo de fastidio.

—Me voy a morir virgen—. Se lamentó Mineta

—En algo estamos de acuerdo niño—. Le dijo Aizawa

—Pero, las Yaoyotetas de Yaoyoruzo están tan cerca—. El chico estiró las manos y recibió un manotazo por parte del profesor Yamada

—Que asco

—Viejo, para de una vez—. Le pidió Kirishima, pasándole su sudadera a Yaomomo para que se cubriera de aquellas indiscretas miradas de Mineta

—¿Podemos tomar un descanso?—. Pidió Ojiro, le faltaba el aire y se sentía ahogado

—Solo los perdedores toman descansos—. Los regaño Aizawa

—Pero ustedes son muy buenos niños— La señorita Kayama llegó cargando una bandeja con vasos de agua—. Y los niños buenos merecen descansos, vengan y tomen algo.

La señorita Kayama siempre era tan dulce con ellos.

Era el segundo vaso de agua que se tomaba en esos diez minutos de lapso que tuvieron.

Izuku estaba agradecido de poder tomar un descanso, a su lado, Denki buscaba con la mirada... Bueno, nunca sabía que le pasaba por la cabeza a Denki.

—Izuku, ¿me acompañas a buscar al profesor Hizashi? El tiene el botiquín médico, quiero pedirle una pastilla para las náuseas.

Mina, cerca a ellos decidió unirseles.

—Quiero una pastilla para los cólicos—. Dijo la chica.

Los tres se encaminaron por el sendero entre los árboles, recordando por donde habían visto irse al rubio profesor.

Mina los detuvo de pronto, a unos cuantos metros, el profesor se había quedado escondido tras un árbol, ¿que espiaba?

Denki se acercó sigilosamente tras de él, y asomo la cabeza hacia donde veía el hombre.

Varios metros alejados de ellos, el profesor Aizawa dormítaba profundamente contra el tronco de un árbol.

—Mr. Yamada— Lo llamó Denki, él hombre rubio pego un salto y volteo rápidamente a verlos—. ¿Está viendo a Aizawa Sensei dormir?

Hizashi enrojecido mientras veía a los tres adolescentes confundidos, tanto Izuku como Denki y Mina acababan de generar muchas preguntas en esas cabezas mal peinadas.

Like Love And DanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora